El rey Felipe VI ha visitado este jueves el Puerto de Santander con motivo de su 150 aniversario para conocer su presente y las inversiones que marcarán su futuro, y que ascienden a unos 180 millones y lo convertirán en un “puerto boutique” con capacidad para ofrecer a sus clientes todos los servicios que demanden y “flexible” a todos los tráficos.
En su visita, el monarca ha podido conocer 'in situ', y de boca del presidente de la Autoridad Portuaria de Santander (APS), las distintas actuaciones que se van a suceder en los próximos meses y que, según ha confiado el Rey, auguran al Puerto santanderino un futuro con “magníficas perspectivas”, tal y como ha dejado plasmado en la dedicatoria en el libro de honor de la institución, que ha firmado al final de la visita, según ha podido saber Europa Press.
Entre las obras que ha podido conocer figuran el muelle 9 de Raos, con un presupuesto de 30 millones; la ampliación del silo vertical para el almacenamiento de vehículos --que tendrá “3 o 4 plantas dependiendo del precio del acero” y permitirá acoger casi 20.000 vehículo --, o la terminal de contenedores, que estará operativa para “enero de 2023” y para la que ya en agosto del presente año llegarán las dos primeras grúas de 80 metros de altura y marcarán un “nuevo skyline en Santander”.
La visita del Rey ha arrancado sobre las 10.30 horas en los aledaños del silo vertical de almacenamiento de vehículos, donde le esperaban las principales autoridades políticas de la comunidad autónoma, como el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, acompañado de una gran parte del plantel del Gobierno; la delegada del Gobierno, Ainoa Quiñones; el presidente del Parlamento, Joaquín Gómez, y el propio presidente del Puerto, Francisco Martín, además de las alcaldesas de Santander y de Camargo, Gema Igual y Esther Bolado, respectivamente.
Tras una breve explicación en el lugar, posteriormente la comitiva se ha dirigido al muelle 9 de Raos, donde se había instalado en un soporte una placa conmemorativa de la visita de hoy, que instantes antes de la llegada del Rey fue derribada por el viento que soplaba esta mañana en la capital cántabra pero que fue erigida de nuevo.
A escasos pasos, esperaban una aún mayor representación institucional (diputados, concejales, representantes de la Guardia Civil y la Policía Nacional, de la Administración de Justicia, entre otras instituciones), a la que el Rey ha saludado antes de ir juntos a una carpa instalada al lado a conocer una explicación más amplia de los principales proyectos del Puerto de manos del presidente del Puerto.
Posteriormente, el Rey ha podido saludar a algunos trabajadores del Puerto y ha visitado la sala del Consejo de Administración de la institución, donde ha recibido a los consejeros y donde también ha firmado en el libro de honor de la entidad portuaria.
En su dedicatoria, Felipe VI manifestaba su “honor” por estar en el Puerto para conmemorar el 150 aniversario de la creación de la Junta de Obras del Puerto y el 30 de la constitución de la Autoridad Portuaria y “celebrar” su “futuro gracias a importantes inversiones en marcha”, con “magníficas perspectivas”, lo que, según dijo, constituye una “gran noticia para Santander, Cantabria y toda España”.
Antes de la llegada del rey a los terrenos portuarios, Martín había reconocido, en declaraciones a los medios de comunicación, que para el Puerto era un día “grande” por el “honor” que supone recibir al Rey con motivo de los 150 años del Puerto, “una de las principales empresas” de Cantabria y “uno de los orgullos regionales”.
Martín ha agradecido la oportunidad de poder hacer junto al rey una “revisión” del pasado del Puerto, que nació con la creación en 1872 de la Junta de Obras del Puerto de Santander, pero sobre todo poder contarle el “futuro que en este momento se está construyendo”.
“Tenemos el Puerto levantado en obras, dibujando un futuro que poco se va a parecer al pasado, un puerto que históricamente fue granelero, le estamos haciendo migrar hacia un puerto elástico que va a poder dar servicio a casi cualquier cliente”, ha destacado el presidente del Puerto, que creo que la presencia de Felipe VI servirá para dar “más eco” a estas relevantes actuaciones.
Y es que Martín ha señalado que un puerto “ya no puede conformarse con ser el puerto de siempre y con conservar sus clientes. Todo cambia cada vez más deprisa y lo que antes era un cliente cautivo, mañana decide irse a otro puerto. Competimos entre nostros”.
Por eso, el de Santander está realizando las inversiones necesarias para ser un Puerto Boutique, que permita que “todo aquel que venga buscando un servicio lo va a encontrar”.
Así, entre los “hitos más importantes” ha citado la nueva terminal de ferries, que supondrá más de 30 millones de euros de inversión y que permitirá habilitar un segundo atraque para muelles turísticos; la puesta en funcionamiento de la estación de gas natural licuado, y la terminal de contenedores, la “gran aspiración” histórica del Puerto que permitirá no tener que evacuar cargas desde otros puertos y hacer que la mercancia llega al cliente “lo antes posible y de la forma más barata”.
“El Puerto va a cambiar mucho, no va a crecer más a expensas de la Bahía de Santander y tiene que hacerlo utilizando lo que tenemos. Si hay que crecer en altura lo haremos para ser un puesto elástico y capaz de adaptarse a lo que va a venir en el futuro”, ha dicho Martín, que ha señalado que la instalación se adaptará a la logística actual, más rápida.
Además, Martín ha destacado que todas estas obras “en cada esquina” del Puerto se están ejecutando sin dejar de dar servicio y logrando marcar datos como los de 2021, en el que el se superó su récord histórico en tráfico de mercancías --que databa de 2005-- al consegur mover 6,7 millones de toneladas. En los primeros cinco meses de 2022, se ha contabilizado una bajada del tráfico total en un 2,8% con respecto al mismo periodo del año anterior.
A continuación, el monarca, acompañado por distintas autoridades, ha subido a bordo del buque-escuela 'Juan Sebastián Elcano', instalado en el muelle junto al Centro Botín, donde ha coincidido con la ministra de Defensa, Margarita Robles.
Allí ha saludado a la tripulación del barco y ha recibido aplausos de algunos centenares de santanderinos que se arremolinaban en el lugar y que han dedicado 'vivas' al rey y han podido saludarlo de cerca.