Pronto hará un año desde que Marco Antonio Navarro Tacoronte, más conocido como el Mediador, empezó a contar su historia. No solo para vengarse del director general de Deportes del Cabildo tinerfeño que lo denunció por estafa y provocó que lo detuvieran por una presunta estafa (otra más en su amplio historial delictivo), sino también porque necesitaba una maniobra que le permitiese escapar de la decena de empresarios a los que había engañado haciéndose pasar por conseguidor ante las administraciones públicas. Necesitaba que sus presuntos delitos fueran tapados por un escándalo político de mayores dimensiones y que su papel quedara reducido al de un inocente “mediador” que también había sido engañado.
Recorrió todos los partidos políticos con sede en la isla de Tenerife a los que tuvo acceso, incluso pudo ser oído por algún periodista, pero nadie le creyó. El sumario que lleva por nombre su alias estaba secreto, así que él mostraba lo poco que tenía: sus declaraciones y algún material audiovisual presuntamente comprometedor.
Y lo acompañaba con historias fabulosas que a todos sus interlocutores parecieron imposibles. Llegó a recibir una oferta por el sumario de un líder de Coalición Canaria, pero entonces solo estaba en poder de la jueza y del fiscal anticorrupción de Santa Cruz de Tenerife y no lo pudo vender. Había que esperar.
Fue entonces cuando se le apareció el periodista Félix Rojas, muy vinculado a intereses empresariales en los municipios turísticos de Adeje y Arona, en el sur de Tenerife. Rojas presume ahora de conocer el sumario desde hace un año, “incluso año y medio”, según dijo el pasado 5 de marzo al periodista Carlos Cuesta en una entrevista en el canal Distrito TV, que lo presentó como “el que destapó el caso Mediador”. “Pero los medios no nos hacían caso”, se lamentó Rojas. Fue él el que empezó a emplear el término “un mediador” para referirse a quien se acababa de convertir en su protegido y fue él el que le consiguió al que fuera su segundo abogado, Antonio Brito, que renunció a defenderlo el pasado 31 de marzo por los problemas que le ocasionaba precisamente su “sobreexposición” mediática. Justo a la que le sometía en esos momentos Félix Rojas atendiendo a una estrategia que inicialmente solo pretendía ceñirse a la isla de Tenerife y más concretamente al PSOE de la isla de Tenerife. Porque se trataba de doblarle el brazo al alcalde de Arona, José Julián Mena, al que el PSOE suspendió de militancia por destituir al concejal de Urbanismo, de su mismo partido, tras otorgar una polémica licencia a un centro comercial en zona de protección de costas y contraviniendo el planeamiento municipal. La justicia le dio la razón en su pulso contra el PSOE y ahora Mena es uno de los baluartes vencedores frente a la corrupción urbanística en las indomables zonas turísticas de Canarias.
El periodista Félix Rojas, que se sitúa al frente de la web eldigitaldecanarias.net, es un veterano de la información que desde hace muchos años trabaja al servicio de uno de los personajes más enigmáticos y polémicos de cuantos operan en esa zona turística de los vecinos municipios de Arona y Adeje: el empresario libanés Mohamed Jamil Derbah, quien durante casi una década fuera director general (“encargado general”) de los negocios del mafioso británico John Palmer y que fue detenido, en varias ocasiones, primero en 2001, en una operación antiterrorista dirigida por el exmagistrado Baltasar Garzón en los meses más duros de persecución del terrorismo islámico, y luego ya en prisión, por una millonaria estafa en el negocio turístico del tiempo compartido. Su estancia de nueve meses en prisión y las acusaciones que luego no prosperaron de ser financiador de grupos terroristas -ni lo sentaron en el banquillo-, convirtieron a Mohamed Jamil Derbah en un empresario de leyenda, a continuación obsesionado en lavar su imagen y convertirse en una persona influyente, en un empresario admirado.
