Llega a los tribunales el caso de las 170.000 aves de la “macrogranja de los horrores” de Guadalajara
Esta semana se celebra la comparecencia judicial de las partes con motivo de la querella criminal de la ONG Equalia contra esta instalación de la localidad de Yebra, a la que también acusa de delitos contra la salud pública y la seguridad alimentaria
Arranca el proceso penal contra la denominada “macrogranja de los horrores” de Guadalajara. Así es como la ONG Equalia ha denominado a la instalación de la empresa Gran Avícola C. Padrino ubicada en la localidad de Yebra a la que ha denunciado por posibles delitos de maltrato animal con agravante de muerte y varios presuntos delitos contra la salud pública y la seguridad alimentaria. Este jueves se celebra la comparecencia judicial de las partes en el juzgado de instrucción número cuatro de la capital alcarreña, tanto de la ONG como de la representación legal de la instalación denunciada.
La querella criminal que ha dado lugar a este proceso y a la que ha tenido acceso elDiarioclm.es, se dirige contra los responsables legales de la empresa y también contra los trabajadores de dicha explotación a los que, según constató la ONG, se apreció realizando los presuntos actos de maltrato animal y contra la seguridad alimentaria.
Equalia presentó esta querella en octubre de 2021 tras publicar un reportaje de investigación sobre la macrogranja, donde alega que presuntamente hubo “maltrato continuado” de más de 170.000 aves al menos durante dos años, según las imágenes difundidas.
La denuncia incluye también varios presuntos delitos contra la salud pública y la seguridad alimentaria por las imágenes difundidas que muestran plagas de ratas paseando entre las aves y de ácaros medrando en los huevos destinados a consumo. La ONG también pudo constatar la convivencia de aves muertas y con otras vivas y hacinadas, unas encima de otras, en condiciones extremas de inanición y deshidratación.
Estas condiciones motivaron que al menos catorce gallinas acabaran muriendo tras varios días de intensa agonía y sin recibir ningún tipo de atención veterinaria, a pesar de estar gravemente enfermas. Para probar este estado de salud, Equalia acompañó la denuncia de un informe veterinario donde se ponía de manifiesto el lamentable estado de los animales de la granja.
Además, la denuncia incluye también a varias personas de la macrogranja que, durante este mismo periodo comprendido entre 2020 y 2021, aparecen en las grabaciones golpeando, pateando y lanzando vivas a las gallinas desde una escalera al suelo, ocasionándoles graves lesiones que pusieron en peligro su vida y acabaron con el fallecimiento de al menos catorce animales tras un gran sufrimiento.
Ahora, la organización exige que se haga justicia y se dicte “una condena ejemplar” para esta macrogranja. Al hilo de ello, también pide al Gobierno que acelere la transición a un modelo libre de jaulas en la ganadería para 2030 y que intensifique las inspecciones en las explotaciones para poner fin a estas “granjas de los horrores” en nuestro país.
Futura legislación europea para cría, etiquetado y sacrificio de animales
A raíz del inicio de este proceso judicial, Equalia recuerda que la Comisión Europea publicará este año una nueva propuesta legislativa que transformará la normativa sobre bienestar animal en el transporte, cría, etiquetado y sacrificio de animales destinados a consumo. La nueva normativa podría prohibir las jaulas a partir de 2030 para gallinas ponedoras, cerdas, terneros, conejos, codornices, patos y gansos, entre otros animales destinados al consumo humano. El objetivo es eliminar progresivamente las jaulas en todas las granjas de la UE, erradicando instalaciones como las que se pueden ver en este reportaje de investigación publicado por Equalia.
Según Julia Elizalde, mánager de campañas en Equalia ONG: “Nuestra organización pide una condena ejemplarizante para esta ”macrogranja de los horrores“ de Guadalajara, que presuntamente ”ha maltratado de forma constante y sistemática, en ocasiones hasta la muerte“.
“Desde Equalia alertamos de que urge la necesidad de efectuar inspecciones más rigurosas a estas granjas productoras de animales de consumo para evitar que se conviertan en granjas de los horrores. También pedimos a la sociedad y a las empresas un compromiso para que no se cuelen en nuestra cesta de la compra huevos de gallinas criadas en jaulas, como ocurre por ejemplo en el supermercado Consum, con los productos que contienen huevo como ingrediente. No podemos permitir más casos de maltrato animal ni que se vuelva a poner en riesgo la salud de las personas por los presuntos delitos de seguridad alimentaria que se juzgan”, concluye Elizalde.