La Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander doblará este verano su actividad académica, mermada los dos años anteriores por la pandemia, con una programación ya totalmente presencial y que incluye 120 cursos y varios actos para celebrar su 90 aniversario.
Así, este verano será “especial” y, con el lema 'UIMP, 90 años anticipando el futuro', las actividades girarán en torno al análisis de lo que ha sido la universidad a lo largo de su historia para la ciudad, la región y el país, pero con la vista puesta en sus objetivos y retos de cara al futuro.
Además, los cursos y ponencias, en los que se espera que ya no haya restricciones COVID, abarcarán temas variados y de actualidad, como la despoblación, las ciudades del futuro, la salud mental y el suicidio en los jóvenes, la economía, la investigación, la neurociencia, la Constitución, la conservación del medio ambiente y la guerra en Ucrania.
Para ello pasarán por la UIMP diferentes expertos en todas las áreas, así como varios expresidentes de España y exrectores. Además, en esta efeméride se ha creado un Comité de Honor presidido por el Rey Felipe VI, que esperan que pueda visitar la universidad en algún momento de la programación.
Además, algunas actividades saldrán del Palacio de la Magdalena a otros espacios de la ciudad, como las exposiciones que se llevarán al Faro o a la Biblioteca Central; y se recuperarán las escuelas de la UIMP, que se pretenden extender a lo largo de toda una semana para que sean “un espacio de convivencia” para disfrutar dentro y fuera del aula.
Los Cursos de Verano 2022 han sido presentados este jueves por el rector, Carlos Andradas; la vicerrectora de Relaciones Institucionales y Programación de Actividades, Matilde Carlón; el secretario general de Universidades, José Manuel Pingarrón; el vicepresidente de Cantabria y consejero de Universidades, Pablo Zuloaga; y la alcaldesa de Santander, Gema Igual.
Todos ellos se han mostrado “ilusionados” con esta nueva etapa que comienza para la UIMP, ya que, además de recuperar la normalidad tras la COVID y celebrar sus 90 años, es el primer verano gestionado por el equipo de Andradas, que ha reconocido que “los problemas existen” en la institución, siendo el “más serio” el de personal, pero que ya ha mantenido reuniones con el Ministerio para corregirlos “dentro de las posibilidades”. “No nos van a impedir seguir adelante con la programación y trabajar con la máxima ambición”, ha asegurado.
Actividades
La vicerrectora ha avanzado algunos de los hitos destacados de la celebración del aniversario, cuyo “acto estrella” tendrá lugar el 23 de agosto, la “fecha emblemática” en la que hace 90 años se aprobó del decreto fundacional de la UIMP.
El acto se celebrará en el Palacio de la Magdalena y contará con el historiador Juan Pablo Fusi, que dará una visión de lo que ha sido la UIMP a lo largo de su historia. Asimismo, se hará un reconocimiento a los anteriores rectores, se proyectará un videomapping sobre la fachada del Palacio y actuará la Orquesta Sinfónica de la UIMP.
El acto de apertura de los cursos contará con la presencia de Rafael Yuste, profesor de Ciencias Biológicas de la Universidad de Columbia e ideólogo del Proyecto Brain, que abordará las nuevas dimensiones de la ciencia “con visión humanista”; y en la clausura estará la socióloga Saskia Sassen, Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales 2013.
Además, en este “año especial” se ha nombrado a tres honoris causa: el escritor rumano Mircea Cartarescu, que estará en Santander el 11 de julio; al escultor Jaume Plensa, que visitará la semana del 18 de julio La Magdalena, donde permanecerá desde un mes antes su escultura 'Carlota' acompañando la actividad del aniversario; y Luisa de Cola, que dará un curso a finales de verano sobre cuestiones “punteras” de química. Estos tres y los expertos que acudirán a la apertura y a la clausura ofrecerán cursos magistrales, a los que se sumará también el filósofo Byung-Chul Han.
Entre todas las actividades programadas para este verano, la vicerrectora ha destacado también un seminario sobre el jurista cántabro Eduardo García de Enterría o la presencia del teatro de La Barraca -que estuvo en la UIMP en el año 1933- a través de un curso y una exposición. Asimismo, coincidirán en la Universidad Lola Herrera y José Sacristán, ganadores del Premio La Barraca y del Premio de Cinematografía de la UIMP.
Igualmente, se mantienen iniciativas tradicionales como los 'martes literarios' con Guillermo Balbona, los miércoles del ciclo Escénicas en el Casyc y las veladas poéticas de los jueves de la mano de Carlos Alcorta, entre otras actividades.
En definitiva, se ha elaborado un programa “equlibrado” para un año con tres aspiraciones: “recuperar, avanzar y crecer”, ha sentenciado Carlón.
Por su parte, secretario general de Universidades ha señalado que la UIMP “no puede ser una universidad más” porque “no tendría sentido”, sino que tiene que tener un “valor añadido” que dé continuidad a esos 90 años de historia.
Por ello, ha apostado por que mire al futuro con intención de dar un servicio a la sociedad, algo que “con este rector y su equipo parece garantizado”. Mientras, se ha comprometido, desde el Ministerio, a apoyar su labor en los presupuestos y a acompañar las actividades desde el “pleno respeto a su autonomía”.
Al hilo, el vicepresidente cántabro ha destacado que, a pesar de sus 90 años, la UIMP tiene “más futuro que historia” y ha esperado que, una vez “superado el bache” de la crisis de la COVID, se pueda afrontar esta edición “con más ilusión que nunca”, volviendo a situar a Santander “en el foco de la noticia diaria”.
En la misma línea, la alcaldesa se ha mostrado “encantada” con el resurgir de la actividad, con iniciativas que “tocan todos los palos” y que “salen a la ciudad”, ya que no todas son en La Magdalena. Y es que, como ha dicho, la UIMP atrae a la ciudad a personas que “no tenían previsto acudir”.
También ha participado en la presentación de los cursos Ulises Culebro, el ilustrador del cartel de esta edición, protagonizado por el dibujo de un renacuajo. Como ha explicado, ha elegido este animal haciendo alusión a la teoría de la vida y partiendo de que la especie humana viene de microorganismos y del mar.
Por ello, ha seleccionado un renacuajo, que representa un “tránsito evolutivo entre el mar y la tierra”, al igual que la universidad simboliza la “evolución contínua” en las personas gracias al conocimiento.