La comparecencia de la nueva consejera de Economía y Hacienda de Cantabria, María Sánchez (PSOE), en la comisión parlamentaria en la que ha presentado sus proyectos para la legislatura que acaba de comenzar no ha deparado ninguna sorpresa. Su proyecto es continuista con respecto al de su antecesor en el cargo, el también socialista Juan José Sota, por lo que la nueva responsable del departamento mantendrá las líneas estratégicas que se han desarrollado en los últimos cuatro años.
Y es que María Sánchez se ha convertido en protagonista involuntaria en la Cámara en este inicio del curso político, en dos plenos en los que el debate ha girado principalmente en torno a los impuestos, la presión fiscal que soportan los cántabros y el futuro económico de la comunidad autónoma. La consejera, por tanto, ha tenido que posicionarse en la tribuna recientemente sobre algunos de los aspectos más delicados de su área de competencia, una circunstancia que ha provocado que su comparecencia de este miércoles haya estado más descafeinada.
Sánchez ha reconocido durante su intervención el actual contexto “enfriamiento económico”, aunque se ha mostrado convencida de que “no se traducirá en recortes”. De hecho, ha explicado que Cantabria afrontará este periodo de inestabilidad y desaceleración económica a nivel mundial con los impuestos congelados y con la misma apuesta del Gobierno autonómico por el sostenimiento de unos servicios públicos de calidad.
La responsable de Economía ha reiterado, entre las críticas unánimes de la oposición, que Cantabria “mantendrá” la misma escala autonómica del IRPF que en los ejercicios de 2018 y 2019. “Hay que recordar que tenemos los tramos de IRPF para rentas bajas y medias de los más bajos de España”, ha subrayado Sánchez.
Además, sobre el impuesto de sucesiones, ha recordado que en los supuestos de adquisición mortis causa y de adquisición intervivos, Cantabria es la única comunidad autónoma de España que tiene una bonificación del 100% de la cuota para los grupos 1 y 2, una medida que seguirá en vigor en los presupuestos de 2020. “¿Quién se atreve a asegurar que Cantabria es un infierno fiscal?”, ha interpelado a los portavoces de PP, Ciudadanos y Vox, que han insistido durante su turno de palabra en este extremo.
Como ya avanzó en el pleno del Parlamento del pasado día 17 de septiembre, Sánchez ha señalado que “este Gobierno apuesta decididamente por nuestros pueblos, sobre todo por los que están en peligro de despoblamiento”. De esta manera, la consejera ha anunciado que para la próxima Ley de Medidas Fiscales y Administrativas que acompañe a las cuentas del próximo ejercicio se plantearán deducciones en el IRPF para apoyar a los ciudadanos que viven en las zonas rurales.
El impuesto de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados también seguirá igual en 2020. Seguirán vigentes los beneficios fiscales a la adquisición de la vivienda habitual por determinados colectivos como jóvenes, personas discapacitadas, familias numerosas o contribuyentes con ingresos reducidos, así como los beneficios fiscales a la adquisición de viviendas protegidas y los relacionados con la adquisición de explotaciones agrarias y fincas rústicas.
La consejera ha avanzado también medidas en la Agencia Cántabra de Administración Tributaria (ACAT) para mejorar su funcionamiento y reducir el fraude fiscal y, en los tributos relacionados con el juego, ha avanzado que se hará un estudio sobre los locales de apuestas, que están incidiendo en los jóvenes de manera “muy negativa”. En cuanto al resto de impuestos cedidos y los propios “no habrá modificaciones relevantes”.
Consenso en la financiación autonómica
También ha incidido en la voluntad de la Consejería de Economía y Hacienda en liderar un “gran consenso” para fijar una postura común de cara a la negociación del nuevo sistema de financiación autonómica, un debate en el que, a su juicio, la comunidad “se juega su futuro” a medio y largo plazo con el próximo reparto de fondos del Estado. “Trataremos de liderar la búsqueda de ese consenso que nos dé fuerzas y legitime en el proceso”, ha indicado la titular del departamento.
Sobre lo que ha definido como “uno de los principales desafíos de esta legislatura”, Sánchez ha propuesto “diálogo” y ha pedido la participación de todos los grupos con representación en la Cámara para fijar una postura común beneficiosa para Cantabria, postura a la que habrá que pretende sumar el apoyo de los principales agentes económicos y sociales.