Prosiguen los coletazos en Castilla-La Mancha por las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón, en defensa de la ganadería extensiva y sostenible. Hoy José Luis Escudero, consejero de Desarrollo Sostenible del Ejecutivo de Emiliano García-Page, ha pedido “no demonizar” a la ganadería intensiva, la asociada a la proliferación de macrogranjas, pero también ha defendido la moratoria que a este respecto respecto va a aprobar el Gobierno autonómico con el objetivo de estudiar todas las instalaciones de más de 2.000 cerdos que se proyecten desde la actualidad hasta diciembre de 2024, para evitar su proliferación y ver sus efectos en el medio ambiente.
Escudero ha arremetido en primer lugar contra el PP por “utilizar una polémica estéril que no aporta nada” para “intentar ser el foco de atención”. “No voy a contribuir a darle mayor altavoz a algo que es un bulo inventado por el PP y que no contribuye a ninguna dinámica positiva para los intereses de Castilla-La Mancha”, ha recalcado preguntado por esta cuestión. Después ha añadido: “Lo que es macro es la hipocresía del PP”. Ha hecho especial mención al hecho de que el presidente del PP regional, Paco Núñez, arremetiera, cuando era alcalde de Almansa (Albacete), contra las macrogranjas junto con otros dirigentes del PP, mientras ahora “hacen apología de ser los abanderados del campo”.
Por ello, ha remarcado la importancia de “colocar los hechos frente a las imposturas, la tergiversación y la hipocresía”. “Nosotros lo tenemos muy claro, creemos en un modelo de ganadería sostenible y por eso apostamos por la ganadería extensiva y vamos a seguir defendiendo a nuestros ganaderos y al campo de Castilla-La Mancha, lo cual no hizo el PP cuando gobernaba”, ha afirmado el consejero de Desarrollo Sostenible.
La moratoria, “un valor añadido”
En este sentido, se ha referido a la moratoria de las macrogranjas que las Cortes regionales aprobarán el próximo jueves y que durará hasta diciembre de 2024 “para mejorar todo lo relativo a la regulación de la ganadería intensiva”. “No se puede demonizar a la ganadería intensiva, hay zonas de pastos donde no se puede dar, pero en otras sí”, ha asegurado, subrayando que, de hecho, esta moratoria “va a ayudar a ganadería intensiva” porque supondrá “un valor añadido” en cuanto al tratamiento de purines, de olores o de posibles contaminaciones de suelo y agua.
“No queremos atacar a nadie, al contrario, queremos velar por el sector primario, por los pueblos. Queremos estos tres años para planificar y organizar el sector. Queremos estudiar los suelos, las aguas, junto con la universidad y el sector científico, para ver el estado real y posibles afecciones y para apoyar a las organizaciones sociales y a las entidades locales”, ha proseguido.
Finalmente, Escudero ha concluido solicitando que esta cuestión no se afronte “desde el conflicto y el ruido”, sino “desde la sensatez y tomándonos el tiempo suficiente para hacer que Castilla-La Mancha tenga un sector ganadero del cual se pueda seguir sintiendo orgullosa”.