El Corral de Comedias de Almagro celebra su 390 aniversario

El Corral de Comedias de Almagro celebra este miércoles el 390 aniversario de su construcción. El acto, organizado por el Ateneo de Almagro, tendrá lugar a las 20:30 horas en el propio espacio, situado en la plaza Mayor número 18 de la ciudad manchega, y la entrada será libre hasta completar el aforo.

El acto estará coordinado por José Antonio Prieto Juárez, presidente del Ateneo de Almagro y contará con las intervenciones de Concepción García de León Álvarez, profesora de historia e investigadora de la historia del Corral de Comedias de Almagro; Luis Molina López, coordinador de la Sección de Teatro del Ateneo de Almagro y Director del CELCIT; Enrique Herrera Maldonado, profesor de historia del arte de la Facultal de Letras en la Universidad de Castilla-La Mancha; Javier Navarro de Zuvillaga, director y escenógrafo y catedrático emérito de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid; Diego Peris Sánchez, doctor arquitecto y promotor del Proyecto de rehabilitación urbanística 'Almagro a Plena Luz'. El acto estará amenizado por el piano de Alfonso Candelas López-Villalta.

El Corral de Comedias

El Corral de Comedias de Almagro es el único ejemplo de teatro del siglo XVII de esta tipología, íntegramente conservado ya que sigue manteniendo en la actualidad la estructura original de los corrales de comedia del Siglo de Oro.

Fue redescubierto en 1954 y declarado Monumento Histórico Artístico solo un año después. El día 27 de Marzo de 1955 recuperó su actividad teatral con la representación de dos entremeses de Miguel de Cervantes.

Durante los años 50 el Corral de Comedias albergaba en su interior una taberna llamada Posada de las Comedias. El tabernero que por entonces la regentaba decidió acometer una obra de mejora, sin imaginar siquiera que en uno de los rincones de su taberna encontraría un tesoro. En el interior de una de las pajareras situadas en la parte izquierda del patio, donde hubo un fuego manchego, el tabernero encontró una baraja española pintada a mano. Tras poner el hallazgo en conocimiento del Ayuntamiento, se supuso que allí pudiera haber existido un Corral de Comedias y se iniciaron las obras.

Gracias a las diversas acciones iniciadas en 1954 para su conservación y restauración, el edificio se mantiene intacto. La última intervención fue llevada a cabo entre los años 2003 y 2004 que, entre otras cosas, permitió la modernización tecnológica del espacio, que actualmente tiene un aforo de 281 espectadores.

El Corral de Comedias fue el punto de partida y sigue siendo el eje central en torno al cual gira el Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro. Los textos clásicos brillaron de nuevo bajo las estrellas de su espectacular patio, desde que en 1978, la Universidad de Castilla-La Mancha decidiera celebrar unas Jornadas de Teatro Clásico acompañadas de tres representaciones.

Este emblemático edificio barroco es, sin duda, la joya más preciada de todos los espacios históricos que la asombrosa Villa de Almagro pone a disposición del Festival. Es incomparable la emoción que provoca, traspasar la puerta del Corral de Comedias y entrar en el patio, rodeado de los 54 pies rectos, de madera color almagre, sobre los que el edificio se sustenta. El visitante contemporáneo puede pisar su zaguán empedrado, donde cantos rodados dibujan la Cruz de Calatrava, como lo hicieron las damas y caballeros de antaño. Al alzar la vista o al recorrer el espacio, será capaz de imaginar todas las historias de capa, daga y espadas que tuvieron lugar dentro de este recinto mágico. Historias divertidas o amargas de gente llana y de comerciantes, de militares, poetas y mosqueteros, ocurridas durante siglos enteros delante y detrás de los palcos laterales de los dos pisos.

El Corral de Comedias fue construido en 1628 por Leonardo de Oviedo, en el patio de un antiguo mesón, motivo por el cual sus elementos arquitectónicos responden a su doble funcionalidad, como mesón y como teatro. Su estructura posee connotaciones con las casas islámicas y con las casas labriegas de finales del XVII, como puede observarse en las galerías abiertas al interior del patio con ventanas de dependencias, que servían de aposentos durante la representación teatral y a su vez de alcoba a los viajeros.

Actualmente alberga una intensa actividad teatral a lo largo de todo el año y es, sin duda, uno de los puntos turísticos más aclamados del panorama cultural español. Un espacio absolutamente único, dicen los organizadores del Festival de Teatro, que desde el siglo XVII hasta el XXI ha visto palpitar, en sus entrañas vivas, la fiesta del teatro.