La Consejería de Sanidad de Cantabria ha mantenido ocultos durante varias semanas a tres fallecidos en residencias de ancianos como consecuencia del coronavirus, un registro que eleva hasta las 211 personas el número total de muertos en la comunidad autónoma durante la pandemia de la COVID-19.
Y es que según ha reconocido en nota de prensa el departamento que dirige el socialista Miguel Rodríguez (PSOE), tras ser cuestionado por elDiario.es sobre el asunto, estos tres decesos más que no se habían contabilizado hasta el momento datan del 4 y el 17 de abril y del 4 de mayo respectivamente. Todos ellos proceden de residencias de mayores, pero no habían sido notificados al registro de mortalidad y se han detectado al dar de baja su tarjeta sanitaria.
A pesar de que hasta ahora el dato oficial de fallecidos notificado por el Gobierno de Cantabria era de 209 personas, la estadística refleja a partir de hoy 211 muertes porque, tras una revisión de la historia clínica de todos los finados, la Consejería considera que uno de ellos “no cumplía criterios COVID-19”, por lo que se le excluye de la contabilidad.
Los datos se han hecho públicos esta noche a través de un comunicado remitido a los medios y tan solo unas horas después de que el departamento de prensa de la Consejería de Sanidad comunicara 209 fallecidos en su balance diario, la misma cifra que viene repitiendo desde el pasado 19 de mayo. Sin embargo, casi de forma simultánea, la web del Servicio Cántabro de Salud en la que se informa de la situación epidemiológica en la comunidad autónoma incluía un documento en el que elevaba la cifra a las 211 muertes.
Cuestionados por este periódico por esa contradicción en las cifras, desde la Consejería han admitido que se tiene constancia de esas tres muertes más desde hace varias semanas, y que no se habían comunicado aún a la espera de coordinarse con el Ministerio de Sanidad, algo que sigue sin ocurrir dado que el Estado no ha actualizado los datos referentes a Cantabria. De hecho, este último balance sigue sin cuadrar con las cifras que maneja el Ministerio, que este lunes mantenía en 216 los decesos en la comunidad.
Además, fuentes de la Consejería de Sanidad han explicado a elDiario.es que esos tres fallecimientos en residencias de ancianos -dos en una misma residencia y otro en una segunda diferente- no se notificaron convenientemente por la dirección de estos centros, bien por descuido o por mala praxis, y tan solo fueron identificados como víctimas del coronavirus cuando fueron dados de baja en la Seguridad Social.
Durante la etapa más dura de la pandemia, el consejero de Sanidad de Cantabria consideró en sede parlamentaria que la labor llevada a cabo en algunas residencias de mayores de la comunidad “no ha estado a la altura” para poner freno a la expansión del virus, unas palabras que posteriormente tuvo que rectificar después de que tanto los partidos de la oposición como la patronal de la dependencia exigiese su dimisión y el propio presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla (PRC), lo desautorizara en público y le reclamara que pidiese disculpas.
Según los datos que aporta el Gobierno autonómico, se han registrado hasta el momento un total de 768 casos positivos de coronavirus entre ancianos en residencias de mayores de la comunidad, lo que supone aproximadamente un 25% del total de infectados. Actualmente solo siguen activos tres casos, pero el último balance realizado por el Instituto Cántabro de Servicios Sociales el pasado 18 de junio hablaba de 141 fallecidos con COVID, a los que habría que sumar ahora estas tres nuevas muertes.
Balance tras el fin de semana
Aparte de esta grave incidencia en las cifras registradas, la situación epidemiológica en Cantabria contabiliza desde su última actualización otros cuatro casos nuevos a través de PCR, tres detectados el viernes y uno el sábado. Así, el total de casos positivos computados desde el inicio de la pandemia es de 3.084 personas, 2.362 diagnosticados mediante PCR y 722 a través de test de detección de anticuerpos.
El número de personas que han superado la enfermedad asciende a 2.844, el 92% del total, y hay un total de 29 casos que aún permanecen activos, de los cuales una persona está hospitalizada en Valdecilla y los otros 28 permanecen en aislamiento domiciliario. Hasta el momento se han realizado en Cantabria 95.516 test de detección, 15.916 test por cada 100.000 habitantes.