Cambiar el ascensor de la vivienda, hacerla más accesible y segura, evitar que el calor se pierda por culpa de ventanas poco eficientes o cambiar la vieja caldera por otra que consuma menos.
Realizar este tipo de mejoras es posible durante los próximos meses gracias a dos tipos de ayudas que acaba de convocar el Gobierno de Castilla-La Mancha.
Ya se han publicado las convocatorias tanto del Plan de Vivienda como del Plan de Rehabilitación Energética de Viviendas ya existentes (PRE). Ambas son compatibles, de manera que sus beneficiarios podrían llegar a cubrir con las subvenciones hasta el 100% de la inversión realizada.
Este año la gestión puede realizarse a través de los colegios de arquitectos
Los interesados pueden gestionar las ayudas de forma directa o bien utilizando la opción, novedosa para el solicitante, que ofrece el Colegio de Arquitectos de la región en las cinco provincias.
Ana Teresa García es presidenta de la demarcación del Colegio de Arquitectos de Castilla-La Mancha en Albacete. “Estamos apostando por la rehabilitación integral de edificios como motor de recuperación económica y nos hemos puesto al servicio de la Administración y de los ciudadanos para facilitarles el acceso a las ayudas”, explica.
Desde esta semana está a disposición de los ciudadanos un grupo de arquitectos especialistas en gestión de ayudas y en obras de rehabilitación cuyos honorarios son subvencionables.
Estos profesionales realizarán tanto el proyecto técnico para cada caso, se ocuparán de tramitar las ayudas y de asesorar al solicitante para que, siempre que sea posible, la subvención alcance el 100% de la obra. “Actualizar el edificio o la vivienda supondrá una revalorización a la que ayudará la visión integral que tienen los arquitectos”, subraya esta profesional.
Emilio León es vocal del Colegio de Arquitectos de Castilla-La Mancha en la demarcación de Toledo y coordinará el programa de información y la bolsa de especialistas a disposición de los interesados en las ayudas en esta provincia.
“Estas ayudas serán motor económico por un lado y además son muy acertadas para la renovación del parque de viviendas regional y la mejora de la eficiencia energética”.
¿A que tipo de ayudas se puede acceder?
En la actualidad se puede acceder a dos tipos de ayudas destinadas a la rehabilitación de la vivienda a las que pueden acogerse los castellanomanchegos. Desde el Colegio de Arquitectos de la región indicarán en qué momento están activas cada una de las líneas.
Por un lado, las que tienen una vocación de mejora integral en eficiencia energética, sostenibilidad, accesibilidad y seguridad. Permiten desde la mejora de elementos comunes en edificios residenciales como ascensores, instalaciones de ventanas o cerramientos más eficientes o conservación de elementos comunes del edificio, entre otras muchas cosas.
“Los interesados pueden a acogerse a una o a varias de las tres líneas de estas ayudas”, detalla Ana Teresa García.
Estas ayudas pueden solicitarse hasta el 21 de diciembre de 2020, aunque el plazo podría ampliarse al menos dos meses más, según explican los arquitectos y también el Gobierno regional ha anunciado ya que ampliará el presupuesto destinado a este programa.
Por otro lado, están las ayudas que se ofrecen para la rehabilitación energética en edificios de viviendas o en alguna de ellas con el objetivo de reducir el consumo final de energía. Las hay de tres tipos: para mejorar la eficiencia energética de la envolvente térmica de la vivienda, para mejorar instalaciones como las calderas o para mejorar las instalaciones de iluminación.
Se trata de propiciar la sustitución de la energía convencional -es decir, no se subvencionan instalaciones a base de combustibles fósiles- por solar térmica, geotermia o biomasa o pasan por implantar soluciones de aerotermia e hidrotermia
En este caso, el plazo para solicitarlas estará abierto hasta el 31 de julio de 2021.
¿Quiénes pueden ser beneficiarios?
Los beneficiarios de las ayudas integrales a la vivienda (Plan de Vivienda) son los propietarios de edificios residenciales (pisos) tanto particulares como empresas o administraciones y empresas públicas, las comunidades de propietarios y las cooperativas.
Este tipo de ayudas solo son posibles para viviendas o edificios de viviendas construidas antes de 1996 y que cuenten con Informe de Evaluación del Edificio.
Si lo que se quiere hacer es mejorar la eficiencia energética (PRE), las ayudas están destinadas tanto a viviendas unifamiliares como a viviendas en edificios plurifamiliares y a edificios residenciales completos. Pueden pedirlas los particulares, comunidades de propietarios que gestionen edificios destinados a vivienda, empresas de servicios energéticos (ESE) o proveedores de servicios energéticos, comunidades de energías renovables y comunidades ciudadanas de energía y entidades locales.
De entrada, existe un requisito básico para acceder a las ayudas: la vivienda debe estar construida con anterioridad a 2007 y contar con Certificado de Eficiencia Energética.
Hay que recordar que estas últimas ayudas son compatibles y no excluyentes respecto a las primeras. “El hecho de contar con asesoramiento técnico garantiza más posibilidades de alcanzar la puntuación máxima de acceso a las ayudas del Plan de Vivienda al solicitante y que lleguen a tiempo y completas en el caso de las ayudas de rehabilitación energética”, explica Emilio León.
Para consultar los detalles de las ayudas a la rehabilitación energética se puede hacer click en este enlace.
Si lo que se desea es acogerse al plan integral de vivienda los detalles están en este enlace.