La Ley del Suelo que se está tramitando en el Parlamento contempla permitir que se construyan viviendas unifamiliares en terrenos rústicos de toda Cantabria solo durante dos años, mientras que después el permiso para ello solo lo tendrían los ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes.
Así lo ha aclarado el vicepresidente de Cantabria, Pablo Zuloaga (PSOE), en declaraciones a los periodistas para explicar que “esa información que hemos visto en diferentes medios de comunicación” de que queda abierta la construcción en suelo rústico de toda la comunidad gracias a las enmiendas presentadas por los grupos parlamentarios regionalista y socialista “no es taxativa”, puesto que en ellas existe una moratoria que limita esta posibilidad a dos años “precisamente para garantizar el desarrollo ordenado”.
En concreto, los grupos que sustentan al Gobierno regional, PRC y PSOE, han presentado de forma conjunta 69 enmiendas para corregir el borrador de la ley elaborado por la Consejería de Obras Públicas, Ordenación del Territorio y Urbanismo, encabezada por el regionalista José Luis Gochicoa.
El texto de la Consejería contemplaba autorizar la construcción en terrenos rústicos solo en los municipios inferiores a 5.000 habitantes para dar facilidades a los ciudadanos y combatir la despoblación, pero no lo permitía en el resto de ayuntamientos. Sin embargo, las enmiendas de PRC y PSOE plantean abrir esta construcción de viviendas en suelo rústico a toda la comunidad, pero, como ha remarcado hoy Zuloaga, solo durante dos años.
Es decir, en el momento en el que entre en vigor la ley tras aprobarse en el Parlamento “empezará a contar un reloj que durante dos años permitirá a los ayuntamientos seguir avanzando en esas licencias que podrían tener en marcha”, y a partir de ese momento se limitará la posibilidad de desarrollar viviendas en suelo rústico a ayuntamientos en riesgo de despoblación. Para el resto, será el Plan Regional de Ordenación del Territorio (PROT) el que designe cuáles son las áreas de crecimiento o los equipos municipales, que son quienes tienen la responsabilidad del planeamiento urbanístico de los municipios, ha explicado.
Para el vicepresidente, las enmiendas de regionalistas y socialistas “plantean mejorar la redacción del texto de forma coordinada precisamente buscando la sostenibilidad y el desarrollo ordenado de Cantabria”, así como también “la sostenibilidad desde el punto de vista jurídico” para evitar “los desmanes que han llevado a Cantabria a acumular sentencias de derribo, con el perjuicio que conllevan para familias que ven lastrada su vida”.
Al hilo, y dado que el Gobierno está recibiendo las enmiendas también de la oposición (PP, Cs y Vox) para tratar de lograr consensos, Zuloaga ha señalado que el planteamiento de estos grupos es “discrepante” con el de PRC y PSOE.
“Hay matices técnicos que muestran esa divergencia”, ha dicho, centrándose especialmente en los 'populares', que defienden esa no limitación de la construcción en suelo rústico en todos los ayuntamientos y no solo en aquellos de menos de 5.000 habitantes. Asimismo, el PP propone mantener la distancia máxima de 200 metros del núcleo en la que se pueden ejecutar vivienda unifamiliar en suelo rústico, en lugar de reducirlo a los 100 como se plantea en el proyecto de ley.
Así, el socialista ha indicado que el PP tendrá que decidir si apoya una ley “garantista como ésta” con estas precisiones o “vuelve a un modelo especulador de liberalización del suelo como el que vino planteando en otros momentos en Cantabria y que nos ha llevado a resultados tan complejos como las sentencias de derribo”.