Ya se ha hecho oficial la renuncia de María Dolores de Cospedal a hacer oposición en Castilla-La Mancha desde el Parlamento regional. Aunque seguirá presidiendo el PP autonómico, la expresidenta ha renunciado a su escaño en el Parlamento castellano-manchego para concurrir a las elecciones generales como número uno de la lista del PP por Toledo. La también secretaria general del PP ha insistido en varias ocasiones en que seguirá ejerciendo la oposición en la comunidad autónoma, y esta semana subrayó que no es necesario estar “sentado” en las Cortes para ello, poniendo como ejemplo al actual presidente, Emiliano García-Page, que fue candidato sin ser diputado regional.
Tal y como han señalado numerosos miembros del PP regional, la intención de Cospedal es compatibilizar su escaño en el Congreso y la Secretaría General del PP con las labores de oposición. Es decir, mantener, como cuando era presidenta de Castilla-La Mancha sus responsabilidades entre Madrid y Toledo, algo que ha sido objeto de críticas por parte de la oposición desde que Rajoy la eligiera como su número dos en el partido.
Lo que no puede mantener, al no ser diputada regional, es la presidencia del Grupo Parlamentario. En este puesto la sustituirá Ana Guarinos, quien ya fue portavoz del Grupo Parlamentario y cuya polémica gestión al frente de la Diputación de Guadalajara en la pasada legislatura ha sido notoria. De hecho, tras las elecciones municipales tuvo que renunciar a seguir presidiendo la institución provincial y ser vicepresidenta, en favor de José Manuel Latre, para que el PP no perdiera, en virtud de su acuerdo con Ciudadanos, el gobierno de la Diputación.
Las críticas a su labor han estado determinadas la judicialización de muchas de sus decisiones. Hace unos días, el PSOE pidió la dimisión de Guarinos de todos sus cargos institucionales después de que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha haya ratificado la condena por vulneración de derechos fundamentales que le fue impuesta por el juzgado de lo contencioso-administrativo número 1 de Guadalajara.
Guarinos fue condenada el pasado mes de enero por violación de los derechos fundamentales recogidos en el artículo 23 de la Constitución. La sentencia consideraba que había vulnerado el derecho de participación política del Grupo Socialista de la Diputación al negarse a autorizar una visita a la Escuela de Vela de Alocén, dependiente de la Institución provincial, que venía siendo solicitada desde un año y medio antes por la entonces portavoz de este grupo político, María Antonia Pérez León. Decidió recurrir ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, que ahora acaba de ratificar la condena, e incluso ha condenado a la Diputación a pagar las costas del juicio.