Lo que se iba a convertir en una gran fiesta de 'Nochevieja Universitaria' (al igual que se hace ya en muchas ciudades, siendo la más famosa la de Salamanca, como despedida de los universitarios antes de las fiestas de Navidad) en Albacete acabó siendo nada (con fecha pendiente según los organizadores de una nueva fecha). La macrofiesta organizada por una discoteca fue suspendida el día de antes por el Ayuntamiento por no cumplir las normativas.
Todo comenzó hace más de un mes: en el Palacio de Congresos de la ciudad (está apartado en las afueras, no cerca del núcleo urbano) se iba a organizar para el 18 de diciembre esta fiesta, en un local donde el Ayuntamiento reconoce un aforo máximo de 3.308 personas. El interés fue aumentando en la ciudad unida a la gran oferta de los organizadores (por ejemplo colocaban buses para desplazarse desde varios puntos de la ciudad al Palacio de Congresos, por la lejanía al centro, durante toda la noche y hasta las 7 de la mañana) lo que llevó a que la semana de antes ya se hubieran vendido más de 3.000 entradas. Los organizadores auguraban un gran éxito.
Sin embargo desde Urbanismo del Ayuntamiento señalan que la petición para organizar la fiesta se realiza el 13 de diciembre, 5 días antes. Por un lado señalan la falta de tiempo para valorar toda la información y por otro la escasez de la documentación: faltan datos relativos a la evacuación del lugar, permisos especiales para esos horarios, para toda la actividad y de los bomberos señalando plan de actuación en caso de emergencia. Algo que hizo que el Ayuntamiento diera orden de no permitir la fiesta bajo ningún concepto.
No obstante la organización ni lo intentó tampoco, entrando ya en las distintas versiones de cada uno. La organización añade que tenía toda la documentación en su plazo correspondiente y toda la información solicitada; el Ayuntamiento lo niega. Entre medias 3.000 personas con entradas compradas a las que la organización les ha pedido paciencia ya que han asegurado que buscarán un nuevo lugar y fecha para la celebración del evento, si bien aquellas personas que pidan la devolución del dinero pueden hacerlo sin problema.
Los dos lados han dado su versión de los hechos si bien el Ayuntamiento ha querido ser muy precavido en la organización de la fiesta para que en ningún momento se pudiera producir alguna circunstancia peligrosa. Han sido conservadores en las medidas a tomar (por otra parte por ley) si bien faltan por estudiar si esos documentos realmente fueron entregados a tiempo o no, como señalan cada una de las partes.
Era el primer año que esta celebración se extendía también a Albacete, ciudad con un alto índice de universitarios y estudiantes de otras ciudades en la capital albaceteña. A pesar del cambio de fecha, el pasado 18 de diciembre era, junto al final del curso en junio, las dos fechas en las que los estudiantes suelen “tomar las calles” de sus ciudades donde se forman para concluir el periodo escolar.