3.935 kilómetros entre la ciudad de Chicago y las orillas angelinas del Océano Pacífico. Los 3.935 kilómetros de la Mother Road son otro de los mitos viajeros que suelen estar entre los retos de los amantes de la aventura. La Ruta 66 es una de las carreteras más codiciadas del mundo. Un viaje casi iniciático que, aunque une dos de las principales ciudades de los Estados Unidos, supone sumergirse de lleno en eso que muchos llaman la Norteamérica profunda . 3.935 kilómetros que suman miles de páginas de la mejor literatura estadounidense (como la irrepetible ‘ Las uvas de la ira ’ de John Steinbeck ) y millones de metros de celuloide en títulos para todos los gustos (aunque en Viajar Ahora nos quedamos con la irrepetible Easy Ryder que transcurre por parte de la ruta).
La Main street of América (calle principal de América) sirvió de vía de comunicación entre el noreste norteamericano entre 1926 y 1985, fecha en la que la carretera dejó de aparecer en el rutómetro oficial del gobierno de los Estados Unidos. Entre esas dos fechas hubo multitud de variantes, ampliaciones y mutilaciones que formaron parte de la leyenda hasta que las autopistas ganaron la partida (como se cuenta en la película Cars) y multitud de pequeños pueblos quedaron en el olvido. En la década de los 90 multitud de asociaciones reclamaron la recuperación de la carretera como ruta histórica . Hoy, se encuentra casi señalizada en su totalidad y se ha convertido en uno de los atractivos viajeros más auténticos de Estados Unidos. ¿Quieres hacerla? Tienes que tener en cuenta varias cuestiones.
¿Cuándo hacer la Ruta 66? La mejor época para hacer la Ruta 66 es entre los meses de julio y septiembre, durante el verano. El punto a favor es la combinación de días largos y la poca probabilidad de lluvias aunque puede hacer mucho calor . El interior de los Estados Unidos está sujeto a los rigores del clima continental, lo que supone inviernos con temperaturas bajísimas y frecuentes nevadas y heladas y veranos calurosos; en California el clima es muchísimo más suave. En octubre ya puedes encontrarte con una buena nevada en la zona interior, mientras que losmeses de mayo y junio gozan de temperaturas mássuaves pero se multiplican las posibilidades de lluvia.
¿Cuánto tiempo es necesario para hacer la ruta? Nunca menos de quince días aunque lo ideal es apuntar por las tres semanas, lo que te permitirá hacer algún descanso en las zonas de más interés así como salir de la Mother Road y hacer las casi obligadas visitas alGran Cañón y a la excesiva ciudad de Las Vegas (lo que supone hacer unos 4.500 kilómetros en total). Lo ideal es hacer cada día entre 250 y 350 kilómetros y tomarse todo el tiempo que haga falta para poder ver toda la fauna que se arremolina en torno a la ruta. Tomarse todo el tiempo del mundo para visitar los lugares marcados en rojo en la programación. En este sentido hay que tener muy en cuenta que la mayoría de los lugares de visita en Estados Unidos cierra en torno a las 17.00 horas .
Moto, coche, autocaravana… En moto nunca probamos. Dicen que es genial, pero si te gusta sacar buenas fotos, comprar algunas cosillas, ir leyendo sobre la ruta y cosas por el estilo lo mejor es el coche; con un buen maletero y lo suficientemente amplio para no terminar con las piernas amputadas. Lo que no te recomendamos es lo de la autocaravana (motorhome) ya que el costo del alquiler y el combustible en relación con el alojamiento no justifica el gasto; y en muchas ocasiones tendrás que pagar para dormir en lugares habilitados. A la hora de elegir el coche leímos mucho, preguntamos más y navegamos por internet hasta la extenuación. Hay cantidad de datos, recomendaciones y sugerencias que van desde lo más estrambótico (como hacer la ruta en coches deportivos) a lo más real. Hacer la 66 en un Mustang o en un Camaro es lo más, pero ¿es práctico? (más allá del precio de los alquileres). Debes buscar un coche que sea cómodo, cuyo alquiler tenga una buena relación calidad-precio y que tenga un consumo aceptable (ideal un diesel con rangos entre 5 y 6 litros cada 100 kilómetros). Pudimos comparar numerosos artículos sobre eficiencia en la carretera. Nosotros éramos sólo dos y pudimos optar por un coche más económico (un Chevrolet Sonic). Si son más, se justifica alquilar un monovolumen o un coche familiar. Aquí te dejamos buena información .
