La ecología es uno de nuestros principales intereses y es el centro de este blog: cambio climático, medio natural, desarrollo sostenible, gestión de residuos, flora y fauna, contaminación y consumo responsable, desde el punto de vista de periodistas, expertos, investigadores, especialistas y cargos públicos. También editamos la revista 'Castilla-La Mancha Ecológica'.
Las tazas desechables son una mala idea
No me gustan nada los 'take away', los productos para llevar, tazas desechables o como los quieras llamar. Y de todos ellos, las tazas o vasos de café son los que más odio. Puede que sea porque creo que tomarse algo calentito en una cafetería es un gran placer (y si lo haces en buena compañía, más aún) y tomarte un café por la calle me resultaría hasta desagradable.
No le veo ninguna ventaja a tomarte un café mientras vas andando y, en el caso de que sea invierno, que empieces a sentir principios de hipotermia en la mano que llevas fuera. Vamos, que habiendo tazas y cucharas de verdad, que se quiten los palitos y las tazas de usar y tirar.
Si además a todo lo anterior le sumas la cantidad de residuos que generan estos envases, puedes darte cuenta de lo innecesarios que son. Las tazas de usar y tirar nos cuestan dinero a todos ya que su gestión incrementa el coste global de la gestión de residuos. Debido a este coste extra, este tipo de productos debería tener un gravamen adicional que compensase estas pérdidas.
Ya sabéis que me encantan las infografías, así que ahí va otra.
Reciclaje de tazas desechables
La gestión de las tazas desechables es complicada. Si piensas que se reciclan fácilmente, estás ante uno de los errores más comunes. La tapadera es de plástico, pero la taza, a diferencia de lo que se cree, no es solo papel. En su interior tiene un recubrimiento de polietileno para mejorar su consistencia pero que dificulta, por no decir que imposibilita por completo, la tarea de recuperación de materiales.
Los palitos que se suelen usar para remover el café son de plástico y de madera, y rara vez se depositan en el contenedor adecuado. Muchas veces acaban en el suelo o en el alcantarillado.
Las alternativas
En este caso no puede ser más sencillo: ir a la cafetería, disfrutar tranquilamente y sin prisas de un buen café o cualquier bebida caliente y relajarse un buen rato sin generar apenas residuos. Suena bien, ¿verdad?
Si lo que prefieres es disfrutar de un café mientras paseas, puedes llevar tu propia taza para llevar. Verás que hay muchos modelos, la mayoría de ellas permiten mantener la bebida caliente durante un largo rato, así que si quieres puedes llevar tu café desde casa. Si quieres puedes ir a tu cafetería habitual para que rellenen tu vaso reutilizable, que no te de vergüenza hacerlo, seguro que ellos están encantados.
¿Cuáles son tus trucos para tomar café sin residuos? Si te ha gustado, no dudes en compartirlo.
No me gustan nada los 'take away', los productos para llevar, tazas desechables o como los quieras llamar. Y de todos ellos, las tazas o vasos de café son los que más odio. Puede que sea porque creo que tomarse algo calentito en una cafetería es un gran placer (y si lo haces en buena compañía, más aún) y tomarte un café por la calle me resultaría hasta desagradable.
No le veo ninguna ventaja a tomarte un café mientras vas andando y, en el caso de que sea invierno, que empieces a sentir principios de hipotermia en la mano que llevas fuera. Vamos, que habiendo tazas y cucharas de verdad, que se quiten los palitos y las tazas de usar y tirar.