Contaminación y pérdida de peces: los peligros de las especies invasoras en los ríos

El investigador Alberto Maceda fue el encargado de abrir el nuevo ciclo de conferencias organizado por el Grupo de Estudio del Tajo de la Universidad de Castilla-La Mancha, 'Estado de conservación y medidas de gestión para los peces de los ríos mediterráneos'. Maceda usó sus conclusiones extraídas de su estudio con 13 cuencas españolas, los ríos mediterráneos. Esta experiencia, explica el docente, le ha permitido observar la situación de algunas especies del Tajo en otras cuencas.

“Todos los ríos mediterráneos tienen características naturales que los hacen comparables, tales como su régimen hidrológico, y que además comparten amenazas tales como la excesiva captación de agua, la contaminación y las invasiones por especies exóticas”, subraya

Entre las especies invasoras que el río “comparte” con otros se encuentra la anguila. Ahora bien, ¿cómo afectan estas especies a las nativas? “Las especies exóticas las desplazan por motivos como la depredación, como es el caso del siluro”, señala el profesor, quien recalca que las mismas prefieren quedarse en remansos lo que las atrae a embalses y presas. “Además de una amenaza para la diversidad nativa, la actividad de estas especies exóticas puede reducir el valor estético lagos creando aguas turbias, encarecer la potabilización del agua al eliminar a los organismos filtradores naturales e incluso pueden dejar sin aves una laguna”, advierte.

Es por esto que los efectos de las mismas pueden ser “catastróficos” para la conservación del patrimonio natural, pero también para los intereses humanos. Para las especies nativas, uno de los peligros es la llamada defaunación, que implica la ausencia de fauna. En el caso de perder aquellas especies “sensibles”, explica el profesor, se llega a un escenario que puede ser “peor” que la pérdida de animales, ya que los peces tolerantes “tienden a acumular contaminantes” y esto se puede transferir a sus depredadores.

En este caso, el problema de la contaminación se “magnifica” para todos, incluyendo los humanos. “Las consecuencias de la contaminación crónica, la mayoritaria en los ríos mediterráneos, es difícil de predecir”, explica Maceda, quien advierte que son efectos que pueden llegar a ser visibles a largo plazo o no suceder hasta que otro elemento active el “gatillo” y desencadene la tragedia. La solución está en el agua: “parece obvio, pero los ríos quieren agua. Arreglando esto tenemos mucho trecho andado”, afirma.

Para esta situación tampoco ayuda la Directiva Marco del Agua. ¿Por qué? Debido a que son peces con “pocas especies” de peces por tramo. “Desde un punto de vista de conservación, que detecten impacto sólo cuando se ha producido una drástica reducción de la abundancia de peces o incluso la desaparición de una especie nos da poco margen para la conservación”, señala. Por eso, asegura, hacen falta sistemas de alerta temprana, para poder “predecir” el cambio en vez de detectarlo.

Nuevo ciclo de conferencias

Un año más, el grupo de Investigación del Tajo de la Universidad de Castilla-La Mancha empieza su ciclo de conferencias alrededor de su principal objetivo: el río. Las conferencias se llevarán a cabo los últimos miércoles del mes, cada dos meses. Con la primera intervención, asegura Beatriz Larraz, coordinadora del grupo, se pretende continuar con la idea de la última conferencia de 2016, impartida por Graciela Gómez Nicola, 'Seguimiento y estado de conservación de los peces nativos del Tajo'. “Ahí se mostró el estado lamentable de las especies autóctonas en cuanto a conservación y número de ejemplares.

La segunda conferencia estará dictada por la directora técnica de la Fundación Nueva Cultura del Agua, Julia Martínez quien hablará del trasvase desde el punto de vista murciano donde vive y trabaja. En concreto, hablará sobre el déficit hídrico que existe en la región así como a la sobreexplotación de los recursos. Una tercera intervención hablará de las aves y los nuevos hábitats que se han creado a raíz del control de los caudales. Miguel Ángel Hernández, de Ecologistas en Acción, será el encargado.

La misma Larraz junto a Nuria Hernández y Enrique San Martín, hablarán en octubre de un análisis de los impactos socio económicos del trasvase en la cabecera del río, avalando con cifras la situación de los pueblos. Finalmente, David Uribaerrea hablará de la dinámica de los ríos Tajo y Jarama, cómo ha cambiado debido a la disminución de sus caudales.

El grupo también forma parte del Consejo de Toledo por el Tajo, que celebró esta semana su última reunión. Al intervenir también en este organismo, los investigadores han recibido la propuesta de incluir dos conferencias “más generalistas” acerca de la situación del río, con la idea de acercar a los vecinos de la ciudad al estado del río.