El empeño llegó tan lejos que en 2017 encargó a Félix Rojas que escribiera de él una biografía en la que se le presentara como víctima de los excesos de Garzón y como un empresario honrado, emprendedor y comprometido con Tenerife y con su pueblo. La hagiografía de Mohamed Jamil Derbah, presentada como “ensayo biográfico” y plagada de todo tipo de atentados gramaticales, no solo es un ditirambo interminable del autor al que llama su amigo, sino un ataque sin cuartel a Baltasar Garzón, a la Policía y a los medios de comunicación que se hicieron eco de aquellas llamativas operaciones que se vincularon a la palabra “mafia” del sur de Tenerife y que tantos años después sigue sin cerrarse sin una sentencia condenatoria del empresario. En resumen, es inocente.
Rojas defiende continuamente a su patrocinador desde las páginas de eldigitaldecanarias.net, donde llegó a publicar en 2021 una enigmática noticia titulada Mohamed Jamil Derbah ‘avisa’ a autoridades judiciales y policiales de personas que realizan en su nombre actos delictivos en algunas zonas del Sur de Tenerife.
Transcurrido el tiempo y cerradas las heridas de aquellas detenciones, Derbah se presenta como emisario de media docena de países africanos y presume de tener ascendencia sobre el voto de la comunidad extranjera en el sur de Tenerife. De ahí su decisión de promover la creación de un partido político local, Fuerza Canaria, de reciente aparición, con el que pretende ser decisivo en las próximas elecciones municipales de mayo. Con el candidato Emilio Lentini al frente, esa Fuerza Canaria espera obtener dos concejales y con ellos influir sobre el alcalde Mena o, en su defecto, contribuir a sustituirlo.
Fuerza Canaria se ha personado en el caso Mediador, junto al Partido Popular, el PSOE y Vox. Extrañamente no lo ha hecho Coalición Canaria, que teóricamente debía ser uno de los más beneficiados por el desgaste provocado al PSOE por este asunto de corrupción.
Pero, en realidad Coalición Canaria está bien representada por otros dos empresarios patrocinadores del Mediador: Jorge Suárez y Carlos Rodríguez, propietarios de Xanadú, un complejo de ocio ubicado en Arona que incluye un centro hípico y dos restaurantes, uno de carne y otro de pescado y arroces. El grupo empresarial se completa con una emisora de radio, de nombre Xanadú, de un periódico comarcal, Ocio y Negocio, y de una televisión local, Canal 10, para la que colabora también el ya mencionado Félix Rojas con programas producidos, es decir, patrocinados por Mohamed Jamil Derbah.
A los propietarios de Xanadú también les interesa un cambio político en Arona, un gobierno municipal que les sea más propicio, por eso apoyan desde sus medios de comunicación a Fuerza Canaria y a Más por Arona, otra alternativa local. Con el alcalde Mena están enfrentados a partir del momento en el que el actual grupo de gobierno les deniega sistemáticamente una licencia para ampliar las actividades que tiene autorizadas el complejo de ocio a centro de congresos y convenciones.
La sociedad Vilaflor Park, S.L., de la que cuelgan esos negocios de ocio, restauración y comunicación tiene un largo pleito planteado ante el Ayuntamiento de Arona, cuyos técnicos informan desfavorablemente de manera reiterada contra su petición de ampliar los usos permitidos a los de centro de convenciones y congresos. Según la documentación oficial consultada por este periódico, el negocio de hípica y restaurantes que explotan se montó en su momento en suelo rústico de protección agrícola, pero el paso del tiempo y la desidia de las autoridades municipales originó que se consolidara el uso, el que ahora Suárez y su socio quieren ampliar en base a unas prerrogativas que el último alcalde de Coalición Canaria introdujo en el Plan General del municipio de 2011, que resultó luego anulado por la justicia por ausencia de informe de impacto ambiental. Para los técnicos urbanísticos municipales, es imposible otorgar la licencia que reclaman los promtores porque el suelo sigue siendo rústico de protección agrícola.
