Paula Fernández Viaña (Bárcena de Pie de Concha, 1971) será a partir de este miércoles la nueva consejera de Presidencia y Justicia del Gobierno de Cantabria. Asumió el cargo de secretaria de Organización del PRC en el último cónclave interno del partido y durante esta legislatura ocupaba el cargo de jefa de Gabinete dentro del departamento en el que se pondrá al frente en sustitución del actual titular, Rafael de la Sierra.
El hasta hoy consejero de Presidencia y Justicia del Gobierno de Cantabria ha presentado su dimisión al presidente, Miguel Ángel Revilla, a quien también ha propuesto el nombramiento de la hasta ahora directora de su Gabinete, que será la primera mujer regionalista en ocupar un cargo de máxima responsabilidad en el Ejecutivo autonómico.
La renuncia de De la Sierra se produce por razones de salud y porque quiere evitar cualquier vacío de poder, ya que un tratamiento médico le mantendrá fuera de la Comunidad Autónoma durante las próximas semanas.
Miguel Ángel Revilla ha firmado ya los decretos de cese y nombramiento de Paula Fernández, quien tomará posesión del cargo en un acto que tendrá lugar a las 10.15 horas en la sede del Gobierno cántabro.
Natural de Bárcena de Pie de Concha, Paula Fernández tiene 47 años, es licenciada en Derecho y máster en Mediación de Conflictos. Ha trabajado para el Partido Regionalista de Cantabria desde 1999 en diferentes responsabilidades. En las elecciones autonómicas de 2015 resultó elegida diputada, cargo del que dimitió para acceder al Gobierno de Cantabria como directora de Gabinete del consejero de Presidencia y Justicia.
La nueva consejera, que ha trabajado en la trastienda del Gobierno y del Parlamento de Cantabria, sonaba con fuerza desde hace tiempo para ocupar una cartera en el caso de que los regionalistas repitan en el Ejecutivo tras las elecciones. Finalmente, la enfermedad que padece desde hace tiempo su mentor político ha adelantado este nombramiento, que se produce a poco más de un mes del final de la legislatura.
En una reciente entrevista en eldiario.es, tras convertirse en la mujer que mayor poder orgánico ha acumulado en el PRC, aseguraba que “no existe techo de cristal” en su partido y que la anomalía de que ninguna mujer haya sido consejera nunca a petición de Revilla “va a desaparecer muy pronto”.
Prudente, comedida y discreta en sus declaraciones públicas, ha evitado siempre valorar sus posibilidades y se ponía “a disposición del partido”, como ha estado desde que se afiliara hace dos décadas. También confesaba que le preocupa el nivel de crispación política y el auge de los discursos de extrema derecha y apostaba por la moderación para evitar sorpresas en las urnas: “La gente sabe que el PRC es previsible, sabe lo que somos, sabe lo que vamos a contar en nuestros programas electorales y sabe lo que vamos a hacer”, destacaba.