El presidente de la Federación Empresarial Toledana (FEDETO) ha apuntado al “pesimismo económico y laboral” en el escenario del último trimestre del año 2022, que se extenderá “con total seguridad” al primer trimestre de 2023.
Así lo ha comentado durante la Asamblea General Ordinaria de la organización empresarial. Javier de Antonio Arribas acusa al Gobierno de España de no haber tomado “medidas” desde el año 2021 “para paliar la grave situación que se cierne en el actual panorama económico de nuestro país”.
En su opinión, los “críticos” indicadores económicos no se han generado como como consecuencia de la guerra de Rusia contra Ucrania. “Si bien es cierto que poco a poco se capilarizan sus negativas consecuencias en la actividad económica de España”, matizaba.
El presidente de FEDETO tilda de “medidas populistas” las practicadas por el Gobierno central “además de electoralistas y por tanto desesperadas”. Se muestra en desacuerdo con los impuestos y da cifras: la recaudación del primer trimestre de 2021 subió un 15% con respeto al primer trimestre de 2020. En 2022 ha subido, “de momento”, más de un 20% con respecto a 2021.
“La presión fiscal en los últimos cuatro años ha subido 4% en relación al PIB, mientras que la renta media en España ha caído un 2% y el gasto público ha crecido un 20%”, destaca el presidente de la patronal toledana.
Fue su primer discurso tras se nombrado presidente en FEDETO para sustituir Ángel Nicolás, el actual presidente de la Confederación de Empresarios de Castilla-La Mancha. “El gobierno y los sindicatos insisten en que no hay que bajar los impuestos porque hay que redistribuir la riqueza”, comentaba. En su opinión, “nuestra riqueza se ha devaluado más de 10 puntos por efecto de una inflación que no deriva de que las empresas ganen más, sino de que los costes de producción han subido estratosféricamente como consecuencia de los altos costes de las materias primas y de la energía”.
“Desde 2020, por supuesto en 2021, pero también en 2022, los empresarios lo tenemos todo en contra y muy poco a favor”, defendía.
“En nuestra provincia, el 73% de las empresas ha experimentado un aumento adicional en sus costes de producción” y eso lo achaca al encarecimiento de las materias primas y de la energía. “Sólo algo más del 41% lo han trasladado a sus precios finales”, asegura, con la “clara caída” de los márgenes empresariales que supone.
“Nos esperan un otoño y un invierno muy difíciles en los que la incertidumbre y el deterioro económico van a ser la tónica general” y reclama una “bajada de impuestos a las empresas para aliviar sus costes y contribuir a amortiguar los precios, pero el gobierno no hace caso”, criticaba.
La negativa a subir salarios “como proponen los sindicatos”
“Todos debemos asumir los costes de la crisis, no sólo las empresas a base de impuestos y cotizaciones sociales”, decía el presidente de FEDETO, rechazando la propuesta sindical de subir salarios, a pesar de que considera “mas necesaria que nunca la negociación”.
“Entre los sindicatos y la patronal hay una distancia infinita en cuanto al modelo que debe seguirse para aplicar las subidas salariales”. Asegura “los empresarios no nos negamos a subir los salarios, simplemente nos oponemos a hacerlo tal y como proponen los sindicatos, porque lo que proponen provocaría un incremento de costes desproporcionado y daría lugar a nuevas subidas de precios”. En definitiva, apunta, supondría convertir la inflación en estructural.
“Y, para colmo, los sindicatos se manifiestan en la sede de FEDETO y en las sedes del resto de patronales provinciales de España, para culparnos a los empresarios de esta situación”, lamentaba para volver a cargar contra el Gobierno de España. “ Las medidas adoptadas, los anuncios improvisados y el desprestigio de nuestras instituciones son cánceres que hacen que España tenga una imagen que no genera confianza en el exterior”.