La organización interna de los partidos políticos en el Ayuntamiento de Santander está a punto de cambiar, aunque todavía no se sabe en qué sentido. Una modificación en el reglamento interno impulsada por el equipo de Gobierno liderado por Íñigo de la Serna (PP) permite que los grupos municipales estén integrados por dos únicos concejales -a diferencia de los tres ediles que eran necesarios hasta ahora- a partir de esta semana, lo que ofrece la posibilidad a Ciudadanos y a Ganemos Santander Sí Puede de abandonar el Grupo Mixto, una opción que todavía no es segura.
Y es que los dos representantes de Ciudadanos en el Consistorio santanderino, David González y Cora Vielva, han solicitado este martes de manera oficial la constitución de su grupo, después de registrar la petición para designar como portavoz de la formación naranja al que fuera candidato en las pasadas elecciones del mes de mayo. Los trámites para desarrollar esta nueva configuración se deben resolver esta semana y, como era previsible, C's ha aprovechado la puerta que abrió el PP como compensación a su apoyo incondicional durante toda la legislatura.
De hecho, toda la oposición criticó esta decisión del equipo de Gobierno porque la consideraron “un premio” al partido de Albert Rivera, que apoyó la investidura como alcalde de Íñigo de la Serna después de que el PP perdiera la mayoría absoluta en las últimas elecciones municipales, un hecho que no sucedía desde 1995. Santander es la única capital de provincia de España en la que nunca ha habido un cambio de Gobierno y Ciudadanos apuntaló las vías de agua abiertas en las urnas en el 'trasatlántico' popular.
El portavoz del PP y concejal de Obras, César Díaz, justificó el cambio del reglamento en la mala relación que mantienen los tres partidos que conforman hasta ahora el Grupo Mixto. “Ante la actitud que han mostrado Ganemos e Izquierda Unida, excluyendo a Ciudadanos de todas las comisiones y órganos municipales, el equipo de Gobierno considera necesario adoptar esta medida para garantizar la participación de todos, sin excepción”, explicó.
Malas relaciones
El desencuentro entre Ganemos e IU y Ciudadanos al que hacía referencia Díaz se produjo el pasado mes de junio, durante la negociación para determinar las funciones y el reparto de áreas dentro del Grupo Mixto. Ningún representante del partido naranja acudió a la reunión convocada al efecto, con lo que las formaciones de izquierdas se dividieron su presencia en las comisiones, dejando a este último partido sin representación -puede acudir a las comisiones pero no votar-. Aquella decisión provocó la indignación de Ciudadanos, que cortó cualquier contacto con sus compañeros de grupo.
Por su parte, además de la ausencia “injustificada”, Ganemos e IU argumentaron que Ciudadanos había rechazado previamente una propuesta consensuada en este sentido, para posibilitar la formación de grupos municipales con un mínimo de dos concejales y tener así mayor presencia. Según su versión, Ciudadanos desestimó aquella medida alegando que la participación en las comisiones “no es determinante”. Junto a esta iniciativa, Ganemos presentó otra destinada a reducir significativamente los sueldos y dietas de la Corporación municipal. Ambas fueron rechazadas por el voto conjunto de PP y Ciudadanos.
División en Ganemos
Sin embargo, a pesar de que este cambio de criterio del PP y C's beneficiaba indirectamente a Ganemos Santander, que también tiene dos concejales, no está claro que el partido municipalista acabe aprovechando la oportunidad. La división interna en la formación ha llevado a sus dos ediles, Antonio Mantecón y Tatiana Yáñez-Barnuevo, a tomar dos caminos distintos y a votar incluso de forma distinta en los plenos.
Mantecón, que ejerce como portavoz y fue el candidato de Ganemos Santander Sí Puede, llegó a poner su cargo de concejal a disposición de la asamblea ciudadana después de que su compañera en el Consistorio votara reiteradamente en contra de la línea marcada por la formación, y se sometió a una moción de confianza -que superó claramente- para demostrar que tiene el respaldo de los militantes. Esa división interna continúa y ambos ediles negocian ahora la fórmula adecuada para consituirse con un grupo municipal propio, lo que dejaría al representante de Izquierda Unida, Miguel Saro, como único integrante del Grupo Mixto.