La ecología es uno de nuestros principales intereses y es el centro de este blog: cambio climático, medio natural, desarrollo sostenible, gestión de residuos, flora y fauna, contaminación y consumo responsable, desde el punto de vista de periodistas, expertos, investigadores, especialistas y cargos públicos. También editamos la revista 'Castilla-La Mancha Ecológica'.
Glaciares, fauna, temperaturas: así se percibe el cambio climático en la Antártida
No solo en el Ártico son visibles los efectos más inmediatos del cambio climático. Aunque en la Antártida, a primera vista, solo podemos observar enormes extensiones de hielo, el calentamiento global ya se siente allí de forma progresiva, tal y como han certificado las bases científicas que trabajan de manera constante, originarias de varios países. Dos de ellas son españolas y hasta allí se desplazó el año pasado el físico y consultor de la Organización Meteorológica Mundial José Miguel Viñas, quien nos ha contado algunos de esos efectos con motivo de su participación en la inauguración de la Semana de la Naturaleza organizada por la Facultad de Ciencias Ambientales y Bioquímica de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM).
Viñas ha dado a conocer ante los asistentes su vivencia personal de este viaje para poder divulgar cómo los científicos estudian en la Antártida las consecuencias del cambio climático en base a factores que son un fiel reflejo del ecosistema como el hielo y la fauna. El primer dato no deja lugar a dudas: la temperatura en las dos bases españoles es de las que más se han incrementado en los últimos años en este continente. “La tendencia al alza es muy clara”, advierte.
“Nada más llegar, no se percibe que la Antártida esté sufriendo un impacto claro del cambio climático, pero una vez que observas todos los datos, queda más que claro que allí ya se notan sus consecuencias. Los glaciares están perdiendo hielo de un año a otro, y animales como los pingüinos están cambiando sus hábitats al ser el agua más cálida. El cambio es más lento que en el Ártico pero no deja de notarse”, explica.
De manera especial, José Miguel Viñas elogia el trabajo que allí realizan todas las bases científicas. Destaca que el trabajo de los investigadores, sean del país que sean, contribuye al conocimiento general mediante “redes globales que suman” y que constituyen un “conjunto de piezas dentro de un puzzle” del que se pueden extraer las mismas conclusiones: que el cambio climático está con nosotros y hay que luchar para mitigarlo.
Cada vez habrá menos “escépticos”
Por todo ello, se ha mostrado confiado en que cada vez haya menos “escépticos” con esta cuestión. “Hay sectores a los que no les gusta que tengamos que cambiar nuestro modelo de consumo o nuestras fuentes de energía y que siempre pondrán en entredicho estos cambios, pero la realidad del cambio climático ya es incuestionable. Estamos en una fase cálida que tiene bastante recorrido, y por parte de la comunidad científica debemos seguir haciendo llamamientos para mitigar sus efectos. Si no, las consecuencias serán peores. Las evidencias científicas son las que son y quien las discuta, caerá en el ridículo”.
Es el motivo principal por el que este experto considera que la divulgación debe primar la comunicación de los científicos para llegar a la sociedad. “No podemos descuidar esa labor, y por eso algunos, como divulgadores, nos consideramos un eslabón entre el trabajo que se realiza en sitios como la Antártida y en otros muchos, y la ciudadanía, que debe conocer los resultados de esas investigaciones”.
Durante su intervención previa, titulada 'La ciencia que se hace en la Antártida', el también responsable de @Divulgameteo ha descrito la Antártida como “el continente más extremo (frío, seco, alto y ventoso)” y “el laboratorio natural de la Tierra” y se ha referido a las limitaciones impuestas para su preservación por el Tratado Antártico de 1959, que solo permite el establecimiento en el continente con fines pacifistas y para la promoción de la investigación científica.
Además, ha explicado cómo trabajan durante el verano austral las bases españolas, fundadas en los años 80, y cómo los satélites revelan una progresiva acción erosiva del hielo debido a corrientes submarinas de agua menos fría. “Si se desestabiliza la Antártida subirá el nivel del mar”, ha dicho.
La charla de José Miguel Viñas ha inaugurado la semana de actividades prevista por la Facultad de Ciencias Ambientales y Bioquímica para celebrar el Día Mundial de la Naturaleza, que este año se conmemora bajo el lema 'Vida subacuática: para las personas y el planeta'. Además del alumnado universitario, están convocados estudiantes de los IES Montes de Toledo de Gálvez (Toledo), Alonso de Ercilla de Ocaña (Toledo), Las Salinas de Seseña (Toledo), Juanelo Turriano de Toledo, Vicente Cano de Argamasilla de Alba (Ciudad Real), María Zambrano de Ciudad Real y Juan Bosco de Ciudad Real.
El programa incluye talleres y un concurso fotográfico, así como varias charlas en las que investigadores de la Facultad darán a conocer su trabajo. Así, el profesor de Zoología y Conservación Biológica José Luis Yela hablará este martes sobre posibles soluciones a la crisis de la biodiversidad, y la profesora Ana María Rodríguez Cervantes explicará distintos aspectos relacionados con la contaminación del aire.
Más programación
El físico de la Tierra e investigador del Instituto de Ciencias Ambientales (ICAM) Enrique Sánchez Sánchez ofrecerá el miércoles la charla 'El cambio climático antropogénico: hechos científicos, incertidumbres y efectos e impactos en las próximas décadas'. El jueves, la profesora Olga Viedma hablará sobre la aplicación de nuevas tecnologías como la teledetección y el LIDAR al estudio de los incendios forestales. Finalmente, el viernes, el químico analítico Francisco Javier Guzmán ofrecerá una charla sobre química y medioambiente.
Además, hasta el 1 de marzo puede visitarse en el edificio Envases de Cartón la exposición fotográfica 'Fotociencia', una iniciativa del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) para acercar la ciencia y la tecnología a la sociedad a través de la fotografía científica.
No solo en el Ártico son visibles los efectos más inmediatos del cambio climático. Aunque en la Antártida, a primera vista, solo podemos observar enormes extensiones de hielo, el calentamiento global ya se siente allí de forma progresiva, tal y como han certificado las bases científicas que trabajan de manera constante, originarias de varios países. Dos de ellas son españolas y hasta allí se desplazó el año pasado el físico y consultor de la Organización Meteorológica Mundial José Miguel Viñas, quien nos ha contado algunos de esos efectos con motivo de su participación en la inauguración de la Semana de la Naturaleza organizada por la Facultad de Ciencias Ambientales y Bioquímica de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM).
Viñas ha dado a conocer ante los asistentes su vivencia personal de este viaje para poder divulgar cómo los científicos estudian en la Antártida las consecuencias del cambio climático en base a factores que son un fiel reflejo del ecosistema como el hielo y la fauna. El primer dato no deja lugar a dudas: la temperatura en las dos bases españoles es de las que más se han incrementado en los últimos años en este continente. “La tendencia al alza es muy clara”, advierte.