El verano será más cálido y seco de lo normal en el centro, este y sur del país, pero en Canarias, debido al estancamiento del anticiclón de las Azores se registrarán más precipitaciones “de las que están acostumbrados en esta zona”, sobre todo en el norte de las Islas, según ha advertido la meteoróloga Mar Gómez, de eltiempo.es.
La meteoróloga ha señalado que las características de España durante el verano climatológico (junio, julio y agosto) es una temperatura media de 23ºC. Las precipitaciones podrían estar por encima de la media en Canarias (entre 0 y 50mm) donde podríamos tener temperaturas por debajo de la media en las islas más occidentales.
Además, destaca la aparición de noches tropicales en muchas zonas de la Península. Son aquellas en las cuales las temperaturas mínimas superan los 24ºC.
Sin embargo, estos valores se superaron con creces durante el año 2015, que se caracterizó por haber sido el segundo año más caluroso desde 1961. Según Gómez, 2016 no alcanzará los valores que se vivieron el año pasado, cuando en ciudades como Córdoba, Zaragoza o Murcia, se superaron los 45ºC. De hecho, ha indicado que no se prevén olas de calor en los próximos meses.
Así, en la mitad oeste de la Península se esperan valores dentro de la media habitual y sólo se esperan anomalías (de entre 1ºC y 2ºC) en la zona central, la costa Mediterránea, excepto Cataluña, y el sureste. También se encuentra dentro de esta zona calurosa el archipiélago balear.
Esta zona también está marcada por su sequedad, que estará por encima de la media durante el verano.
Situación parecida en Europa
En Europa, los registros destacan precipitaciones por debajo de lo normal en el extremo más oriental del continente. Por el contrario, las lluvias podrían superar la media estival en Grecia y Los Balcanes.
En lo que respecta a temperatura, el ambiente cálido que está caracterizando los últimos años seguirá dominando gran parte de Europa, sobre todo en el este y abarcando un gran perímetro que abarca desde Italia hasta Rusia, pasando del sur de Suecia hasta Chipre. Se queda fuera de esta zona toda Europa central, Portugal (y la mitad oeste de España) y Reino Unido.
Gómez ha explicado, en este sentido, que el patrón dominante tendería a ser el de las Azores, que extendería su influencia hacia Canarias y Península Ibérica, mientras que las bajas presiones tenderían a dominar el extremo más oriental del continente: entre Turquía y Los Balcanes.
Las temperaturas, por encima de la media en el área de Los Balcanes, combinadas con la acción de aire frío y húmedo precedente de las bajas presiones en Turquía podrían desembocar en tormentas en esta zona.