Los colegios de Trabajo Social en las provincias de Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas advierten de que el Océano Atlántico se está convirtiendo en un “gran cementerio” de personas migrantes, como demuestra el naufragio frente a las costas de Mauritania en el que han fallecido más de 60 personas.
En su opinión, las causas de la salida de los países de origen están relacionadas con la “falta de oportunidades” para jóvenes, mujeres y niños, un sistema económico internacional “injusto” o la persecución de los derechos políticos y sociales, entre otras.
En esa línea, indican que los estados pueden regular las entradas y salidas en sus fronteras “pero también deben cumplir la legislación en materia de asilo y estar preparados para socorrer en el mar a los náufragos”.
Además de la declaración de los Derechos Humanos, apuntan que la Declaración de los Derechos de la Infancia tampoco se está cumpliendo con los menores extranjeros no acompañados, cuya tutela está en mano de los gobiernos autonómicos.
Por ello, solicitan que las personas migrantes “no se conviertan en un arma arrojadiza”, al tiempo que entienden que “la mejor celebración” del aniversario de la declaración de los Derechos Humanos que se puede hacer desde las instituciones canarias y estatales “es que se cumplan esos derechos para todas las personas, sin distinción por su origen, raza, religión o procedencia”.