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Una investigadora toledana desarrolla en Australia una terapia contra el Alzheimer

Castilla-La Mancha vuelve a ser noticia fuera de nuestras fronteras, en esta ocasión, por un avance científico. Ha sido una toledana, Carmen Fernández, la que ha hecho que la comunidad autónoma destaque en actualidad científica. Y todo gracias a que ha desarrollado una terapia combinada en la lucha contra el Alzheimer en la Universidad australiana de Tasmania. Los resultados ya se han patentado y también se han iniciado los trámites de negociación con dos grandes farmacéuticas internacionales.

El objetivo ahora es centrarse en los datos preliminares conseguidos y poder lograr más avances que permitan a los investigadores acercarse más a la cura de esta enfermedad, ha señalado la investigadora. “No hay que irse fuera para que reconozcan tu trabajo, aunque estoy convencida de que los españoles nos queremos menos de lo que se quieren en otro países”, apunta Carmen Fernández.

Es importante destacar que los estudios se han centrado en pacientes que debido a distintas cargas genéticas, son candidatos a desarrollar esta enfermedad. “Esta cifra supone solo el 10% total de los pacientes, ya que el 90% restante es considerado de tipo esporádico, y sus causas se deben a factores ambientales, alimenticios o genéticos, porque lo que son más difíciles de investigar”, asegura Carmen, Licenciada en Biología y doctora en Ciencias Químicas.

Gracias a la investigación que ha desarrollado ha podido demostrar el efecto beneficioso de las terapias combinadas para el tratamiento del Alzheimer. “Los resultados de la investigación llevada a cabo demuestran que el tratamiento mejora y reduce el daño cerebral causado por la enfermedad”. Además Fernández ha señalado que este trabajo no sólo ampara los avances clínicos en Alzheimer, sino que trata de promover el conocimiento de la enfermedad, la diagnosis temprana y la integración de los pacientes y familiares en la sociedad.

Eso sí, la investigadora toledana lamenta que “desgraciadamente”, todavía no hay una cura efectiva frente al Alzheimer a pesar de los “innumerables” estudios de investigación realizados. “Los únicos fármacos que existen son aquellos destinados a tratar los síntomas de esta demencia”. De hecho, asegura que la diagnosis temprana de la enfermedad, es muy compleja por la falta de síntomas evidentes en fases iniciales.

El Alzheimer es un tipo de demencia que se caracteriza por la pérdida progresiva de la función cognitiva, lo que afecta gravemente a la capacidad del paciente para realizar sus tareas cotidianas y llevar una vida independiente.

Una vida dedicada a la investigación

Carmen Fernández es licenciada en Biología, doctora en Ciencias Químicas y especializada en Bioquímica, Biología Molecular y Biomedicina. Realizó su tesis doctoral en la Universidad de Castilla-La Mancha. Su carrera de investigación se ha centrado en la comprensión de los mecanismos patológicos básicos asociados a trastornos neurológicos, y en el desarrollo de estrategias terapéuticas dirigidas a patologías neurodegenerativas.

En 2007, tras finalizar sus estudios de doctorado se incorporó al Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, donde durante cinco años trabajó principalmente en dos grupos de investigación: en la investigación translacional, particularmente en el desarrollo de tratamientos y terapias génicas dirigidas a la neuroprotección y en la reparación de lesión medular espinal.

“Durante el 2012 se produjo una situación de precariedad laboral, y aunque yo tenía mi trabajo, los contratos eran cada vez más precarios y no me permitían trabajar en unas condiciones dignas, y decidí solicitar distintas posiciones en el extranjero tanto en Europa como en Australia”, explica Fernández. En febrero de 2013, tras obtener un contrato internacional, se incorporo al 'Wicking Dementia Research and Education Centre', un centro de excelencia científica en Australia centrado en demencias.

Carmen Fernández comenzó su carrera en el Hospital Nacional de Parapléjicos, pero no investigando sobre el Alzheimer si no en el desarrollo de terapias farmacológicas centradas en lesión medular espinal y cuando se incorporó a este centro fue cuando comenzó a trabajar en proyectos relacionados con demencias, particularmente con Alzheimer. 

Tras cuatro años investigando en el 'Wicking Centre', Fernández ha vuelto a Toledo con un proyecto de colaboración con 'Vickers' y actualmente, como miembro honorario de la Universidad de Tasmania, ha solicitado múltiples proyectos a nivel internacional y nacional, para poder continuar con este proyecto de investigación en España.