Cospedal se enfrenta como candidata a los cambios de Gobierno anunciados por Rajoy
Los medios fueron muy rápidos al otorgar a María Dolores de Cospedal la sucesión automática de la cartera que José Ignacio Wert dejará a finales de mes para partir a París. El País, entre otros medios, ha situado a la actual presidenta en funciones de Castilla-La Mancha como la mejor colocada para ser la próxima ministra de Educación, aunque otros nombres han aparecido también dentro de las posibilidades. Los jóvenes ‘populares’ Pablo Casado y Lucía Figar se han barajado también para este nuevo cargo, si bien Mariano Rajoy se ha limitado a señalar que habrá cambios en el Gobierno este mes de junio.
Sin embargo en la sede de Génova, donde muchos no se han mostrado partidarios de que la política ocupe un puesto tan importante, se barajan nombres de políticos menos expuestos a los medios y los escándalos, caso de Lucía Figar y de Pablo Casado. De hecho la opción de Figar durante unos días fue la más valorada por las características de la política: madrileña, consejera de Educación en la Comunidad de Madrid y además joven, que calza dentro de la nueva imagen que quiere transmitir el partido de cara a las generales. Figar cumplía los requisitos perfectos para ocupar cinco meses esa cartera (prácticamente de manera interina), pero solo hasta hace unos días, cuando fue imputada por la justicia en la trama Púnica. La 'popular' dimitió finalmente de su cargo en el Gobierno de la Comunidad de Madrid.
La imputación de Figar se reveló como un escollo para optar al Ministerio de Educación, al que María Dolores de Cospedal seguiría aspirando. Las fechas de elección del nuevo ministro son perfectas para la ahora presidenta en funciones de Castilla-La Mancha: el 16 de junio debe cerrarse el posible pacto entre PSOE y Podemos que convertiría a Emiliano García-Page en el nuevo presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Además, por una propia ley aprobada por María Dolores de Cospedal, no percibiría ningún sueldo como diputada en la región. A pesar de ello, la ahora presidenta en funciones quiere mantenerse firme en su idea de seguir en Castilla-La Mancha. El diario La Razón ha publicado que Cospedal mantiene como idea aguantar los cuatro años en la oposición, incluso aunque no tenga sueldo, a pesar de que en los últimos años la actual presidenta en funciones ha declarado ganar más de 100.000 euros al año.
En el partido se manejan cambios que afectarían a las vicesecretarías en un primer momento, pero no a Cospedal que hasta las elecciones generales aguantaría como secretaria general, a pesar de los retractores dentro de su misma formación que han pedido a Rajoy un cambio y un lavado de imagen.