20 promesas incumplidas por Diego

El 22 de mayo de 2011 el Partido Popular ganaba las elecciones en Cantabria y un mes después su candidato, Ignacio Diego, era investido presidente autonómico. Tanto durante la campaña electoral como una vez asentado en la presidencia del Gobierno, Diego prometió que cambiaría Cantabria a base de relevantes hitos que, con el paso del tiempo, han ido quedando olvidados en las hemerotecas. Conocida ya de forma oficial su candidatura a la Presidencia de Cantabria para las elecciones autonómicas del próximo 24 de mayo es momento de analizar algunas de todas esas promesas que ocuparon titulares, debates en redes sociales y cientos de charlas de barra de bar pero que no han llegado a ver la luz.

La primera gran promesa incumplida, condicionada por una coyuntura económica global, fue la creación de empleo. Se trataba de la medida más demandada por los ciudadanos y fue eje del programa electoral del PP cántabro. En mayo de 2011, Cantabria contaba con 45.195 parados, con una tasa de paro del 14,77%, en enero de 2015 la cifra ascendía ya a 51.756 con una tasa de paro del 18,42%; lo que supone 6.561 personas paradas más a punto de terminar la legislatura. Primera promesa no cumplida.

Cambiar Cantabria en 100 días fue, sin duda, el anuncio que con más énfasis repitió el propio Diego en los momentos más cercanos a su investidura como presidente cántabro. Ese cambio no solo no llegó en esos tres meses si no que las cifras económicas, buen indicador para medir cualquier resultado, confirman que Cantabria cerró 2011 con una tasa de paro del 15,93% contabilizándose 4.800 parados más en el último trimestre.

Ya desde la presidencia Diego puso encima de la mesa la urgencia de encontrar una solución a las 621 sentencias de derribo a las que debía enfrentarse la región con cuantiosas indemnizaciones que el Ejecutivo cántabro reconocía no poder afrontar, tal y como afirmaba el titular de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Urbanismo, Javier Fernández, en junio de 2011. A punto de finalizar otra legislatura el problema sigue encima de la mesa y sin esperanzas de dar con una solución, tal y como afirmaba hace escasas fechas a eldiario.es Cantabria el portavoz de la Asociación de Maltratados por la Administración (AMA), Antonio Vilela.

“Acabar con las listas de espera” fue otro de los deseos expresados por Diego que, aunque cumplió haciendo públicas las listas, sigue estando en la columna del ‘debe’. En los últimos datos ofrecidos por el Gobierno a través del portal de Transparencia con fecha de 2014, 9.220 personas esperaban para ser operadas en la región con un tiempo medio de 86,53 días. 3.357 para traumatología, la especialidad con mayor número de pacientes en la lista, y con la cirugía infantil a la cabeza del tiempo de espera: 153,33 días de media.

También en materia sanitaria los cántabros residentes en la zona oriental de la región venían reclamando soluciones para poder ser derivados a las especialidades del Servicio Vasco de Salud. La solución del entonces futuro presidente cántabro se concretaba en otra promesa incumplida, un convenio sanitario con el Gobierno del País Vasco y sobre el que nada se sabe a pesar de seguirse reclamando desde Castro Urdiales.

Transparencia y Besaya

Aunque en materia de transparencia se han dado pasos básicos mediante la puesta en marcha de un ‘Portal web de Transparencia’, las acciones finalmente se han quedado a medias porque ni toda la información se publica con periodicidad ni en formatos reutilizables -evitando por ejemplo los documentos pdf- que permitan su consulta y análisis con fiabilidad. Entre las promesas concretas se encontraba un ‘Libro Blanco’ en el que publicar un “análisis anual de los problemas y desafíos pendientes de cada una de las grandes áreas temáticas de la Administración”.

En este pequeño repaso es muy probable que los torrelaveguenses sean los cántabros más decepcionados con el actual Gobierno cántabro. En plena campaña electoral Diego se comprometía junto al candidato 'popular' a la alcaldía de la capital del Besaya, Ildefonso Calderón, a que los vecinos de la ciudad pudieran “nacer en el hospital Sierrallana, respirar un aire de calidad y trabajar” allí. Transcurridos cuatro años, dos de esas promesas están muy lejos de hacerse realidad. En 2012 el Gobierno pospuso el servicio de partos, con un coste estimado de 3 millones de euros al año, por ser “inabordable e insostenible” debido a la situación económica, en palabras de la consejera de Sanidad, María José Sáenz de Buruaga. Y Torrelavega ha comenzado 2015 siendo el segundo municipio de España con la mayor tasa de paro de larga duración: un 99,2% en el cuarto trimestre de 2014. Parece que la esperanza de una mejora en la calidad del aire es la única que se ha cumplido al haberse reducido, por ejemplo, la concentración media de Dióxido de Azufre (SO2) de 11,33 a 2,08. Un dato que también tiene una relación directa con el cierre de la fábrica de Sniace en 2013 que daba 2.000 puestos de trabajo entre directos e indirectos.

