Hace unos años, en pleno estallido de la crisis económica y al calor de las protestas del 15M, los mensajes de regeneración política y democratización de los partidos se convirtieron en un mantra a izquierda y derecha del arco parlamentario. La implantación de las primarias alcanzó a prácticamente todas las formaciones, después de años de reticencias de las cúpulas y direcciones ejecutivas, acostumbradas a imponer su criterio y utilizar la designación de candidatos como un premio o un castigo a la fidelidad de sus respectivos líderes.
Ahora, sin embargo, los partidos políticos que presentarán sus candidaturas en la circunscripción de Cantabria ante la inminente convocatoria electoral del 10 de noviembre, tras la certificación de la imposibilidad de sacar adelante una investidura y la obligación de repetir las elecciones generales, harán sus candidaturas sin primarias, obviando un proceso interno que algunos de estos mismos partidos tienen incluso reflejados en sus estatutos, alegando como argumento la falta de tiempo por la premura de los plazos.
Hasta el momento, la única formación política que ha confirmado a su candidato para el 10N ha sido el PRC, que ha anunciado en las últimas horas que José María Mazón repetirá como cabeza de cartel de los regionalistas cántabros después de cosechar un resultado histórico el pasado 28 de abril, sumando por primera vez en cuatro décadas un representante para el partido de Miguel Ángel Revilla en el Congreso de los Diputados.
El Comité Ejecutivo del PRC respaldó este jueves su candidatura por unanimidad y emplazó a Mazón a elaborar el resto de las listas, tanto en el Congreso como en el Senado, que sufrirán importantes cambios respecto a las anteriores como consecuencia de la victoria electoral del 26M, que llevó a algunos de sus integrantes a ocupar cargos públicos en diferentes administraciones.
Sin embargo, no se esperan grandes novedades en el resto de partidos, que repetirán casi con total seguridad a sus números 1 al Congreso y al Senado y mantendrán al grueso de sus listas. Así, PSOE, PP, Ciudadanos, Unidas Podemos y Vox diseñarán sus candidaturas también sin pasar por primarias y conservando a la mayoría de los nombres que ya concurrieron en las elecciones del 28A.
Este mismo viernes ha confirmado estas intenciones de su partido el portavoz autonómico de Ciudadanos, Félix Álvarez, que en una rueda de prensa ha anunciado que no celebrarán primarias en la comunidad de cara a las elecciones generales del 10 de noviembre y que su lista solo tendrá “modificaciones puntuales” sobre la que elaboró para los comicios del pasado 28A.
Así, la nueva la lista, encabezada por Rubén Gómez, que resultó elegido diputado del Congreso, será “más o menos igual” que la anterior, salvo esas “cuestiones puntuales” derivadas de “gente que está en otros sitios”.
Por su parte, el secretario general del PSOE cántabro y vicepresidente autonómico, Pablo Zuloaga, ha dicho en las últimas horas que su partido está, “como siempre”, preparado para afrontar el nuevo proceso electoral y que “sale a ganar” después de imponerse hace cinco meses en Cantabria y conseguir dos diputados y tres senadores en esa cita con las urnas.
Zuloaga ha informado asimismo de que la semana que viene se convocará la Ejecutiva del PSC, antes de la cita federal prevista el 28 de septiembre. Sobre las listas y posibles cambios ha indicado que “es pronto” para avanzar nada, ya que es algo que se analizará en Cantabria en coordinación con la dirección nacional.
También ha analizado el nuevo escenario electoral el Comité Ejecutivo del PP de Cantabria que, reunido este pasado jueves, ha pedido a toda la organización que “eche el resto” porque “nada está escrito y el vuelco es posible” en las elecciones del 10 de noviembre.
La presidenta de los populares cántabros, María José Sáenz de Buruaga, que sufrió en sus propias carnes el intervencionismo de Génova en la designación de los candidatos autonómicos cuando fue relegada por Pablo Casado para imponer a Ruth Beitia aunque era ella la líder del partido, tendrá poco margen de actuación sobre las listas del PP el 10N. Diego Movellán, que ya fue cabeza de cartel en abril, es el mejor colocado para repetir como número 1 con el visto bueno de la dirección nacional.
Es el caso de Vox el que más dudas despierta, ya que la formación de extrema derecha se vio envuelta en su primera crisis interna precisamente por la designación de los candidatos durante la pasada primavera, hasta el punto de que un hombre cercano a Santiago Abascal y coordinador del partido en Cantabria, como es Ricardo Garrudo, tuvo que dar un paso atrás y renunciar a un puesto que había sido anunciado y fue sustituido sobre la bocina por el exconsejero del PP Emilio del Valle, que obtuvo unos resultados muy discretos y no consiguió su acta de diputado.
Por su parte, Unidas Podemos ha confirmado a eldiario.es que no realizará primarias y designará a sus candidatos de manera directa, con el concejal del equipo de gobierno de Santa Cruz de Bezana, Luis del Piñal, como el mejor colocado para encabezar la candidatura de la formación de izquierdas. El partido continúa intervenido por una gestora desde hace meses y no hay fecha aún para elegir a un nuevo Consejo Ciudadano tras la ruptura interna que acabó en los tribunales a principios de este año y supuso la suspensión de las primarias.