El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo (CC), ha vuelto a dejar muy claro esta mañana de lunes que su estrategia para conseguir que el caso Grúas (en cuyo proceso judicial puede resultar imputado por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias -TSJC- debido a su condición de aforado) le afecte lo menos posible en el plano político, al menos en este ámbito, pasa por defenderse atacando y por la anticipación periodística canalizada a través de determinados medios de comunicación.
También, sin duda, por despejar algunas responsabilidades probadas en la investigación judicial, como parece que queda de manifiesto en la actitud de echar la culpa de todo lo sucedido con esa instrucción judicial a los denunciantes del caso: “Santiago Pérez y Podemos [Unidos Se Puede], que no es la primera vez que presentan denuncias políticas” con el “objetivo” de luego “utilizar las declaraciones en el juzgado [del investigado, si lo fuera] como elemento de desgaste político”. Clavijo también incorporó este lunes como factor de posible exculpación que “el préstamo [a Autogrúas Poli, SL] lo concede la Junta de Gobierno local [no Fernando Clavijo, viene a decir], y yo ni estaba en esa Junta de Gobierno local [ese día]”.
Esa fue una de las afirmaciones que realizó esta mañana Clavijo en la entrevista que concedió a Radio Club Tenerife, emisora de la Cadena SER, donde el presidente canario ocupó un tiempo estelar dentro del primer programa de la nueva temporada, Hoy por hoy-La Portada, ahora conducido, en la franja de 7.00 a 9.00, por el periodista Miguel Ángel Rodríguez y que contó con la presencia de otros dos comunicadores habituales: Francisco Pomares y Jorge Bethencourt.
En esa intervención radiofónica, Clavijo, tras ser preguntado sobre su dimisión si se confirmara la imputación por el caso Grúas, lo que solo puede hacer el TSJC, sostuvo que “no suele hacer política ficción”, e indicó que “yo realmente prefiero esperar a los acontecimientos y, en función de eso, voy valorando”.
El presidente del Ejecutivo autonómico se ciñó a que “el hecho de que te llamen [a declarar] para poder explicar un expediente, que a mí me parece claro... Eso no creo que sea motivo para culpar a una persona”. Acto seguido concluyó que él, ante esta misma situación que le afectara a otro, eso “nunca lo ha hecho”. Remató esta parte de su discurso con un “creo en la presunción de inocencia”.
Clavijo incluso profundizó en la cuestión central que lo puede llevar a ser investigado por el TSJC; esto es, la concesión de un préstamo por parte del Ayuntamiento de La Laguna, en su etapa de alcalde, a la empresa privada Autogrúas Poli, SL. En relación con este capítulo, por el que se le puede imputar la comisión de dos delitos: prevaricación y malversación de fondos públicos, Clavijo también paso al ataque y sostuvo que “está perfectamente claro el acuerdo de la Junta de Gobierno local [del Ayuntamiento de La Laguna]”. A esta afirmación le puso algunos extras, sobre todo porque “se habla de que el préstamo lo concedo yo”. Y no, aclara Clavijo, “el préstamo lo concede la Junta de Gobierno local [no Fernando Clavijo, viene a decir], y yo ni estaba en esa Junta de Gobierno local]”.
También se asegura, prosigue el presidente del Gobierno de Canarias, que “no había plazos ni garantía de devolución” en el acuerdo adoptado, y no es así: “Todo eso sí estaba”. Luego remata: “Las dos principales circunstancias [de la causa judicial abierta] están perfectamente claras”.
Acerca del anuncio del PSOE de someterlo a una moción de censura, en el caso de que resultara imputado por el caso Grúas, el presidente canario se limitó a decir que “no lo sé; no depende de mí y no me preocupa demasiado”. Además, atribuyó esa decisión política a la proximidad de las primarias socialistas.
Clavijo dijo que “hay cientos de cargos del PSOE imputados” y siguen en puestos públicos. “Otra cosa es que hubiera juicio oral o existiera condena”, en cuyo caso sí dejó caer que ve admisible la dimisión o el cese.