'Invercantabria'

La mayor colección de voluntades que no han llegado a cumplirse salieron de la gran tormenta de ideas que generó ‘Invercantabria’, un encuentro con profesionales de diferentes sectores impulsado por el Gobierno cántabro con el fin de articular, en torno a cinco ejes (Turismo e Industria Cultural, Educación y Formación, Desarrollo Agroforestal, Tecnología y Energía, y Sanidad y Biomedicina), acciones de progreso para Cantabria.

De aquí surgieron propuestas vinculadas al ámbito turístico como el Hotel de lujo en Isla Pedrosa, con una inversión de 15 millones de euros; el Parque temático de espeleología en Udías -décima propuesta de esta lista-, con vagones para recorrer las galerías subterráneas y gran un pozo de caída libre; el circuito privado de “motor-ocio” en terrenos de Requejo y Cañeda (Campoo de Enmedio) para el que Ignacio Diego aseguraba una inversión de 5 millones de euros; un Hotel en el Parque de la Naturaleza de Cabárceno, también con una inversión de 20 millones de euros; una Residencia en Comillas para docentes y estudiantes extranjeros con una inversión de 30 millones de euros; y la Telecabina también en el Parque de la Naturaleza de Cabárceno que se ha encontrado con el Ayuntamiento de Penagos ya que, por segunda vez, ha denegado el permiso de obras al dudar los técnicos municipales de la viabilidad de cambiar la ubicación de uno de los accesos al Parque, haciendo imposible que se cumplan los plazos de ejecución planteados.

‘Territorio golf’ ocupó también portadas y titulares varios. Ignacio Diego apostó por este deporte desde el principio de la legislatura como una de las «líneas estratégicas de Cantabria» bajo la marca ‘Severiano Ballesteros’ y prometiendo en agosto de 2013 la construcción de seis nuevos campos de golf en “localizaciones concretas y definidas”, ninguno de los cuales se ha llegado a concretar, ni en cuanto a ubicaciones o inversiones se refiere. La ampliación, también voluntad del presidente regional, a 18 hoyos del campo Abra del Pas sigue siendo asignatura pendiente al mantener sus 15 hoyos por interminables trámites administrativos.

'Smart Región'

Emular a la capital de la comunidad y hacer de Cantabria una ‘Smart Región’ fue otro de los titulares lanzados en InverCantabria. Una idea que en ningún momento fue desarrollada para explicar cómo se realizaría un posible despliegue de sensores o cómo se plantearía la reutilización de los datos en beneficio de la sociedad. Materia tecnológica que también fue abordada con propuestas para incentivar sectores como el de los vehículos aéreos no tripulados (drones) o un acuerdo con Google para trabajar en proyectos educativos; y la búsqueda en México de 26 millones de euros con los que financiar un nuevo proyecto en energías renovables que tampoco fue desgranado por Diego en ningún momento.

La Ley de Fomento de la Cooperación Municipal, para incentivar la agrupación de servicios entre los 102 ayuntamientos de Cantabria, era una de las tres iniciativas de reforma estructural que Ignacio Diego propuso en su discurso de investidura. Reclamada por la oposición y los municipios su tramitación quedó estancada, tal y como informó el Ejecutivo en 2013 por la “conveniencia de posponer los trabajos” hasta la “aprobación de la reforma de la legislación básica estatal anunciada por el Gobierno de España”.

'Fracking' y Vega de Pas

Y entre las últimas propuestas que han llenado este ‘saco de ilusiones’ el anuncio de que la sede del Banco de España en Santander acogería el Centro de Arte Rupestre de la Unesco. Otra voluntad que se quedó en un titular sin ninguna base sólida.

En el aire quedarán por evaluar dos grandes apuestas personales de Diego. Uno de los frentes, con gran apoyo social, es la lucha contra la puesta en marcha de técnicas de extracción de gas del suelo de Cantabria mediante la conocida técnica del fracking. Prohibido el Fracking en Cantabria por el Ejecutivo de Diego con el respaldo total de otras fuerzas políticas y la sociedad en general, la batalla continúa abierta al haber anulado el Tribunal Constitucional dicha prohibición.

El otro frente, con mucha más controversia, es el proyecto de construcción de un teleférico en Vega de Pas, una obra que aún no ha comenzado y a la que solo aspira una empresa.