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“El Gobierno PRC-PSOE lleva el camino de meternos en una segunda década perdida”

Julio Revuelta (Polanco, 1984) ha decidido dar un paso al frente y optar a liderar Podemos Cantabria. Con un mensaje conciliador aunque también bastante crítico, se presenta como un candidato ‘apto’ para calmar las aguas de un partido que ha atravesado demasiadas tormentas a pesar del poco tiempo de vuelo que la formación acumula a sus espaldas.

En este ánimo de dejar atrás las tempestades, asegura que no quiere jugar un papel protagonista e insiste una y otra vez “en que lo importante no es lo interno sino lo externo”, es decir, los problemas de los ciudadanos. Y ahí, en la economía y en cómo esta afecta a las personas, es donde más a gusto se siente y donde más se explaya. También, quizá por este motivo, es donde más ‘tiza’ da al actual Gobierno. En cuanto al trabajo de sus compañeros parlamentarios lo valora como “muy positivo aunque mejorable”.

La mesa de su despacho está completa de 'montoncitos' de papeles y de unos cuantos libros, cómo no, de economía. Él mismo está a punto de publicar uno, nos cuenta. Su vida profesional está vinculada a la Universidad de Cantabria, donde es profesor prácticamente desde que se licenció. Atiende a eldiario.es Cantabria en la facultad después de una mañana impartiendo clases y “hablando de la Bolsa y Letras del Tesoro”.

¿Por qué ha decidido dar un paso al frente y presentarse a secretario general de Podemos?

Primero, por ilusión. Creo en el proyecto, en la herramienta que es Podemos para el cambio. Después, en el contexto de Cantabria, creo que puedo responder a lo que necesita el partido y me lo han pedido compañeros, que solicitaban un cambio drástico en la dirección tanto en las formas como en el fondo. Hacer todo más participado, que lo que decimos se parezca a lo que hacemos.

Si sale elegido, ¿qué cambios llevaría a cabo para lograr esos objetivos?

En la parte interna, cambiar el modelo vertical, jerárquico, que se ha desarrollado ahora. Desde la secretaría general se imponían las decisiones y eso empezaba a chirriar con los círculos y con el Consejo Ciudadano, lo que llevó a una situación de bloqueo.

Hemos visto que eso no es ni lo que se pide ni lo que funciona. Entonces, en mi candidatura queremos ir a una mayor horizontalidad. Primero dar más autonomía a los círculos; después hay que dar medios a los secretarios generales municipales y lo que no se puede hacer es un consejo de coordinación que ordene sobre el Consejo Ciudadano, que es el verdadero órgano ejecutivo. En definitiva, repartir mucho más tanto las cargas de trabajo como la toma de decisiones.

Tenemos que organizarnos en un mes o menos y ser eficiente, poner todo el peso en lo externo. En Podemos hemos estado un año hablando de lo interno y tenemos que hablar de política, de lo que a la gente le importa.

¿Por qué cree que ha habido tantos problemas dentro de Podemos Cantabria en tan poco tiempo de vida de la formación?

Nos ha faltado visión, saber que lo importante no es el proceso en el que estamos sino dónde queremos ir. En las primarias de hace un año nos focalizamos en ganar a la otra alternativa. Hubo una miopía muy grande, y lo que hicimos al final fue restar, que se quedara solo la parte que ganaba. Estas primarias tienen que ser muy distintas. Lo que hay que hacer es el proceso ejemplar durante y tras las primarias, con las candidaturas que sean. Lo más importante son los tres años después de las primarias, trabajar por el proyecto común.

El principal error es que íbamos viendo solo el cortoplazo y nos perdimos el camino hacia dónde vamos. Estamos metidos en un proyecto mucho más grande, lo que queremos es un cambio histórico en el país, pero no siempre tenemos esa visión y hay que recordarlo.

Habla de un proceso ejemplar. Sin embargo, parece que casi sin haber empezado, ya ha habido una ‘confusión’ con José Ramón Blanco. ¿Qué pasó?

Ha sido un error de la candidatura que asumo y por eso pedí disculpas a José Ramón y a Rosana.

Ejemplar no significa perfecto, somos humanos y cometemos errores, lo que hay que hacer es reconocerlos, disculparse, corregirlos y que no se vuelvan a repetir. Ya estamos todos de nuevo en la misma dirección.

