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¿Puede la cultura científica ser 'indie' y alternativa? Así lo demuestra un proyecto pionero

¿Es posible explicar física, química, matemáticas, arqueología o virología a todos los ciudadanos y que al mismo tiempo que lo entiendan, se diviertan? Sí que puede serlo, y no a través de grandes espectáculos televisivos ni adornos, sino mediante métodos inclusivos y entretenidos que además consigan hacer de la ciencia una disciplina accesible y cercana. Así lo quieren demostrar los creadores del proyecto ‘Ciencia a la Carta’, nacido en Toledo al calor de las jornadas Pint of Science a las que Castilla-La Mancha se unió la pasada primavera de la mano de científicos de la Universidad regional y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). El éxito fue tremendo y allí, un grupo de personas decidió aprovechar esa buena acogida y realizar un proyecto original, propio y sostenido en el tiempo.

Esa idea ha sido bautizada como ‘Ciencia a la Carta’ pero ya no es un evento de la Universidad ni está ligado a ninguna institución. Son 25 personas, entre profesores, técnicos, científicos y voluntarios, que quieren acercar esta disciplina a la sociedad a través de charlas y conferencias gratuitas. No tienen financiación ni ánimo de lucro, por lo que se trata de una iniciativa “independiente”, “alternativa” y pionera, según afirma una de sus promotoras, Arantxa Castaño.

¿Y por qué ‘a la carta’? Porque también se ofrecen a locales culturales y de ocio, a bares y restaurantes, a centros escolares o a hospitales para llevar sus talleres, así como a cualquier tipo de colectivo. Con esta disponibilidad y espíritu abierto se completan los tres pilares sobre los que se asienta el proyecto: la divulgación científica, la ciencia inclusiva y la visibilidad de la mujer científica. En este último caso, consideran que la historia les ha negado a muchas mujeres el lugar que merecen por cuestión de su género.

Rigurosidad, sí. Diversión, también

“Es un proyecto alternativo porque detectamos hace meses que existe un interés creciente por la ciencia que sin embargo no está cubierto. Nosotros queremos hacerlo hablando de ciencia rigurosa, y al mismo tiempo hacer que esa divulgación sea amena, divertida y asequible, para todos los públicos, y que cualquiera pueda entender”. Lo harán a través de charlas y talleres, todos gratuitos, que pueden entender personas sin base científica previa. “Se trata de entretenimiento, pero sin perder el rigor y sin caer en la ciencia-espectáculo que de alguna manera y por tendencias televisivas, está pervirtiendo el objetivo de la divulgación”, añade Castaño.

Algunos ejemplos de este acercamiento a la sociedad podemos encontrarlos en las charlas y talleres que tienen programados: ‘Química y cocina: dime qué comes y descubriremos la reacciones’, por Raquel Fernández; ‘Menestra de planetas’, por Leonor Chico; ‘Para postre, menos plato y más zapato’, por Ignacio Ara Royo’; y ‘Postre Virtual. Nuevas tecnologías y patrimonio cultural’, por Ángela Crespo y Sergio Isabel Cota. Y además todos los actos contarán con accesibilidad e inclusión: se interpretarán en lengua de signos y cualquier documento audiovisual que sirva de soporte irá subtitulado.

Desde septiembre, ‘Ciencia a la Carta’ cuenta con un espacio de divulgación en la Cadera SER de Castilla-La Mancha todos los domingos, pero ahora ya ponen en marcha su recorrido fuera de las ondas. La puesta de largo será el 15 de noviembre –día de San Alberto Magno, patrón de la Ciencia- en el espacio socio-cultural ‘Urbana 6’ de Toledo.  Enrique Royuela, virólogo conquense y promotor de la plataforma ‘Principia.io’, hablará sobre criaturas de leyenda con posible base científica en su ponencia ‘Virus y Zombis’. Royuela es también comisario de la exposición ‘Ciencia en acogida’ del Palacio de Cibeles de Madrid, donde vincula a científicos exiliados durante la Guerra Civil y la Segunda Guerra Mundial con toda la problemática actual de los refugiados y de la divulgación científica.

De hecho, ‘Ciencia a la Carta’, explican los promotores, recoge uno de los fundamentos de Principia: la ciencia no es solo “la bata y la bota” sino que forma parte de la cultura, está en todas partes y es importante para comprender el entorno.

“Sin entender la ciencia, la sociedad no puede apoyar las demandas de los científicos cuando piden más inversión en investigación”. Precisamente, la importancia de la divulgación encuentra su mejor exponente en la reciente comisión que a tal afecto ha creado Crue Universidades Españolas. También la próxima Ley de Investigación de Castilla-La Mancha contiene referencias expresas al ámbito divulgativo. “Ahora no es preceptivo para los científicos pero sí es algo que se está valorando cada vez más”.

Este proyecto de divulgación quiere además ir más allá. Entre sus objetivos está apoyar iniciativas de ámbito nacional o supranacional, con la presencia de sus actividades en el Día de la Mujer y la Ciencia que se celebra en febrero o en la Noche de los Investigadores. Ante todo, destacan la gran cantidad de gente que está trabajando de forma desinteresada en esta iniciativa, lo que demuestra un “interés colectivo cada vez mayor por la ciencia y por su visibilidad”.