Las avenidas de Valdecilla y Cardenal Herrera Oria de Santander quedarán conectadas a través de un nuevo itinerario mecánico que ha comenzado a construirse con un presupuesto de 3.358.778 euros, cofinanciado con fondos europeos, y cuya finalización está prevista para abril de 2025.
Este proyecto incluye la instalación de siete elementos mecánicos -pasillos, rampas y escaleras mecánicas- para salvar un desnivel superior a los 30 metros a lo largo de la calle Mimosa, y una vía peatonal que conecta Valdecilla con Cardenal Herrera Oria. Esta actuación forma parte de las acciones “más relevantes” de la estrategia de movilidad sostenible impulsada desde el Ayuntamiento.
La alcaldesa, Gema Igual, ha visitado las obras de este nuevo itinerario esta mañana acompañada por los concejales de Movilidad y Barrios, Agustín Navarro y Lorena Gutiérrez, así como por el director de Fomento, Pablo Calvo, y varios vecinos.
Durante la visita, la alcaldesa ha destacado la importancia de este proyecto para mejorar la accesibilidad y la calidad de vida de los santanderinos. “Estamos construyendo una ciudad más accesible para todos. Este itinerario mecánico no solo facilitará los desplazamientos de los vecinos, sino que también reforzará la red de movilidad vertical de la ciudad, que es un referente en España”, ha señalado.
La alcaldesa ha recordado que Santander es pionera en la implementación de soluciones de transporte vertical, con una red de itinerarios mecánicos que ya cuenta con 17 instalaciones en funcionamiento, utilizadas por más de 8 millones de personas cada año.
Proyecto
Por otra parte, esta intervención se realiza en una zona que presenta pronunciadas pendientes que dificultan el tránsito peatonal, particularmente para personas mayores o con movilidad reducida.
El proyecto se divide en cinco tramos diferenciados según las características del terreno y la pendiente. En el primer tramo, entre la Avenida de Valdecilla y la calle Violeta, se instalarán dos pasillos mecánicos que permitirán superar un desnivel de 2,86 metros y 3,13 metros, respectivamente.
Estos pasillos tendrán inclinaciones moderadas, facilitando así el acceso de los peatones. El segundo tramo, que conecta las calles Violeta y Jazmín, contará con una escalera y una rampa mecánicas para salvar una pendiente pronunciada de hasta 16,28%, lo que ofrecerá una alternativa segura y cómoda a los vecinos.
En el tercer tramo, comprendido entre las calles Jazmín y Clavel, se instalará otra escalera mecánica junto a una rampa, diseñada para superar un desnivel de 5 metros. El cuarto tramo, entre las calles Clavel y Alhelí, se caracteriza por una pendiente más suave que no requerirá de elementos mecánicos adicionales.
Finalmente, en el quinto tramo, que desciende desde la calle Alhelí hasta la Avenida Cardenal Herrera Oria, se instalarán una rampa y una escalera en paralelo, capaces de salvar una pendiente de aproximadamente 20%.
Además de los elementos mecánicos, el proyecto contempla la renovación y ampliación de las redes de servicios en toda la zona afectada. Esto incluye la modernización de la infraestructura existente, la urbanización de los espacios peatonales y la instalación de alumbrado público con tecnología LED, que mejorará la seguridad y la eficiencia energética del entorno.
También se prevé la implementación de una red de videovigilancia a lo largo del itinerario, que permitirá la monitorización continua de los elementos mecánicos y su mantenimiento a distancia, asegurando su correcto funcionamiento y la seguridad de los usuarios.
Movilidad sostenible
Este nuevo itinerario mecánico forma parte del proyecto global 'Fomento de la movilidad sostenible, impulso del cambio modal y mejora de la accesibilidad peatonal de Santander', financiado en parte con fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
En total, el Ayuntamiento de Santander ha recibido 6.652.302 euros para desarrollar estas iniciativas, que están transformando la movilidad urbana en la ciudad. “Gracias a este apoyo, estamos logrando cambios significativos en la forma en que los santanderinos se desplazan por la ciudad. Nuestro objetivo es que caminar sea la opción preferida y más cómoda para todos”, ha afirmado la alcaldesa.
En este aspecto, Igual ha recordado que esta obra se suma a otras intervenciones recientes, como las rampas de Canalejas y el itinerario mecánico entre Jesús de Monasterio y Juan XXIII, que han permitido mejorar significativamente la accesibilidad en barrios clave de la ciudad, lo que permite, además, su revitalización y promover un estilo de vida más saludable y sostenible.
La alcaldesa ha subrayado la importancia de seguir trabajando en nuevos itinerarios que sigan conectando las zonas más altas de la ciudad con el centro urbano, facilitando los desplazamientos peatonales y reduciendo la dependencia del coche.
“Queremos una ciudad más conectada y accesible, donde todos los vecinos, independientemente de su edad o condición física, puedan moverse con facilidad”, ha concluido.