El fracaso en el cierre del pacto de derechas para constituir un gobierno autonómico con la presidencia para Asier Antona, del PP, gracias a los apoyos parlamentarios de una mayoría absoluta formada por CC, el propio PP, Cs y ASG (36 diputados), ha dado un viraje de 180 grados a la relación de fuerzas en las corporaciones locales, que este sábado se constituyen para el nuevo mandato y eligen a sus respectivos alcaldes.
Uno de estos casos es el de Santa Cruz de Tenerife, donde, tras Ciudadanos confirmar que ha liberado a sus dos concejales de prestar o no apoyo a la candidatura de Patricia Hernández, del PSOE, ahora es perfectamente posible que la aspirante socialista pueda acceder a la alcaldía de la capital tinerfeña, ello siempre que se dé este supuesto: que el PP se abstenga o se vote a sí mismo y Cs y Unidas Podemos apoyen a la candidata del PSOE, lo que conduce a un resultado de 14 para el PSOE por 10 para CC, esto es, la mayoría absoluta en el pleno de 27.
Tal y como están las cosas, y siempre que el PP no opte por la reelección de José Manuel Bermúdez, de CC, junto a Cs, algo en este momento poco probable, el camino hacia la alcaldía parece viable y posible para Hernández. Habrá que verlo mañana, en todo caso, a partir de las 11.00, la hora en que se pondrá en marcha el pleno constituyente del mandato 2019-23.
En Tacoronte todo apunta a que el pacto será entre Ciudadanos-PSOE, con la alcaldía, al menos inicial, para la candidata del partido de centro-derecha, Virgina Bacallado (con más concejales y la fuerza ganadora), y con Carlos Medina, del PSOE, de segundo en la Corporación.
En ese caso, incluso se ha planteado una alcaldía compartida a dos años. En Tacoronte, CC, que antes tenía al alcalde Álvaro Dávila, no tiene opción alguna de mantenerlo. O sale la combinación explicada o se vuelve a la que se dio inicialmente por aprobada y fue frenada por las direcciones insular y regional de los socialistas: PSOE, NC y Sí Se Puede.