El error básicamente fue de comunicación. Donde ponía “al margen del proceso de primarias” debería haber puesto “al margen de la candidatura”. Ese fue el error.

El paro sigue siendo la preocupación de los ciudadanos. Como profesor de Economía, ¿cuál es la receta para crear empleo y salir de la crisis?

Ojalá fuera tan sencillo, pero sí que hay comprobado empíricamente una serie de medidas que nosotros podemos aplicar. Lo que se ha hecho en las zonas europeas más desarrolladas ha sido invertir en capital humano, es decir, en mejorar la educación; mantener una tasa de inversión alta y prolongada durante el tiempo, no inversión inmobiliaria sino capital productivo, sobre todo, en industria y servicios. Después se ha invertido mucho en tecnología, especialmente aplicada a los procesos productivos. También en infraestructuras, pero no como se entiende en España, que es hormigón, sino en otro tipo de infraestructuras, como las TICs. En España se nos ha ido de las manos para pagar ciertas prácticas clientelares.

Con las inversiones combinadas en todo esto, y con un marco fiscal progresivo, hacemos el caldo de cultivo para dar la vuelta a la situación. No tenemos que inventar nada, lo que tenemos que hacer es aplicar aquí adaptado lo que se ha hecho en Francia, en Alemania, Reino Unido, Dinamarca, Suecia…. Tenemos que dejar de pensar que otro pelotazo urbanístico nos va a sacar de donde estamos porque eso es lo que nos ha metido, y desde luego cambiar las políticas de austeridad. Llevamos seis años, ya es hora de reconocer que eso solo empobrece y genere más desempleo.

¿Cómo se compatibiliza eso con el objetivo del déficit que marca la Bruselas?

Es perfectamente compatible si quitamos el velo español. En España hemos tenido siempre unos ingresos públicos muchísimo más bajos que la media europea. Eso es un problema, porque si quieres mantener los bienes y servicios públicos, te tienes que endeudar o darlos de menos calidad o bajar la provisión.

España está ahora mismo seis puntos y medio por debajo en presión fiscal media sobre el PIB. Eso son unos 70.000 millones al año. Imagínate ese dinero puesto en prácticas productivas y en gasto social.

En este país además de tener un sistema fiscal ineficiente lo que lo tenemos es injusto: la presión fiscal media está por debajo de la UE, pero la presión fiscal sobre las rentas bajas y medias es superior. El ciudadano medio, que representa la mayor parte de la población, siente que paga muchos impuestos y es cierto, y al mismo tiempo se escapa una bolsa, sobre todo de grandes capitales, que es lo que estamos viendo ahora con los papeles de Panama.

¿Qué margen de maniobra tiene el Gobierno de Cantabria?

Las autonomías tiene poder limitado sobre todo en la parte del ingreso porque tenemos un sistema de financiación asimétrico: se cedió a las autonomías más poder de gasto que de recaudación. Pero siempre se puede hacer algo. Lo primero es una reforma fiscal progresiva, y lo segundo, romper con la lógica que había hasta ahora del gasto público. Hay muchísimas redes clientelares a todos los niveles. Eso habría que cortarlo pero claro, no tiene valentía ninguno de los tres partidos que han gobernado Cantabria históricamente. Lo que tenemos que hacer con los ingresos públicos es gastarlos en lo que quiere la población: empleo y servicios públicos.

¿Qué valoración del nuevo Gobierno autonómico?

Necesita mejorar, no progresa adecuadamente. No es que lo diga yo, es que hay un informe demoledor sobre la situación industrial de Cantabria, y más que el informe es que lo vemos día a día. Yo, por ejemplo, me muevo muchísimo por la comarca del Besaya y no hay más que ver la cantidad de locales cerrados que hay en el centro de Torrelavega.

Todo esto no se puede achacar solo a la herencia heredada. Desde luego que hay parte de la herencia, porque las políticas del PP, los cuatro años de Ignacio Diego y sus políticas de austericidio, han sido el mayor desastre que hemos podido tener en Cantabria. Pero llevamos un año de Gobierno PRC-PSOE y no han hecho nada en materia económica y de Industria. Nada, un año perdido. Sota no se atreve a mover nada, es continuismo, lo mismo que hacía Crisitina Mazas. En Industria seguimos esperando los maravillosos planes que nos iban a presentar y que todavía deben estar discutiéndolos. Lo que hay que hacer es invertir ya, no esperar a mañana.

