La consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, ha anunciado durante su visita al stand de Castilla-La Mancha en FITUR 2016 que el Gobierno regional va a elevar de 190 a 2.500 el número de plazas efectivas del Programa de Turismo Termal en 2016. Ha recordado que este tipo de turismo “mejora el envejecimiento saludable de las personas mayores manteniendo su calidad de vida, pero además genera riqueza y empleo en el ámbito rural de la región”.
La consejera ha señalado que potenciará el programa porque es un sector estratégico, primero por su beneficios para las personas mayores y en segundo lugar para la población de castilla-La Mancha por ser un yacimiento de empleo que fija población al territorio.
De este modo, la Consejería de Bienestar Social va a colaborar con la Asociación de Balnearios de Castilla-La Mancha, en primer lugar visibilizando las prestaciones y servicios que la asociación ofrece en sus establecimientos y en segundo lugar subvencionando las plazas en 2016 para recuperar el programa de termalismo social en Castilla la Mancha “que ha estado muy abandonado en estos últimos años”.
Aunque no ha podido concretar el presupuesto asignado a este programa ha recordado que se va a dar prioridad, porque “queremos recuperar el turismo termal y el turismo social. Queremos hacer una priorización presupuestaria para atender a estas personas que requieren una atención especializada”, ha añadido la consejera.
La consejera ha recordado que la estancia habitual en este tipo de establecimientos es de una semana, en que las personas mayores pueden compartir esa experiencia con otros mayores y los beneficios para la salud que se llevan es uno de los puntos fundamentales en la prevención de la dependencia.
En el Programa de Termalismo Social, durante el ejercicio 2015 de las 5.332 plazas ofertadas solo llegaron a ser cubiertas finalmente 190, frente a las 13.247 cubiertas en 2011 (de las 13.875 ofertadas).