PSOE y UxS exigen a PP-Cs que avancen en la eliminación del callejero franquista en Santander

PSOE y Unidas por Santander (UxS) han registrado la convocatoria extraordinaria y urgente de la Comisión de Acción Cultural y Promoción Educativa del Pleno del Ayuntamiento, transcurridos más de dos años sin avance alguno en el cambio de nombres del callejero franquista que exige la Ley de Memoria Histórica.

Así, los dos grupos de la oposición fuerzan al equipo de Gobierno PP-Cs a que convoque la Comisión de Cultura, al sumar más de un 25% de los miembros, y piden información sobre un escrito del Senado que solicita la remisión de acuerdos municipales en relación con la Ley de la Memoria Histórica como se dio cuenta en Junta de Gobierno Local el 22 de febrero.

PSOE y UxS también piden explicaciones sobre los retrasos y exigen el cumplimiento de la ley, porque “el Ayuntamiento de Santander mantiene al menos 15 calles, además de otros vestigios, que siguen exaltando y homenajeando a referencias del levantamiento militar de 1936, así como al régimen fascista y antidemocrático que impusieron durante cuatro décadas los vencedores de la guerra”.

El portavoz socialista en el Ayuntamiento, Daniel Fernández, ha subrayado que “como demócratas no podemos homenajear los símbolos de una dictadura”. “Es así de sencillo”, ha recalcado, por lo que exige al “principal Ayuntamiento de Cantabria” que “culmine el proceso y acabe para siempre con las huellas del franquismo en nuestro callejero”.

Además, Fernández remarca que “representantes públicos y ciudadanos estamos obligados a cumplir las leyes”, en este caso concreto en vigor desde hace casi 14 años.

La ley de Memoria Histórica establece que “las administraciones públicas, en el ejercicio de sus competencias, tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura”.

En este sentido, el concejal de Unidas por Santander, Miguel Saro, ha advertido de que su formación se plantea medidas que “no sean estrictamente políticas” para “asegurarnos del cumplimiento de la ley en Santander”.

Y ha incidido en que “hace años la controversia era si algunas de las figuras en el callejero habían tenido trascendencia o no en el golpe de Estado y la represión política del franquismo”, mientras que “ahora se desatiende el cumplimiento de la ley, sin ninguna controversia, en calles en homenaje a quienes fueron especiales exponentes de los crímenes de guerra como el general Camilo Alonso Vega o general Dávila”.

Más de dos años sin avances

El escrito registrado recuerda que no hay avances en el cumplimiento de la ley desde la última respuesta de la alcaldesa de Santander, Gema Igual (PP), el 31 de enero de 2019 a requerimiento del director de Memoria Histórica del Ministerio de Justicia.

Entonces, señalan PSOE y UxS, Igual alegó que el cambio en la denominación de las calles estaba “a expensas de propuesta y aprobación de nuevos nombres”.

Ambos partidos desglosan las actuaciones municipales emprendidas desde que el Pleno de la Corporación acordara en agosto de 2015, por unanimidad, adoptar las medidas oportunas para determinar las menciones, nombres o símbolos que se deben retirar o cambiar.

Posteriormente, la Alcaldía encomendó la tarea al Consejo Municipal de Cultura y, éste, a su vez, a la Comisión de Historia y Patrimonio del Consejo, que llegó al acuerdo unánime de incluir 18 calles en la relación de vías públicas que deben cambiar de denominación, y señaló otras siete en las que planteaban pequeñas modificaciones -que ya se han acometido.

En abril de 2016 el Pleno del Consejo Municipal de Cultura elevó su informe a la Corporación para su aplicación, pero el equipo de Gobierno hizo un nuevo encargo a la Comisión de Historia y Patrimonio para que propusiera criterios para la elección de nuevas denominaciones de calles en la ciudad.

En mayo de 2017 la Junta de Gobierno Local aprobó el informe emitido por dicha Comisión, ratificado después en Pleno municipal, con las propuestas que se incorporaron, a través de un nuevo artículo, al Reglamento de Títulos, Honores y Distinciones de la ciudad.

El 31 de agosto el Pleno acordó los últimos cambios en el callejero franquista.