CRÍTICA DE CINE

El universo de Ewan McGregor

Fer D. Padilla

Santa Cruz de Tenerife —

- Título: American pastoral (2016)

- Dirección: Ewan McGregor

- Guión: John Romano (Novela: Philip Roth)

- Reparto: Ewan McGregor, Jennifer Connelly, Dakota Fanning, Peter Riegert, Rupert Evans, Uzo Aduba.

Un hombre de familia al que la vida le ha sonreído intenta, con su mujer, llevar una vida pacífica sin renunciar a sus propios valores ni a sus seres queridos. Esta es la idea del primer largometraje dirigido por el mundialmente conocido actor escocés Ewan McGregor.

Para ello, el protagonista de Trainspotting (Danny Boyle, 1996) ha elegido adaptar la novela American pastoral, publicada por Philip Roth en los últimos noventa; un lamento por el sudor vertido a lo largo de los años y los conflictos morales de los que parte su deriva vital. La adaptación aprueba sin problema. Se trata, además, de un episodio interesante, presentado con una narrativa lo suficientemente amena como para que nos sintamos cómodos frente a la pantalla.

Tres son los nombres a resaltar en este proyecto. El primero, el de esa bendición de actrices que han resultado ser las hermanas Fanning; Dakota, en este caso. No hay personaje dentro de su espectro de edad que no pueda hacer de forma completamente resaltable. Gran aportación la suya, como se espera de un personaje como el suyo, obviamente.

Todo un acierto el de la elección de este reparto. Pese a ser una película de protagonista masculino, la mayoría de los personajes importantes y resaltables de American pastoral son interpretados por mujeres. Infalibles intérpretes como Jennifer Connelly (Réquiem por un sueño, Dentro del laberinto) vuelven una vez más a demostrar que hay actores y actrices que, a diferencia de tanto fenómeno adolescente o de marketing, siguen maravillando cada vez que ejecutan un papel.

Por supuesto, el tercer y gran punto fuerte de esta producción es su protagonista y director. McGregor sabe lo violenta que podría verse su irrupción en la dirección desde las cunas más conservadoras de la industria hollywoodiense y no se esconde: desde el minuto uno se presenta, con una narrativa que parece recordarnos intencionadamente al yonqui de Trainspotting y al enamorado de Big Fish. Al hijo luchador de Beginners y al músico del sitar de Moulin Rouge.

A partir de ahí se desarrolla una trama política y social teñida de drama y thriller en la que valoramos que el contenido prime sobre una forma de función clara: la de ser objeto de un primer nivel de simbolismo, como si se tratase del escenario por el que se despliega la obra.

A este debut, que nos deja bastante buen sabor de boca, solo le podemos objetar la excesiva inocencia que en ocasiones sufren los personajes. Ya sea por un deseo de no querer empatizar con la postura enfrentada o por una simple construcción del personaje tirando de cierto componente descaradamente iluso, lo cierto es que chirrían ciertos diálogos carentes de argumentos consistentes y coherentes con el desarrollo de los acontecimientos y las realidades que envuelven a todas las piezas de este tablero.

Recomendable para una buena sesión de cine, American pastoral es una cinta sin pretensiones, de pensamiento avanzado a los hechos contados. Interesante y educativa, tanto en valores como en el tratamiento de conflictos morales y sociales, McGregor lo habría tenido muy difícil para tener una mejor carta de presentación como realizador.