Jornadas laborales más largas de lo establecido que implican horas extra no remuneradas, sueldos bajos, contratos temporales encadenados que se extinguen cuando finaliza la época estival, ausencia de días de descanso que hacen estos trabajos incompatibles con la conciliación familiar. La precariedad como seña de identidad del empleo en la hostelería cántabra.
Así es la radiografía del sector que dibuja el sindicato Comisiones Obreras, que sale al paso así a las insinuaciones de la patronal de los hosteleros, que en las últimas horas habían apuntado al “desinterés de los jóvenes” para trabajar como camareros y a las dificultades que tienen los empresarios de la comunidad autónoma para completar sus plantillas y contratar personal año tras año.
“La solución no pasa por precarizar a más gente. Para dignificar el sector lo primero que hay que hacer es dignificar el empleo”, ha subrayado a través de un comunicado de prensa Laura Lombilla, secretaria de Empleo de CCOO de Cantabria, que ha reclamado a los hosteleros cántabros que “respeten las condiciones de trabajo para acabar con los supuestos problemas de contratación que denuncian”.
A juicio de la organización sindical, las declaraciones realizadas por los representantes del sector de la hostelería durante el ciclo de coloquios 'La agroalimentación en el siglo XXI', organizado por El Diario Montañés, se alejan mucho de la realidad que se vive en el día a día.
“La radiografía del empleo en el sector evidencia la excesiva temporalidad, las abusivas jornadas parciales que se extienden en horas extra no remuneradas, la ausencia de días de descanso, el incumplimiento de los salarios, el que no se les de de alta en la Seguridad Social más veces de las que se piensa y un sinfín de casuísticas que desembocan, en muchos casos, en el rechazo a ofertas de empleo como camareros en algunos establecimientos”, ha señalado Lombilla.
Según la representante de CCOO, “es intolerable que se señale a la juventud como causa del problema cuando lo que realmente sucede es que las condiciones de trabajo no se ajustan con lo que estipula el convenio”, por lo que ha solicitado a los empresarios de hostelería que apuesten por “profesionalizar el sector, mejorar la demanda y ofrecer un mejor servicio al cliente”.
Para Laura Lombilla, “los representantes de la hostelería quieren echar balones fuera atacando a la juventud, que está demostrado que sí quiere trabajar pero no a cualquier precio”. “La impresión que el turista se lleva de una región va íntimamente ligado al trato recibido. Es lógico pensar que si un camarero tiene unas abusivas condiciones de trabajo y no se respetan sus derechos, difícilmente estará contento con su trabajo y ofrecerá su mejor cara. Al final, el perjuicio es para todos”, ha concluido la responsable de CCOO.
Incredulidad en el Gobierno
También ha reaccionado de manera inmediata la Consejería de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno de Cantabria, que a través de un comunicado ha manifestado este martes su “rechazo absoluto” a los planes anunciados por la Asociación de Hostelería para traer a Cantabria a 400 camareros procedentes de Perú.
El departamento que dirige Ana Belén Álvarez ha apuntado que a fecha de 30 de junio hay 4.655 personas registradas en las Oficinas de Empleo de la Comunidad Autónoma como demandantes de empleo solo en la ocupación de camareros y, por lo tanto, “no existe la necesidad de proceder a una contratación en origen”.
Así, desde el Ejecutivo cántabro han manifestado su “incredulidad” de que en caso de que desde la organización empresarial oferten un sueldo, un alojamiento y unas condiciones laborales dignas entre los más de 4.000 personas que en Cantabria están esperando un trabajo de camarero, no haya 400 que acepten dicha oferta. “Con total seguridad serán muchísimas más”, han apostillado.
Por todo ello, desde la Consejería de Empleo han instado a la Asociación de Hostelería a hacer “una reflexión profunda y sincera” sobre cuáles pueden ser las causas de esa presunta falta de personal y les ha animado a “buscar soluciones en Cantabria y no en Perú”. “No se dan las condiciones laborales ni sociales para la contratación en origen”, han incidido.
Finalmente, la Consejería ha defendido la labor formativa que están realizando en el campo de la hostelería centros como el IES Peñacastillo, así como los talleres de empleo que organizan los ayuntamientos de la comunidad y que certifican la profesionalidad para dicho empleo a sus participantes.
Polémicas políticas
Esta no es la primera ocasión en la que desde la patronal del sector se habla de “dificultades” para la contratación de personal. Esta pasada primavera, el presidente de la Asociación Empresarial de Hostelería de Cantabria (AEHC), Ángel Cuevas, lanzó duras críticas contra el entonces delegado del Gobierno, Pablo Zuloaga, candidato del PSOE en las elecciones autonómicas en aquel momento y actual vicepresidente de Cantabria, al que acusó de “inacción” y “dejadez” por no implicarse en un proyecto que le habían presentado los hosteleros.
Según el representante de las empresas de hostelería, la Delegación de Gobierno no había respondido a su propuesta para poner en marcha un plan de formación que consistía en 'reclutar' a trabajadores en Sudamérica, que pudieran desplazarse durante los meses de temporada alta a realizar trabajos en los locales del sector en Cantabria.
Cuevas lamentaba entonces la “ausencia de profesionales cualificados” en la comunidad autónoma y apostaba por acudir a países de Latinoamérica con profesores enviados por la AEHC para preparar al personal que viniera en verano a prestar aquí sus servicios con un permiso de trabajo, una idea que ha recuperado ahora y que ha provocado la respuesta inmediata de CCOO.
“Hay infinidad de hosteleros que no pueden abrir una terraza porque no hay manos para atenderlo. Hemos intentado corregir eso, pero no hemos obtenido respuesta”, aseguró Cuevas, que culpaba del fracaso de su proyecto al delegado de Gobierno por no facilitar los trámites necesarios para poner fin a esa supuesta “ausencia de personal cualificado”.