Educación se enfrenta a una 'rebelión' en las aulas

Las Becas de Iniciación a la Profesión Docente no Universitaria (BIP) que promueve la Consejería de Educación, también conocidas como las del 'MIR Docente', se han encontrado con la oposición frontal de los sindicatos que integran la Junta de Personal Docente en Cantabria. UGT, Comisiones Obreras, STEC y ANPE han hecho un llamamiento unánime al profesorado cántabro para que no sea “cómplice” de lo que califican de “farsa” y no se ofrezcan voluntarios para ser tutores de los becarios. También, los servicios jurídicos de las organizaciones sindicales están estudiando si plantear recursos contra esta iniciativa.

Además, la Plataforma en Defensa de la Enseñanza Pública, que aglutina a sindicatos de docentes y a colectivos de padres y alumnos, ha decidido en una reunión que va a emprender una campaña de acciones informativas y de protesta en la calle contra estas becas ya que, a su juicio, no son una “necesidad” para el sistema. Se plantean la convocatoria de una manifestación y la recuperación de los denominados 'miércoles verdes' en los centros educativos para defender la calidad en la educación pública.

El programa diseñado por el departamento que dirige Miguel Ángel Serna está dotado con 1.200.000 euros en los Presupuestos Generales de Cantabria para 2015 y recoge la convocatoria de 500 becas para aquellos graduados de Magisterio y máster de Secundaria que deseen realizar su formación en centros de Infantil, Primaria y Secundaria. Estos becarios recibirán 560 euros íntegros al mes y comenzarán su formación a mediados de febrero con su incorporación a los centros asignados.

Se trata de una formación específica de cuatro meses, a razón de 20 horas semanales, en centros de la comunidad autónoma sostenidos con fondos públicos. Cada becario estará bajo la supervisión de un tutor y se formará en las tareas propias del docente en activo.

Según ha explicado el secretario general de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE) de UGT, Fernando García, para los profesores de los centros que reciban a los becarios es “voluntario” ser tutores. Además, para serlo, los tutores tienen que tener una experiencia profesional de al menos 15 años. De esta forma, la Junta de Personal Docente promueve un boicot a la iniciativa de Educación y pide a los profesores que se nieguen a participar.

En una convocatoria conjunta de UGT, Comisiones Obreras, STEC y ANPE, los representantes sindicales han puesto en duda la versión de Miguel Ángel Serna, que aseguró durante la presentación de las becas que los directivos de los centros educativos apoyan “muy mayoritariamente” este programa formativo. De hecho, han criticado la propuesta por incidir en la “precarización” del empleo docente en Cantabria, donde hay un 30% de interinos y uno de cada tres tiene un contrato a tiempo parcial.

En esta línea, la presidenta de la Junta de Personal Docente, Patricia Ruiloba, ha puesto sobre la mesa otras necesidades más acuciantes para el sistema educativo, como la reducción del ratio de alumnos por aula, la cobertura inmediata de las sustituciones, el incremento de la dotación a los centros educativos o la contratación de docentes a tiempo completo en las aulas de dos años que trabajen junto a los técnicos de Educación Infantil.

Anclados en viejos modelos

Anclados en viejos modelosLa respuesta desde la Consejería de Educación ha sido prácticamente inmediata. A través de un comunicado enviado a los medios de comunicación, Serna ha acusado a los sindicatos de permanecer “anclados en viejos modelos” y ha opinado que todo cambio o propuesta novedosa “les asusta y es recibida con oposición”. “La postura de los sindicatos manifiesta una impermeabilidad absoluta a cualquier propuesta que suponga un avance o mejora”, ha subrayado.

Sobre la oposición sindical a las becas 'MIR Docente', el consejero ha dicho que tiene como único fin el “obstaculizar” las iniciativas del Gobierno de Partido Popular. A pesar de todo, ha invitado a los sindicatos de la Junta de Personal Docente “a trabajar juntos por la calidad de la educación en Cantabria y a sacar la política de las aulas”.

Esta propuesta del Ejecutivo regional llega en la recta final de la legislatura, a menos de cuatro meses para que se celebren las elecciones autonómicas y locales, y después de una gestión en el área educativa que ha estado marcada por el enfrentamiento constante entre Miguel Ángel Serna y el grueso de los sectores que integran la comunidad educativa a consecuencia de los recortes o la aplicación de la LOMCE.

En este caso, los sindicatos acusan a la Consejería de querer enmascarar los datos del paro en la comunidad autónoma con una 'inyección' de 500 becarios en las aulas que, según sostienen, no resuelve ninguno de los problemas que sufren los centros y supone un desembolso “notable” para las arcas públicas.

Las Becas de Iniciación a la Profesión Docente no Universitaria (BIP) que promueve la Consejería de Educación, también conocidas como las del 'MIR Docente', se han encontrado con la oposición frontal de los sindicatos que integran la Junta de Personal Docente en Cantabria. UGT, Comisiones Obreras, STEC y ANPE han hecho un llamamiento unánime al profesorado cántabro para que no sea “cómplice” de lo que califican de “farsa” y no se ofrezcan voluntarios para ser tutores de los becarios. También, los servicios jurídicos de las organizaciones sindicales están estudiando si plantear recursos contra esta iniciativa.

Además, la Plataforma en Defensa de la Enseñanza Pública, que aglutina a sindicatos de docentes y a colectivos de padres y alumnos, ha decidido en una reunión que va a emprender una campaña de acciones informativas y de protesta en la calle contra estas becas ya que, a su juicio, no son una “necesidad” para el sistema. Se plantean la convocatoria de una manifestación y la recuperación de los denominados 'miércoles verdes' en los centros educativos para defender la calidad en la educación pública.