Detenido en Tenerife el autor de 18 robos cuando se llevaba una caja registradora

EFE

La Orotava —

Un hombre de 38 años natural de La Orotava, presunto autor de 18 robos en viviendas y establecimientos en tres meses, ha sido detenido en esa localidad de Tenerife gracias a que fue identificado cuando se llevaba una caja registradora de un supermercado.

El detenido, según la Guardia Civil, había asaltado viviendas y establecimientos, de donde se llevaba dinero y todo tipo de efectos, desde botellas de alcohol y cigarrillos a décimos de lotería, pasando por los donativos depositados por los fieles en alguna ermita.

Varias viviendas, comercios y establecimientos como supermercados, panaderías, guachinches y una farmacia, además de varias ermitas, fueron asaltadas. 

A principio de septiembre comenzaron las investigaciones, cuando en el puesto de la Guardia Civil de La Orotava se tuvo conocimiento de un robo con fuerza durante la madrugada cometido en el local de la Asociación de Vecinos del Barrio de la Piedad.

Tras forzar la ventana con alguna herramienta, el ladrón se había llevado seis botellas de ron, diez cartones de cigarrillos, varias botellas de licores y 300 euros en metálico que había en la caja. A mediados de ese mes hubo un robo parecido en el que desaparecieron 100 euros en efectivo y un décimo de lotería del próximo sorteo de Navidad.

A partir de ahí prosiguió “una frenética actividad delictiva” por parte del presunto delincuente, que aprovechaba la ausencia de ocupantes por las tardes y las madrugadas para forzar puertas y escalar muros. De los supermercados se llevaba comida y tabaco, en otros establecimientos forzaba las máquinas expendedoras y los futbolines, y en las ermitas se hacía con los escasos donativos del cepillo.

La Guardia Civil realizó inspecciones oculares, estudió los horarios, examinó la forma de acceder a los establecimientos y recopiló descripciones aportadas por varios testigos.

Concentró entonces las pesquisas en la identificación de un individuo que actuaba en solitario y que seguramente residía por la zona donde se estaban produciendo estos hechos, en los barrios de La Piedad, La Fariña, Camino de Chasna y Camino de Polo.

Los agentes tenían noticias de que un conocido delincuente había trasladado su residencia al barrio de La Fariña recientemente, así que intensificaron los puntos de verificación con patrullas ordinarias y de contravigilancia con vehículos camuflados.

Finalmente, el 3 de noviembre por la tarde, tras cometer un nuevo robo en un supermercado del barrio de Barroso, el hombre fue identificado por varios testigos cuando se llevaba la caja registradora. Posteriormente fue detenido y acusado de dieciocho delitos contra al patrimonio y el orden socioeconómico.