Agentes de la Guardia Civil de Puesto de Güímar han auxiliado a una mujer de 87 años que se había caído en el interior de su vivienda y no podía moverse, según ha informado este viernes el cuerpo de seguridad.
La patrulla de servicio recibió el aviso de un vecino que informó de que había escuchado a alguien gritando, quejándose y pidiendo auxilio, y que creía que podría ser su vecina, una persona mayor, ha explicado la Guardia Civil en una nota.
Los agentes comprobaron desde el exterior de la vivienda que efectivamente se escuchaba a alguien pidiendo auxilio en el interior y localizaron a una de las vecinas que tenía una copia de la llave de acceso a la vivienda, por lo que abrió a los agentes.
Una vez en el interior, los agentes comprobaron que la mujer se encontraba en el suelo del baño, sin poder moverse y pidiendo ayuda pero no podían acceder al interior al estar la puerta bloqueada, por lo que se tuvo que desmontar para poder socorrer a esta persona.
Según relata el instituto armado, al caer la mujer había quedado atrapada entre varias piezas del baño, sin poder tener la movilidad suficiente para levantarse por si misma.
Gracias a la colaboración vecinal se pudo auxiliar a esta persona, que fue asistida en el lugar por los servicios sanitarios y no fue necesario su traslado al centro de salud.