La portada de mañana
Acceder
El jefe de la Casa Real incentiva un nuevo perfil político de Felipe VI
Así queda el paquete fiscal: impuesto a la banca y prórroga a las energéticas
OPINIÓN | 'Siria ha dado a Netanyahu su imagen de victoria', por Aluf Benn

La Machina Teatro reestrena su obra sobre Pereda y Galdós

La Machina Teatro reestrena este martes su espectáculo 'Pereda-Galdós. Una conversación' en el centro cultural Doctor Madrazo, tendrá lugar a las 19.30 horas. La obra viajará después a centros culturales y cívicos de Santander, con siete representaciones en total.

La Machina estrenó este pieza, un diálogo entre los escritores José María Pereda y Benito Pérez Galdós que habla del Santander de su época, en el año 2005, con la participación de la Universidad de Cantabria, y la retoma ahora con motivo del primer centenario del fallecimiento de este último, muy vinculado a Santander, pese a su origen canario.

Por este aniversario se han celebrado actividades relacionadas con la literatura o el cine, a las que se une ahora esta obra teatral, en la que se trató también de establecer un contrapunto entre los sentimientos nostálgicos y conservadores de Pereda y los deseos de modernidad de Galdós, según ha informado la compañía en nota de prensa.

Para La Machina, casi tres lustros después de su estreno, resulta necesario retomar este espectáculo para recordar al escritor de los 'Episodios Nacionales' y poner de relieve su estrecha vinculación con la ciudad.

Galdós llegó por primera vez a Santander en 1871 atraído por la fama de José María de Pereda como novelista. Se hicieron íntimos amigos y Pereda le buscó sucesivos alojamientos para que siguiera volviendo a Santander para tomar los baños de ola y disfrutar del fresco nordeste.

En el texto de este espectáculo, ambos personajes se encuentran en una solitaria cafetería santanderina. Con la excusa de que van a llegar a Santander unos amigos de Galdós, éste le pide a Pereda que le trace sobre un mapa un recorrido por la ciudad. Pereda, encantado con el encargo, desmenuza las viejas calles del Santander de finales del XIX y llena su narración de detalles, impresiones y recuerdos.

La obra, dirigida por Francisco Valcarce y con texto dramático de Alberto Iglesias, está interpretada por Fernando Madrazo. El vestuario es de Paula Roca y la escenografía e iluminación de José Helguera y Víctor Lorenzo.