“Se van a arrepentir de esto”, le dijo al jefe de prensa del Ayuntamiento el director de Canal 10 televisión, Sandro Pérgola, al tener conocimiento del segundo rechazo a la licencia. Xanadú da cobijo desde hace tiempo en su emisora de radio, que el año pasado sólo facturó 10.000 euros, según el Registro Mercantil, a todas las voces críticas que hay en la isla de Tenerife contra el PSOE. Eso incluye a represaliados como Javier Abreu, exconcejal socialista en la ciudad de La Laguna, expulsado en 2017 del partido por negarse a pactar con la Coalición Canaria de Fernando Clavijo en contra de las órdenes de su organización. Abreu ha sido uno de los más combatientes entrevistadores que ha entrevistado al Mediador en esa emisora de radio.
Fue él el que, sin pretenderlo, hizo que Navarro Tacoronte cifrara espontáneamente en un millón de euros el dinero que se movió en torno a la moción de censura que en 2020 devolvió la alcaldía de Santa Cruz de Tenerife a Coalición Canaria mediante una moción de censura en la que fue decisivo el voto de una concejala tránsfuga de Ciudadanos, Evelyn Alonso, que ahora aparece en las listas de CC al mismo ayuntamiento.
Eduardo Inda, en Canal 10 TV
A Xanadú radio han acudido figuras del periodismo nacional como Eduardo Inda a entrevistar en sus salones y en sus estudios al Mediador, y el mismísimo director de OK Diario ha obsequiado tanta hospitalidad con un vídeo de promoción de Canal 10 TV, a la que llama “la mejor tele de Canarias”.
OK Diario ha sido, sin duda, el medio nacional que más se ha entregado a la causa y el que primero atendió los ofrecimientos de Félix Rojas como mediador del Mediador. Un equipo del periódico de Eduardo Inda se desplazó desde muy pronto a Tenerife y se instaló en el lujoso hotel Botánico del Puerto de la Cruz. Alguno de sus redactores no tuvo recato en presumir ante otros colegas de que habían incluido en la expedición a varias mujeres prostituidas para entrevistarlas en Tenerife.
Solo hay constancia de que lo hayan hecho con Susana Pastor, a la que OK Diario presentó como “la líder de las prostitutas”, que se prestó a declarar que en el caso Mediador sólo había salido hasta entonces una pequeña cantidad de nombres de autoridades que habían participado en fiestas con mujeres prostituidas. Lo malo es que la señora Pastor preside una asociación de trabajadoras sexuales (Astras) con sede en Valencia y que regentaba hasta hace poco un local en Torrente, cerrado según ella por amenazar con dar nombres de políticos puteros. Algo lejos del epicentro del caso Mediador. A Susana Pastor la entrevistó el director adjunto de OK Diario, Luis Balcarce, en el hall del hotel Botánico.
Balcarce también fue el autor de una emotiva entrevista a Mohamed Jamil Derbah, en su calidad de “representante del hijo de Gadafi para España y Europa”. En esa entrevista, una contribución a mayor gloria de los patrocinadores del Mediador, el empresario libanés anuncia al mundo que si su representado ganara las elecciones generales del próximo noviembre en su país, no habrá “venganza” por el derrocamiento de su padre. La pieza fue publicada el 12 de marzo, en plena refriega del caso que dieron en llamar Tito Berni.
Fue precisamente Luis Balcarce, adjunto al director de OK Diario quien se desplazó en persona al aeropuerto de Barajas a recoger al Mediador para acompañarlo al Congreso de los Diputados el día que comenzó el debate de la moción de censura contra el presidente Pedro Sánchez por parte de Vox, que utilizó como candidato a la presidencia al excomunista Ramón Tamames. El periódico ultra simuló que se había tropezado casualmente con Navarro Tacoronte por Madrid y que entonces aprovechó para entrevistarlo “en exclusiva” y grabarlo frente al Palacio de las Cortes. La presunta exclusiva se la estropeó el programa de Cuatro Todo es Mentira, que se hizo con una grabación subrepticia en la que se ve la llegada del Mediador al aeropuerto procedente de Tenerife en compañía de un hombre corpulento sin identificar que parecía muy orgulloso de los momentos históricos que estaba viviendo.
Ese hombre es Jorge Suárez, uno de los socios de Xanadú, el complejo hípico y de restauración y de la emisora de radio del mismo nombre, la televisión local Canal 10 y el periódico local Ocio y Negocio.
