El Ayuntamiento de Guadalajara reafirma su posición de no autorizar la licencia para la construcción de la vivienda, destinada al duque del Infantado en uno de los torreones del emblemático palacio guadalajareño. Así lo ha comunicado la Junta de Gobierno local durante la reunión que ha mantenido este martes en la que ha decidido denegar de nuevo el permiso administrativo, necesario para que se ejecuten las obras del inmueble.
Jaime Carnicero, vicealcalde de Guadalajara, asegura que el Ayuntamiento desestima el recurso del Ministerio contra la denegación de la licencia “por entender que es contrario a la normativa urbanística de la ciudad”, según expresa el último informe de los técnicos municipales, al tiempo que afirma que “si Cultura prosigue con el proyecto de construir una vivienda para el Duque, deberá recurrir a la justicia ordinaria”.
La respuesta del Consistorio guadalajareño se produce, después de que la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos del Ministerio de Educación presentara el 28 de diciembre un recurso de reposición contra la decisión del Ayuntamiento de denegar el permiso administrativo para edificar el ‘pisito’ de lujo. En el documento de ocho folios remitido por Educación al Ayuntamiento se incide especialmente en la obligación de la Administración de cumplir con la Constitución. En este sentido, defiende, además, que la sentencia de 2009, que concede el derecho de habitación a Íñigo de Arteaga y sus descendientes, es previa a la modificación de la normativa urbanística de Guadalajara (POM), aprobada por el Gobierno municipal en el año 2000. Esta norma impide el uso privado de este edificio histórico, declarado Bien de Interés Cultural (BIC).
Desde la Plataforma Abraza El Infantado se muestran, por un lado, “satisfechos” con la resolución del Ayuntamiento y, por otro, “estupefactos” ante el recurso del Ministerio. Jorge Riendas, miembro de este colectivo afirma a eldiarioclm.es que “no tiene sentido una reclamación que va en contra de la legalidad y lo que pretende es que el Ayuntamiento conceda la licencia por encima de la normativa urbanística de la ciudad”.
Así mismo, este movimiento ciudadano asegura “no entender la actitud del Ministerio de invertir dinero público en un proyecto inútil e incompatible con la legislación municipal”. Y sospechan que detrás de la decisión del Ministerio, que “contradice” a la postura mostrada inicialmente a la plataforma en la reunión que mantuvieron en octubre, “haya podido influir el parentesco que une al actual Ministro de Cultura, Íñigo Méndez De Vigo, con el Duque del Infantado, Íñigo de Arteaga”.
Ante la nueva situación planteada, el colectivo solicitó en diciembre reunirse de nuevo con Cultura con el fin de conocer sus intenciones. Un encuentro que finalmente se producirá a partir del 23 de enero, según confirmó ayer el subdirector general de Museos Estatales a los miembros del colectivo.
En la misiva que este organismo ha remitido a Abraza el Infantado se justifica el retraso en la contestación a la plataforma ciudadana en “que el Ayuntamiento no nos remitió la documentación que explicaba los motivos por los que se denegaba la licencia y no ha sido hasta muy recientemente que recibimos el informe jurídico de la Jefa de Servicio de Urbanismo e Infraestructuras del Ayuntamiento, que motiva la denegación de la licencia y pudimos estudiarlo jurídicamente”. Cabe recordar que el Ayuntamiento de Guadalajara denegó la solicitud de licencia a Cultura el 14 de noviembre.
En la línea de mantener una interlocución directa con las distintas administraciones, la plataforma trata de cerrar también un encuentro con el duque del Infantado. “Seguiremos beligerantes en nuestra defensa de un uso público para el Infantado”, puntualiza Riendas. En esta protesta, Abraza el Infantado, cuenta, además, con el respaldo del Defensor del Pueblo, que ha admitido recientemente a trámite la petición en la que este colectivo Abraza le advirtió del “atropello que supone la ejecución de la sentencia judicial para la función pública que desempeña el palacio como museo”.
Después de que el Ayuntamiento haya desautorizado de nuevo la licencia, el Ministerio deberá recurrir al Juzgado Contencioso Administrativo, en el caso de que prosiga con su proyecto de edificar el “dúplex”, valorado en medio millón de euros, en el monumento renacentista. Ante esta eventual situación judicial, la plataforma no descarta presentarse como parte, según confirma Riendas a este digital.
Mientras tanto, el objetivo de esta asociación es continuar durante los próximos meses con su actividad informativa, a través de exposiciones en la Biblioteca y en el Archivo. Además, las sucesivas mesas redondas de debate que se celebrarán sobre el futuro del Infantado contarán presentan con la participación de directores de otros museos de España.
Proyecto contrario a la ley
El origen del conflicto se sitúa en una sentencia judicial de 2009 que concedió al actual Duque del Infantado el derecho de habitación ocasional en alguna de las estancias del inmueble histórico, emplazado en el centro de Guadalajara. El noble reclamó entonces al Ministerio de Cultura, titular del edificio, que satisficiera este derecho.
Como respuesta a esta demanda, el Gobierno encargó el diseño del proyecto, basado en la construcción de un dúplex de lujo de 400 metros cuadrados en el interior del antiguo Torreón del Archivo histórico de Guadalajara. La nueva edificación de carácter privado, según detallaba la resolución judicial, no debía interferir en la función cultural que desempeña el palacio como sede del Museo Histórico Provincial de Guadalajara.
Precisamente, la naturaleza cultural de este monumento ha sido la pieza clave sobre la que ha pivotado la reivindicación que este movimiento ciudadano ha llevado a cabo desde septiembre de 2017, en defensa del futuro de este símbolo del patrimonio local. En este sentido, la ordenanza nº 9 del Plan de Ordenación Urbana (POM), que cataloga al palacio como una parcela para equipamiento sociocultural, prohíbe la construcción de una residencia privada en el Infantado.
Una restricción de uso que fue decisiva para que el Ayuntamiento capitalino denegara por vez primera, en noviembre, la licencia de construcción de la vivienda al Ministerio por estimar que el proyecto incumplía con la normativa en materia de urbanismo, tal como reconoció el alcalde, Antonio Román. Ahora que el Ayuntamiento deniega por segunda vez la petición de licencia de obras al Ministerio, el conflicto podría derivar en un pleito contencioso-administrativo si el Gobierno decide recurrir la decisión del Consistorio arriacense.
Desde Abraza el Infantado y otras organizaciones políticas se propusieron como alternativas para cumplir con la sentencia judicial de 2009 reubicar la vivienda en otro edificio de la ciudad o bien compensar económicamente al Duque del Infantado. Estas opciones se ofrecieron, después de que Cultura descartara habilitar como residencia las antiguas estancias del edificio que sirvieron de vivienda a otros cargos de la biblioteca y del museo provincial, porque afectaban al normal funcionamiento del museo.
Por otra parte, el Gobierno de Castilla-La Mancha ultima el proyecto museográfico que se marca como objetivo ampliar la oferta cultural que en la actualidad presta el Museo Histórico Provincial de Guadalajara en el Palacio del Infantado, el de mayor antigüedad de España.