La reacción inmediata de un grupo de activistas tras el atraque de un barco de bandera saudí que utilizó el Puerto de Santander para cargar armamento con destino a la Guerra de Yemen a principios de mes ha despertado un rechazo social prácticamente unánime y ha generado un debate político que alcanzará las principales instituciones con un objetivo: que este tipo de prácticas no vuelvan a repetirse.
Así ha quedado de manifiesto tras la entrega a la Autoridad Portuaria por parte de Pasaje Seguro Cantabria de las más de 18.000 firmas recogidas en solo unos días contra la presencia en las instalaciones santanderinas de un barco con armas y explosivos destinados a un conflicto bélico que ha generado una auténtica emergencia humanitaria.
Este colectivo viene denunciando desde el pasado 8 de marzo la presencia en el puerto cántabro del carguero 'Bahri Hofuf', un buque que atracó en el Fondeadero de los Mártires de Santander y cuyo destino final es, según han señalado, “contribuir a la masacre que Arabia Saudí está perpetrando contra la población de Yemen, en una guerra que se ha llevado la vida de más de 10.000 personas y ha dejado al menos a dos millones de desplazados, la mitad de ellos sin refugio”.
Antes de la denuncia de Pasaje Seguro Cantabria, la ONG vasca Ongi Etorri Errefuxiatuak y Greenpeace habían conseguido con sus protestas que el barco dejara de atracar en Bilbao, un propósito que pretenden repetir ahora en la costa cántabra y para lo que están sumando apoyos en todos los ámbitos.
De hecho, tal y como adelantó eldiario.es, el asunto ha llegado incluso hasta el Congreso de los Diputados después de que Podemos haya denunciado que el barco desconectó las señales de localización marítima durante las 24 horas previas a su atraque a Santander, esto es, durante toda la maniobra de aproximación a puerto.
Desde Pasaje Seguro también han insistido en este aspecto y han recordado que “urante algo más de 8 horas no hay datos del SIA (Sistema de Identificación Automática), perdiéndose su posición a la altura de la localidad francesa de Saint Nazairea recuperándose sus coordenadas cuando ya estaba atracado en el puerto de Santander. Además, según este colectivo, ”el buque borró su nombre del casco y la bandera identificativa como transporte de mercancías peligrosas no fue desplegada“.
Petición ciudadana con respaldo político
A la protesta social y se han sumado en este caso muchas formaciones políticas, que han llevado a las principales instituciones una reivindicación que surgió en la calle. En esta línea, Podemos, PSOE y Santander Sí Puede se han movilizado para apoyar la petición y exigir que cese el atraque y desde el PRC ha habido también reacciones al respecto.
El asunto ha sido llevado al Parlamento de Cantabria y al Congreso de los Diputados de la mano de sendas preguntas del grupo parlamentario autonómico y estatal de Podemos, que ha exigido conocer si este barco ha sido sancionado. También, el PSOE iba a presentar en la Cámara autonómica una Proposición No de Ley instando a la revocación de licencias de exportación, pero ha considerado más práctico sumarse a la petición presentada previamente por Podemos.
Además, en el Ayuntamiento de Santander, Santander Sí Puede ha presentado a través del concejal Antonio Mantecón una moción solicitando que el Consistorio se oponga a las operaciones de carga y descarga de armamento en el puerto de la ciudad y se sancione al buque saudí.
Por otro lado, el Gobierno de Cantabria expresó este pasado lunes su rechazo a que se use el Puerto para el atraque de barcos que carguen armas destinadas a guerras. Lo manifestó el consejero de Innovación, Industria, Turismo y Comercio, Francisco Martín (PRC), ante el Pleno del Parlamento, en respuesta a una pregunta de Podemos sobre las medidas que se van a llevar a cabo en el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Santander para garantizar que el 'Bahri Hofuf' no vuelva a atracar en estas instalaciones.
Martín expresó el “no” del Gobierno de Cantabria a la Guerra de Yemen, así como un “no” a que este barco y otros dedicados a los mismos fines atraquen en Santander y en el resto de puertos. El consejero aseguró asimismo que trasladarán la postura del Ejecutivo -que se enteró de lo sucedido con este buque saudí “por la prensa”- en el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria.
“Pasaje Seguro espera que pronto se resuelva esta cuestión y los santanderinos puedan estar tranquilos porque se cumple la ley y no se permite que en el Puerto de Santander se comercie con armas que provocan muertos, heridos y refugiados”, ha recalcado el colectivo a través de una nota de prensa.