¿Qué está haciendo Podemos para cambiar esta situación?

Los partidos nuevos hemos llegado para cambiar esto. Con nuestros tres diputados, en la medida que podamos, vamos a intentar forzar que el Gobierno salga de ese marco continuista que nos ha hundido y que nos metería no ya en la década perdida –ahora mismo tenemos el mismo PIB que hace diez años y ha aumentado la pobreza considerablemente- sino en una segunda década perdida porque no estamos evolucionando de una manera positiva. Somos la segunda comunidad autónoma que menos crece de España. Es un desastre a todos los niveles la situación económica de Cantabria.

¿Cómo valora el trabajo de los tres diputados de Podemos?

Lo valoro de manera muy positiva pero mejorable. Lo que mejor hemos tenido este año ha sido el trabajo del grupo parlamentario. Somos nuevos, cometemos errores, pero la capacidad que tenemos de solventar esos errores es lo que nos diferencia del resto. Nos hemos hecho a las prácticas parlamentarias y, sobre todo, en la segunda mitad del año lo que se ha visto es que somos capaces de forzar muchas medidas. Acabamos de presentar 14 enmiendas a la Ley del Suelo, se está tramitando la Ley de Transparencia, hace poco también rectificó el presidente el cambio de abogados en el caso Racing,… La labor de fiscalización es muy, muy buena pero tenemos que ir más allá. Este segundo año tiene que ser ya de implantación de programa económico, y también muy importante, ya hemos dado el primer toque al Gobierno porque no estaba cumpliendo el pacto por un acuerdo de Gesvican con la Sareb, van a corregirlo, pero tenemos que hacer una valoración de ese pacto global coincidiendo con el primer aniversario y decirles que tienen que cumplirlo sí o sí y más pronto que tarde.

Porque si no…

Si no perderán apoyo en el Parlamento. En base a esa evaluación, serán las cosas más o menos sencillas. Lo que nosotros no vamos a hacer nunca es traicionar el programa con el que nos presentamos. Soy optimista, pero si no cumplen nos van a tener continuamente fiscalizando y además lanzando propuestas, que eso también es importante.

Dos cuestiones muy concretas. Primero, el convenio con el Racing. ¿Cuál es su postura?

Lo primero tendría que conocerlo. Seguimos esperando después de haberlo pedido hace meses al Gobierno regional. Lo que no pueden ellos es tardar meses y luego nos pidan que tomemos una decisión en horas; nos llevará semanas.

Ese argumento suena al mismo que está utilizando el PP para no posicionarse. Las líneas generales del convenio se han hecho públicas y han estado reunidos con el presidente del Racing.

La posición de Podemos va a ser muy clara…

Sí, disculpa. La de Podemos ya ha sido anunciada, pero le pregunto por la postura de Julio Revuelta.

Personalmente no creo que sea lo prioritario. Creo que la prioridad es gasto productivo y social, reactivar económicamente Cantabria.

Y otra cuestión que lleva muy gala el presidente de Cantabria: el AVE.

El AVE no va a ser AVE, que es lo lógico. Revilla tiene toda la razón porque el tren actual de Cantabria nos sitúa tanto en tráfico de pasajeros como en mercancías en una gran desventaja competitiva con Bilbao y Gijón.

Es hora de avanzar hacia un tren de altas prestaciones. Ahí tendrá todo el apoyo que se le pueda dar al Gobierno de Cantabria porque la exigencia es lógica y necesaria, aunque también es verdad que si se hubieran hecho mejor las cosas se podría haber conseguido antes.

Para acabar ya. Mirando al plano nacional, vamos hacia unas nuevas elecciones, ¿qué cree que ha fallado?

Lo que ha fallado básicamente es que el PSOE no ha querido cambiar nada. El PSOE desde un primero momento se ha puesto con Ciudadanos, con un acuerdo que lo que hacía era consolidar las políticas de recortes. Nosotros no podemos aceptar solamente que haya un cambio de partido de Gobierno si lo que anuncia el nuevo Gobierno es lo mismo.

Podemos desde un primero momento lo que dijo es que hace falta un Gobierno por el cambio con fuerzas progresistas, una vía que el PSOE no quiso siquiera explorar. Espero que en las nuevas elecciones el voto del cambio se dirija hacia las formaciones que de verdad han defendido el cambio.