Las mejores terrazas de Toledo para cenar al fresco

Pilar Virtudes

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Que Toledo tiene unas magnificas vistas lo mires por donde los mires no es un secreto y de eso se aprovechan las terrazas de la capital. Cómo resistirse a relajarse, refrescarse, tomar algo rico, disfrutar de compañía y ademas contemplar tan magnífico panorama.

Para que disfrute de todo esto, te descubrimos ocho terrazas a lo largo de la ciudad que merecen la pena para cenar o copear el fresco.

Azotea del Carlos V

Una de las terrazas desde donde contemplar una de las mejores vistas de Toledo mientras te tomas algo está en la azotea del Hotel Carlos V, a un paso de la plaza de Zocodover.

Dicen en su web que este “es un sitio para hablar de lo que quieras, para pensar inspirado por las vistas de fondo o para despedir el día en una ciudad que respira historia, para planear el día siguiente y para deleitarse con lo ya vivido en tu viaje”.

Allí se puede tomar sólo un refresco o picar algo. Recomendable reservar ya que tiene bastante demanda

Las Noches del Ángel

Sin duda una de las más bonitas de Toledo y además dónde también se puede degustar la cocina de Iván Cerdeño, chef con dos estrellas Michelin y tres soles Repsol en la ciudad.

La terraza está situado a orillas del río Tajo, con unas vistas únicas del casco histórico de la ciudad, con jardines de origen árabe. Se respira verano.

El menú degustación cambia cada semana y permite disfrutar de algunos retazos de la cocina que a lo largo del año Iván Cerdeño ofrece en el comedor principal del Cigarral.

Muy demandada, si no reservas seguro que no encuentras sitio pues la magnífica panorámica y la buena cocina son un atractivo seguro.

El Laberinto del Rey

Este lugar recuperado de Toledo detrás de la estación del tren ofrece una de las posibilidades de copear o cenar al fresco más interesante de la ciudad, sobre todo si vas con niños.

Esta finca donde crecen más de cinco mil olivos crea un espacio parecido a un laberinto que es apto para todos los públicos.

En su carta, una cocina tradicional con un toque de vanguardia y menú para los más pequeños. 

La Terraza del Miradero

Sobre el parquin de miradero y junto a la Colección Polo se encuentra esta terraza muy bien situada y que permite tomar una cerveza, picar algo o un coctel al atardecer.

Los viajeros que bajan por la cuesta de las Armas agradecen el oasis que ofrece esta terraza con buenas vistas, y donde suele correr el aire a la caída de la tarde, algo que en Toledo se agradece de verdad.

Venta de Aires

Un restaurante con historia, la Venta de Aires, tiene también una de las terrazas más concurridas de Toledo donde se han hecho ya famosos sus tardeos.

Un lugar donde poder tomar una copa, cenar y disfrutar de la música y de las noches de verano.

Casa Tabordo

También a orillas del Tajo este restaurante fundado en 1999 ofrece una de las mejores terrazas para cenar al aire libre.

Con una propuesta de cocina tradicional renovada, es una de las más concurridas de Toledo durante los meses de verano pues ofrece la cocina de siempre pero con el atractivo indudable de comer al fresco.

La Venta del Alma

No para cenar, pero para tomar una copa es uno de los sitios más deseados de la ciudad. Ubicado a un paso del Puente de San Martín, en el camino viejo que conduce desde Toledo a Polán, esta venta tradicional recuperada ofrece una terraza muy cuidada donde la paz y el frescor son su identidad.

Cigarral de Caravantes

Este hotel de tres estrellas ubicado en el inicio de la zona de los cigarrales en Toledo, es también es una opción interesante. Hasta su terraza con vistas al rio y a Toledo llega el rumor del agua. Además, se puede llegar andado en una agradable paseo desde el casco histórico, atravesando el puente de San Martín. Lo ideal es para una copa de vino al fresco.

Hacienda el Cardenal

A un paso de la puerta de Bisagra, este Hotel, ya un emblema de la ciudad, tiene una terraza entre murallas y rodeada de vegetación encantadora.

Ellos la denominan su rincón chill-out, en realidad es el complemento ideal para tomarse una copa después de la cena rodeado de piedras históricas y viejas hiedras.