El turismo como oportunidad

Santa Cruz está cambiando. El conocimiento periódico de nuevos datos en diferentes apartados económicos confirma una situación esperanzadora. Como venimos advirtiendo en los últimos meses, nos hallamos ante síntomas de una recuperación más o menos palpable, sobre todo en el sector de los servicios, que en otro tiempo jugó un papel determinante en el desarrollo de esta capital.

La perseverancia en la apuesta del Ayuntamiento por la dinamización, porque la ciudad tenga mucha más actividad en la calle, favorece esa misma tendencia. Lo mismo que el impulso del Puerto, tan vinculado al municipio, con la puesta en marcha de proyectos que van a cambiar la cara de la ciudad, y la reactivación del comercio, gracias a la llegada de más y más turismo.

Lo dijimos nada más llegar al Consistorio: Santa Cruz debe ser la capital turística de una isla eminentemente turística. Sin perder un ápice de su personalidad, la ciudad necesita ocupar el sitio que le corresponde, en relación a este importantísimo motor económico, y participar de sus beneficios.

Recuérdese que, hasta hace nada, eran muchos los escépticos ante esta oportunidad de negocio. Pero la realidad es que el turismo, a día de hoy, deja ya en Santa Cruz más de 69 millones de euros anuales, lo que nos sitúa a la cabeza en la Isla y por encima de la media del Archipiélago. El dato procede del Instituto Canario de Estadística (Istac) y se obtiene de multiplicar el gasto turístico en destino por persona y día, que en nuestro caso es de 43 euros.

Además, hay que tener en cuenta que los hoteles de la ciudad vivieron en 2014 el mejor invierno turístico de los últimos diez años y que Santa Cruz se ha convertido en el segundo punto de la Isla más visitado por los turistas que se alojan en el Norte o en el Sur, solo superado por el Parque Nacional del Teide.

En ese sentido, el año 2013 se cerró con más de 1,6 millones de visitantes, que acudieron a Santa Cruz para conocer nuestra capital, disfrutar de sus atractivos y realizar sus compras. En paralelo, tenemos el primer puerto de España en cruceros en temporada invernal y tercero en el conjunto del año, con una previsión de crecimiento del 15,4%, hasta alcanzar los 618.430 turistas por esta vía. Solo en la noche del 31 de diciembre, más de 6.000 cruceristas partieron el año con nosotros.

De ahí también la importancia que adquiere la promoción exterior, como hemos tratamos de hacer en esa misma fecha, en colaboración con Radio Televisión Española (RTVE), que apostó por Santa Cruz como escenario para la transmisión del Año Nuevo. Más de tres millones de personas siguieron en toda España nuestras campanadas, con el añadido de que el “minuto de oro” en todas las televisiones nacionales coincidió con la conexión hecha por La 1 con Santa Cruz, desde la Puerta del Sol, poco después de las 23:00 horas, con más de 6,6 millones de televidentes. Junto a las imágenes propias de esta celebración, los espectadores tuvieron ocasión de ver un vídeo con imágenes sobre las singularidades que atesora el municipio.

Estamos convencidos de que las cosas van a ir a mejor. Nadie puede sobrevivir solo. Como tampoco Santa Cruz vive en exclusiva de sus propios recursos. La aparición de inversores y la llegada de visitantes, de gente que venga a comprar a nuestros comercios, a nuestros restaurantes, a nuestros negocios, reactivará la economía local. Somos la capital. Aquí viven y trabajan miles de personas. Pero también vienen cada año más de 600.000 cruceristas y más de un millón y medio de turistas del resto de la isla. Es una oportunidad que no vamos a desaprovechar. Una coyuntura que invita a la ilusión.

Santa Cruz está cambiando. El conocimiento periódico de nuevos datos en diferentes apartados económicos confirma una situación esperanzadora. Como venimos advirtiendo en los últimos meses, nos hallamos ante síntomas de una recuperación más o menos palpable, sobre todo en el sector de los servicios, que en otro tiempo jugó un papel determinante en el desarrollo de esta capital.

La perseverancia en la apuesta del Ayuntamiento por la dinamización, porque la ciudad tenga mucha más actividad en la calle, favorece esa misma tendencia. Lo mismo que el impulso del Puerto, tan vinculado al municipio, con la puesta en marcha de proyectos que van a cambiar la cara de la ciudad, y la reactivación del comercio, gracias a la llegada de más y más turismo.