El proyecto de Ley de Economía Circular llegará a la Cortes regionales la próxima semana

El Consejo de Gobierno del próximo martes tomará en consideración el proyecto de Ley de Economía Circular de Castilla-La Mancha y lo enviará a las Cortes. Así lo ha asegurado el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, este viernes en Albacete.

Tal y como ha señalado el consejero, una vez que el proyecto de Ley sea trasladado al Parlamento regional, será la mesa de las Cortes quien califique el proyecto de Ley “y estamos a la espera de ver lo que sucede”. Y es que, hay dudas sobre si finalmente la ley conseguirá el visto bueno en el Parlamento autonómico a causa, según apunta Martínez Arroyo, de las disputas internas de Podemos Castilla-La Mancha. “ Hay dudas de que el Grupo Parlamentario de Podemos vaya a aprobar los proyectos de ley del Gobierno”, una situación que ha criticado porque “no tiene sentido que un grupo político que está en el gobierno, no apoye proyectos de Ley que plantea el Gobierno”.

Hace unos días el propio consejero ponía en cuarentena la aprobación de esta y de otras leyes previstas para este último periodo de sesiones en las Cortes regionales y acusó al diputado de Podemos, David Llorente, de obstaculizarla, como represalia a la negativa del Gobierno regional de tramitar la Ley la de Minería de Tierras Raras auspiciada por Podemos. Esta semana, Llorente negaba tal extremo y aseguraba que “hay tiempo” (y también dinero en el Presupuesto) antes de que se disuelvan las Cortes, para debatir y aprobar la Ley de Minería de Tierras Raras, así como otras normativas como la Ley de Evaluación Ambiental o la propia Ley de Economía Circular.

De hecho, la Ley de Economía Circular es una de las grandes apuestas del Ejecutivo de Emiliano García Page para esta legislatura y con la que se pretende “un cambio social y de modelo productivo, económico y de consumo”, según muestra el proyecto de Ley. Esta ley “nos va a hacer mejores”, ha señalado el consejero que asegura que ayudará a generar unos 30.000 puestos de trabajo “y mucha riqueza vinculada al aprovechamiento de todo lo que ahora no forma parte de la cadena de economía”.

Con esta Ley el Gobierno quiere que el uso eficiente de los recursos sean los “ejes vertebradores de todas las políticas públicas y de los nuevos sectores económicos” y busca generar condiciones óptimas para fomentar la aparición de nuevos nichos de negocio. A nivel ambiental, el impacto fijado quiere traducirse en una reducción del consumo de materias primas y de la generación de residuos, en aras del medio ambiente, el clima, la diversidad biológica y la salud humana.

Además, el proyecto de Ley, tal y como ha señalado Martínez Arroyo, incluye tasas para la gestión de residuos que no se reciclen y que vayan a vertedero, “y exige fianzas para las empresas que generen residuos en Castilla-La Mancha para que, en casos de problemas ambientales, sean esas empresas y no los ciudadanos los que se hagan cargo de los costes de esos problemas ambientales”.

Economía social para frenar la despoblación

Martínez Arroyo ha participado en Albacete en la clausura del seminario sobre 'Economía y Emprendimiento Social' organizado por la Universidad de Castilla-La Mancha donde ha trasladado a los estudiantes asistentes “la necesidad” de que ellos, una vez finalizados sus estudios universitarios, se decidan a desarrollar su actividad profesional en el medio rural de Castilla-La Mancha. “Necesitamos gente con capacidad de innovación y emprendimiento” también para luchar contra la despoblación.

Una pérdida de habitantes que, desde el Gobierno de Castilla-La Mancha se está combatiendo con “la apuesta por los profesionales y los jóvenes del sector agrario y ganadero” a la que se une la apuesta por las marcas de calidad que vinculan los productos al origen, “siempre rural en Castilla-La Mancha” gracias a lo que se beneficia al conjunto de la economía del entorno rural.

Además, tal y como ha dicho Martínez Arroyo, “hemos puesto a disposición de los 29 Grupos de Desarrollo Rural 136 millones de euros a lo largo de toda la legislatura para ”proyectos que generan empleo y riqueza“ y dando libertad a que sean los propios habitantes del medio rural los que decidan cómo distribuir estas ayudas en función de la opción de desarrollo por la que se decanten (turismo, agricultura..).

La Economía Social puede ser una de las herramientas que ayuden a frenar la despoblación en el mundo rural, en esos pueblos que se están quedando vacíos en varios puntos de la región donde la falta de oportunidades laborales mueve a los más jóvenes a partir para no volver. ¿Cómo? “Lo social está muy relacionado, en el ámbito de la economía llamamos la rentabilidad y la productividad”, ha dicho el profesor de Economía de la UCLM, Gregorio López Sanz, organizador del seminario sobre 'Economía y Emprendimiento Social'. Y es que este tipo de economía puede fijar población. “Hay cada vez más gente que piensa que el progreso no puede ir destruyendo los saberes tradicionales y por tanto la economía Social, las formas comunitarias de entender las relaciones humanas y con la tierra son importantes y queremos ponerlas en valor”.