Las catas de vino que está ofreciendo a largo de toda Castilla-La Mancha la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural a través de la Fundación Tierra de Viñedos y con la colaboración de la Interprofesional del Vino de España están doblando el número de asistentes con respecto a los datos de las ediciones anteriores de este programa.
Así, respecto al año pasado se ha duplicado el número de asistentes en muchas de las catas, principalmente en las capitales de provincia y las ciudades grandes como Talavera, Puertollano y Valdepeñas. Las más numerosas se han celebrado en Puertollano con 106 inscritos; Valdepeñas con 91; Villarrobledo con 131; Guadalajara con 102; Talavera de la Reina, con 82; y Albacete con 75 personas inscritas.
Así, según la directora de la Fundación Tierra de Viñedo, Diana Granados, “nuestra valoración es muy positiva sobre cómo se va desarrollando este año, tanto por el aumento del número de asistentes, como por el aumento de jóvenes que han participado de las catas”.
Tras el descanso en el mes de agosto, este programa que se hace realidad en virtud del acuerdo firmado entre la Consejería de Agricultura y la Interprofesional del Vino de España retoma este mes de septiembre las actividades con la primera cata que se ha celebrado en Azuqueca de Henares (Guadalajara). Además, el próximo 15 de septiembre se celebrará una cata en Cuenca, el 22 en Toledo y el 29 en Almansa.
El programa continúa en octubre con citas el día 6 en Ciudad Real, el 11 en Torrijos (Toledo), el 20 en Hellín (Albacete) y el 27 terminan las del mes en Tomelloso (Ciudad Real).
Además, está previsto que el 3 de noviembre se celebre cata en Tarancón (Cuenca) y el 10 en La Roda (Albacete).
Una de las novedades que se han incluido este año es la participación en las catas de miembros de las diferentes Denominaciones de Origen que acompañan al enólogo encargado de dirigir la cata para presentar la DO, así ilustran a los asistentes sobre los rasgos más característicos de la zona, tipos de uva, elaboración, territorio, con el fin de no sólo enseñar a catar sino profundizar en la cultura del vino.
Los vinos que se catan se maridan con tapas “en las que hay presencia también de otros productos agroalimentarios de Castilla-La Mancha con Denominación de Origen y acogidos a la marca Campo y Alma”, según ha señalado Diana Granados.