La portada de mañana
Acceder
La declaración de Aldama: “el nexo” del caso Ábalos apunta más arriba aún sin pruebas
De despacho a habitaciones por 1.100 euros: los ‘coliving’ se escapan de la regulación
Opinión - ¿Misiles para qué? Por José Enrique de Ayala

La comisión sobre el Proyecto Pereda concluye que la ocupación parcial del arco garantiza la mayor superficie expositiva

Casi tres horas ha durado este martes la comisión para analizar el Proyecto Pereda en la que técnicos del equipo del arquitecto David Chipperfield han expuesto a los ediles municipales el proyecto en el que el Banco Santander pretende transformar su sede social con una inversión de 45 millones.

Y tras esta larga reunión, con explicaciones muy detalladas y exhaustivas, tal y como han reconocido los concejales, la conclusión es que la ocupación parcial del espacio interior del arco es la alternativa que garantiza la mayor superficie expositiva.

Esta comisión se ha celebrado a petición del último Pleno tras la controversia generada por la iniciativa de la entidad bancaria que conlleva el cierre, originalmente en su totalidad y ahora del 35%, del emblemático arco ubicado en el Paseo Pereda.

Y es que desde la oposición cuestionan desde que se presentó el proyecto en julio del pasado año las posibles consecuencias negativas que puede tener la ocupación del arco para la calle Sanz de Sautuola, la vía bajo la que discurre el mismo, a nivel de luminosidad y de vistas a la bahía principalmente.

Aunque esta reunión no ha zanjado la polémica, sí ha dejado claro que barajar una alternativa que no suponga el cierre del arco reduciría considerablemente el espacio para ubicar la colección de arte del Grupo Santander.

Como era de esperar, los portavoces de los grupos que integran el equipo de gobierno han salido “encantados” con la reunión y con las explicaciones vertidas por los técnicos, pero también desde la oposición han mostrado “satisfacción” por los detalles aportados.

“Creo que ha quedado lo suficientemente justificada hoy la solución que se está planteando”, ha subrayado el concejal de Fomento, César Díaz, (PP), tras ensalzar el uso público y museístico del proyecto, y asegurar que lo defenderán con “uñas y dientes”.

En la misma línea se ha expresado el portavoz del equipo de gobierno y edil de Urbanismo, Javier Ceruti (Cs), defendiendo que ha quedado “clarísima la ocupación residual del arco”, ya que si no fuese así “iría en detrimento de la calidad museística y arquitectónica”.

“El banco ha renunciado a su presencia en el edificio, a superficie, en post de un proyecto que va a hacer de un edificio que está cerrado como una fortaleza abierto a todos los ciudadanos”, ha destacado Ceruti, justificando la “defensa a ultranza” de Ciudadanos para sacarlo adelante.

Por su parte, Néstor Serrano (PSOE) ha subrayado que su partido defiende “que sea siempre el menor impacto posible”, pero ha reconocido que en la comisión “se ha planteado que es la mejor solución para tener un gran espacio positivo”.

Y en una postura similar ha valorado la reunión el portavoz regionalista, José María Fuentes-Pila, incidiendo en el “dilema de decisiones” que supone este proyecto en el que también habrá que conocer la evolución del impacto medioambiental.

Miguel Saro, de Unidas por Santander, ha resaltado que “no cabe duda de que el edificio va a ganar mucho valor porque se va a abrir al público”, pero también ha considerado que hay que a “ponderar los intereses en conflicto, puesto que ”el barrio, que ya soporta mucha presión de hostelería, perderá luminosidad y vistas“. Finalmente, el edil de Vox, Guillermo Pérez-Cosío, ha valorado la solución propuesta por el banco como ”extraña“, pero ”funcionalmente brillante“.