El nuevo presidente de Puertos de Tenerife desliga su nombramiento de la censura en La Laguna y no desautoriza la reprobación del PP a CC

Vicente Pérez

Santa Cruz de Tenerife —

A falta de que el Gobierno de Pedro Sánchez publique su nombramiento en el BOE, el futuro presidente de la Autoridad Portuaria en la provincia tinerfeña, Pedro Suárez (destacado miembro del PP lagunero y tinerfeño) se ha apresurado a desvincular su designación (a propuesta del  Ejecutivo regional -CC-) de una posible moción de censura en el Ayuntamiento de La Laguna contra el alcalde nacionalista José Alberto Díaz, a cuyos promotores (Unidos Se Puede y XTF-NC) ha merodeado el portavoz popular en ese consistorio, el cirujano Antonio Alarcó.

“Mi nombramiento no tiene absolutamente nada que ver con eso porque, si tiramos de hemeroteca, vemos que se viene hablando de mi nombre para la Autoridad Portuaria desde hace muchísimo tiempo, mucho antes de que se planteara una posible moción de censura”, dijo el aún consejero del PP en el Cabildo y relevante miembro de su partido en La Laguna, donde ha sido secretario general, a la vez que secretario de Organización de los populares en Tenerife.

Suárez ha hecho estas afirmaciones a la SER, a Diario de Avisos, así como a La Opinión de Tenerife, a pesar de que este lunes había manifestado a Tenerife Ahora que no haría declaraciones hasta que su nombramiento no fuera efectivo, o sea, nunca antes de que se publicara en el Boletín Oficial del Estado (BOE), algo que aún no ha ocurrido.

Al ser los puertos estatales competencia del Ministerio de Fomento, el Gobierno canario propone y el central nombra, por lo que ha llamado la atención que ya con el PSOE en el poder estatal y en pleno rebrote de los contactos para una moción de censura en La Laguna el exalcalde de este municipio y ahora presidente del Ejecutivo regional, Fernando Clavijo, haya entregado la presidencia de la Autoridad Portuaria a Pedro Suárez, precisamente un líder del PP lagunero.

Esta maniobra, en el resto de la oposición en la Ciudad de los Adelantados, se ha visto como un pago de CC al PP para evitar que los populares acaben apoyando un cambio de gobierno en Aguere. Los votos de sus concejales son esenciales para que salga adelante la censura.

La realidad es que, pese a las reticencias del PP a dar ese paso, lo cierto es que una semana antes de que este lunes el Gobierno canario anunciara su apuesta por Pedro Suárez, en el pleno de La Laguna se produjo una amenaza en toda regla a la línea de flotación de CC: un acuerdo de toda la oposición, incluido el PP que lidera Antonio Alarcó, que proclamaba la necesidad de un gobierno alternativo al de Díaz, y además marcaba las prioridades de gestión que debería tener el nuevo alcalde. Una reprobación que no había ocurrido antes con esa claridad y unanimidad, y que sin duda habrá puesto nerviosa a CC.

El caso es que Suárez (que no se ha pronunciado expresamente en contra de esa moción de censura) ha enmarcado su nombramiento en las negociaciones entre los partidos para renovar los órganos que dependen del Parlamento de Canarias, y que han incluido -apunta- las presidencias de los dos organismos portuarios provinciales (en mayo, el de la provincia de Las Palmas ya quedó en manos de otro líder del PP, Juan José Cardona, pero antes de que el PSOE tuviera el Gobierno estatal tras la moción de censura contra Rajoy).

El alcalde Díaz: “Tengo una maravillosa relación con mi socio”

En medio del enfado con el PP entre los demás partidos de la oposición lagunera (Ciudadanos incluido), que se llegaron a ver con Alarcó la pasada semana tras el acuerdo plenario en pro de concretar cuándo y cómo apean del poder a CC y PSOE, la realidad es que el alcalde lagunero ha sacado pecho. “Tengo una maravillosa relación con mi socio de gobierno, y mantengo debates con ellos como se pueden tener con la mujer de uno o con compañeros de trabajo, pero las discrepancias las resolvemos siempre, y no hay ningún punto en el que no lleguemos a un acuerdo”, ha declarado  Díaz a la SER. 

Por si esto fuera poco, no duda en calificar de “pacto de progreso” el que CC mantiene con el PSOE, en clara alusión a la terminología que utilizan Unidos Se Puede y Por Tenerife-Nueva Canarias (XTF-NC) precisamente para defender la alternativa de gobierno que desean para La Laguna, a la cual han intentado, sin éxito, que el PSOE se sume, por lo que han debido buscar el apoyo del PP.

Díaz parece, por tanto, tener amarrado a su socio de gobierno, incluso al edil socialista expulsado del partido por sus mensajes de wasaps machistas (Zebenzuí González), y ello pese a que dos concejales del PSOE ya fueron laminados también por discrepar de esa alianza en este mandato, Javier Abreu y Yeray Rodríguez, los tres ahora en el grupo de no adscritos.

El secretario general del PSOE canario, Ángel Víctor Torres, recibió en La Laguna un puñado de votos en las primarias para el liderazgo regional del partido, por lo que no moverá un dedo para una moción de censura contra CC.

Por supuesto, el alcalde de la ciudad universitaria y Patrimonio de la Humanidad corrobora que el nombramiento de Pedro Suárez “no tiene nada que ver con la moción de censura, más anunciada que la cabalgata de Reyes, y cuyo objetivo es quitar a CC del Ayuntamiento, la fuerza más votada”. “Si se diera la moción de censura, es algo democrático”, apostilla, para a renglón seguido dedicar palabras amables a Alarcó, al tiempo que lanza una pulla a Cs por “apoyar a Podemos”, en alusión a Unidos Se Puede.

El que llega elogia al que se va, a Ricardo Melchior

En sus primeras declaraciones como futuro presidente de la Autoridad Portuaria, Suárez (que las hizo a otros medios de comunicación sin esperar al BOE) encomió la labor realizada por su predecesor, Ricardo Melchior (CC), porque “ha dejado el listón muy alto”; de ahí asegura que hará “todo lo posible por continuar con su trabajo e intentar mejorar todo lo que se pueda”.

Los retos que se plantea Suárez al frente de la Autoridad Portuaria son mejorar la relación entre las ciudades y los puertos, como en el caso de Santa Cruz de Tenerife, “que vive un poco de espaldas al mar”, y aboga por “abrir el puerto a los ciudadanos, aunque algunas actividades puedan ser molestas”.

De esta forma, dio a entender que intentará impulsar los proyectos planificados para el reencuentro de Santa Cruz con el mar, como el soterramiento de la vía portuaria, ya en construcción, para crear un nuevo espacio libre frente a la plaza de España. También se propone seguir apostando por el turismo de cruceros  y “aprovechar todas las potencialidades” del puerto industrial de Granadilla.