Denunciada una pista ilegal en el entorno de la Zona Arqueológica de Ramales
En el entorno se encuentran varias cuevas con arte rupestre que han sido declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO, por lo que era preceptivo el permiso del Servicio de Patrimonio de la Consejería de Cultura
Vecinos del municipio cántabro de Ramales han interpuesto una denuncia en el Ayuntamiento contra la actuación realizada en una de las pistas del pueblo, en el entorno del barrio de La Pared. Según han hecho constar al Consistorio, en los últimos meses un ganadero de la comarca había procedido a la sucesiva ampliación de sus fincas a costa de terreno público, alterando el trazado de los caminos y modificando la anchura de pistas de titularidad municipal, sin ningún tipo de permiso.
Recibida la denuncia, las autoridades municipales han comprobado que el autor de las obras no había solicitado ningún permiso, por lo que se ha iniciado un expediente sancionador. El alcalde, César García (PSOE), indica a elDiario.es que “se tendrá que restituir el terreno público usurpado y dejar la pista en buen estado”.
Esas actuaciones habían sido denunciadas verbalmente ante agentes del medio natural por algunos de los senderistas que frecuentan las rutas de la Dama Roja, pero sin éxito. “Uno de los guardas me dijo que debía ser legal, pues si no alguien habría actuado”, explica una persona que acudió a los forestales.
Por otra parte, la zona fue escenario de la famosa batalla de Ramales, acaecida entre abril y mayo de 1839, y que supuso el último enfrentamiento de envergadura de la I Guerra Carlista. Desde la Asociación Cailagua señalan que “la riqueza patrimonial del entorno hace particularmente importante que se solicite el permiso previo a Cultura”, pues “nunca se sabe qué daños se pueden provocar al patrimonio”.
En los últimos meses el Ayuntamiento de Ramales ha tenido que sancionar a varios vecinos por usurpación de espacio público o cierre de caminos. Recientemente, el promotor de una plantación de eucaliptos cerró un camino público y plantó ejemplares en otro. “Es un problema que tenemos en ocasiones en zona rústica”, admite el alcalde, que apela al civismo de todos para evitar que se den estas situaciones.