Preguntado Jorge Suárez por su presencia en Madrid junto a Navarro Tacoronte, contestó a este periódico que en realidad se acercó a la capital de España para asistir al sexagésimo cumpleaños de su hermano. Cuando las preguntas fueron dirigidas a las variadas actividades de su empresa, Suárez prefirió dar por concluida la conversación.
A los dueños de Xanadú, de la radio, de la tele y del periódico local les encantaría poder cambiar el gobierno municipal de Arona. Para lo cual apoyaron desde el principio las acciones iniciadas por Félix Rojas con el Mediador, así como al nuevo partido político promovido por el empresario Mohamed Jamil Derbah, que persigue los mismos objetivos políticos.
El empresario libanés no disimula su apoyo. Hace unas pocas semanas se dejó fotografíar para el periódico que dirige Félix Rojas junto a la número dos de la candidatura de Fuerza Canaria y la directora del Instituto de Enseñanza Secundaria de Los Cristianos haciendo una aportación económica de 4.000 euros tras un curioso llamamiento público de la docente. En un acto celebrado hace unos pocos días, el alcalde del municipio y algunos de sus concejales tuvieron que tragarse el sapo de escuchar a la directora del instituto agradecer públicamente la generosidad del benefactor y de Fuerza Canaria para con su centro público.
La escaramuza en el Cabildo de Tenerife
Pero para desgastar al alcalde Mena también conviene hacer lo propio con el Partido Socialista en Tenerife, para lo cual los padrinos del Mediador no dudaron desde el principio en atacar a su secretario general y presidente del Cabildo de la isla, Pedro Martín. Las insinuaciones de Navarro Tacoronte acerca del conocimiento que Martín debía tener, a su juicio, de las andanzas políticas de sus correligionarios en Madrid, o las irregularidades del que fuera su director general de Deportes, fueron solo los preliminares.
Faltaba el episodio pintoresco ante el pleno del Cabildo, justo el día en el que la Corporación abordaba el asunto. El Mediador se personó en la sede del gobierno insular acompañado de su inseparable Félix Rojas, del presidente de Fuerza Canaria y de la periodista María Montero, experta en información truculenta que ha colaborado en diversos medios informativos hasta asentarse de momento en El cierre digital.
Navarro Tacoronte intentó intervenir, lo que fue impedido expeditivamente por el presidente del Cabildo, Pedro Martín. Pero el propósito se había conseguido: toda la prensa se hizo eco de la escaramuza y hasta se permitió el Mediador hacer declaraciones a las puertas de la Corporación acusando a su presidente sin pruebas.
Dolors Montserrat, portavoz del Partido Popular Europeo en la Eucorámara, dijo en voz alta en el reducido espacio de la clase Business de un avión rumbo a Bruselas: “Con esto del Tito Berni nos cargamos definitivamente a Pedro Sánchez”. Quería que lo oyera el eurodiputado canario Juan Fernando López Aguilar, también presente. Acababa de estallar el escándalo del Mediador que, a los efectos nacionales, se ha ido evaporando al ritmo que se han demostrado falsas la mayoría de las acusaciones sin pruebas de Navarro Tacoronte. Queda la trama de los cuarteles de la Guardia Civil y lo que puede haber ocurrido en la misión española en el Sahel, dirigida por el general retirado Espinosa, lo que ya ha llamado la atención de la Fiscalía Europea.
En Canarias, la tormenta se reduce cada vez más a Tenerife, pese a que los dos exdirectores generales de Ganadería (Juan Bernardo y Taishet Fuentes) son de Fuerteventura. Y dentro de Tenerife, al Ayuntamiento de Arona, como querían los padrinos del Mediador desde el principio.
[Félix Rojas y Marco Antonio Navarro Tacoronte han declinado dar su versión para elaborar este análisis. El Mediador llegó a ofrecer una entrevista presencial, pero tras muchas largas, dio plantón a este periódico. Eduardo Inda tampoco quiso contestar a las preguntas que intentamos formularle].