¿Y dónde lo alquilo? En los últimos tiempos han aparecido multitud de páginas web que comparan los precios de las diferentes agencias de alquiler de coches. Nosotros lo hicimos a través de Rentalcars y no tuvimos ningún problema. Pero es cuestión de buscar y buscar hasta encontrar la mejor opción. Eso sí, controla bien que los coches estén asegurados a todo riesgo y que el contrato sea con kilómetros ilimitados. Ten en cuenta que vas a recorrer entre 4.000 y 4.500 kilómetros.
¿Cómo preparar la ruta? Internet es una fuente inagotable de información, pero nosotros también optamos por comprar la mítica guía EZ66 Guide for travelers de Jerry McClanahan que pedimos por Amazon y nos llevaron al hotel en Chicago. Y la compra es de las mejores inversiones que hicimos. Internet es una fuente inagotable de información. Hay cientos de páginas en inglés y español en la red. Otro buen consejo es comprar un mapa de carreteras de los Estados Unidos (nosotros lo compramos en nuestro templo viajero Altaïr de Barcelona) para ir programando bien cada etapa y saber lo que queremos ver apoyándonos en la información que encontramos en la red. También leímos el fantástico ‘Ruta 66: coches, moteles y canciones de película’ de María Adell y Pau Llavador, que nos dio muchísimas pistas y nos descubrió la intrahistoria de la ruta. Genial el libro. Tenemos que ponernos a hacer una mini guía, jeje.
¿Reservamos el alojamiento desde antes de la salida? Nuestro consejo lo tomamos directamente de la página Viaje Ruta 66 a la que hicimos caso al dedillo ya que nos pareció lo más sensato a la hora de combinar seguridad, ‘frikismo’ y aventura. En grandes ciudades como Chicago, San Luis, Oklahoma City, Santa Fe o la propia Los Ángeles. En el resto de etapas combinamos la visita a moteles históricos y con encanto con la aventura de buscar sobre la marcha un lugar dónde dormir. La oferta de alojamiento es enorme y los precios medios de los moteles buenos rondan los 60 euros la noche por habitación doble (equivalentes a dos o tres estrellas en España). Y nada de sitios siniestros con habitaciones sucias y destartaladas. En general, los moteles de carretera son limpios, con buenas instalaciones y buenos y abundantes desayunos. Y también es parte fundamental de la cultura local y una seña de identidad de la propia Ruta 66.
¿Cuánto cuesta hacer la Ruta 66? Es quizás la pregunta más difícil de responder. Esto depende de muchísimos factores. El alquiler del coche ronda los 35 euros al día con una comisión de unos 500 euros por la entrega en la otra punta del país; para 15 días, este concepto ronda los 1050 euros y para 21 1.235. A esto hay que sumar unos 200 euros de gasolina (es muy barata), una media de 40 euros de alojamiento y unos 30 de comida por persona y día. Así, el precio básico por persona sería de unos 1.700 euros para quince días y unos 2.200 euros por 21 días. A esto habría que sumar entrada a museos, atracciones, propinas y caprichos… Y restar un par de días de comida chatarra o supermercado, claro está. Pero con unos 2.500 euros por persona haces los 21 días (nosotros gastamos un poco menos).
Me da miedo la policía de Estados Unidos. Otro mito fomentado por el cine. Una de las cosas que más nos sorprendió del país es la amabilidad de la gente. Son muy suyos, con ideas bastante cerradas y bastante nacionalistas, pero la mayoría de la gente que nos cruzamos fue encantadora con nosotros. Nos ayudaron en todo y no tuvimos ningún problema. Si te para la policía basta con ser amables, darle los papeles con movimientos lentos y ya está; tenlos siempre a mano para evitar que estén en la guantera o en un bolsillo. Busca un lugar seguro para parar, apaga el motor y deja las llaves en lo alto del salpicadero. NO SALGAS DEL COCHE SI NO TE LO PIDEN Y MANTÉN LAS MANOS EN EL VOLANTE . Es una buena idea que le entregues el carnet de conducir, los papeles del coche y tu pasaporte para que vean que eres un turista. Pero mucho más importante es respetar siempre las leyes de tráfico; como si estuvieras en casa. Si te multan, no discutas; eso los cabrea bastante. Trátalos con amabilidad y respeto. Y si no sabes inglés nada de nada, puedes tener un cartelito en el que diga que no sabes inglés, que eres un turista, de dónde eres y que estás de viaje.