Las lluvias de las últimas semanas no han conseguido mejorar la situación agónica que atraviesa el río Segura cuyas reservas de agua están, a día de hoy, 41 puntos por debajo de la media española. El total de los embalses de la cuenca del Segura están esta semana al 31,5 % de su capacidad, es decir, embalsan un tercio del agua que podrían llegar a albergar.
Las cifras son muy similares en los pantanos de la cabecera, la mayoría de ellos en la provincia de Albacete, donde Camarillas adelanta al resto de embalses registrando 163,182 hm³, una cifra que supera por poco la mitad de su capacidad de almacenaje.
Un porcentaje parecido tiene el Talave, que con el 47%, cuenta, a fecha 20 de junio, con 16,799 hm³ almacenados. Le sigue el Cenajo, que está al 37% de su capacidad y esta semana embalsa 163,446 hm³. La peor cifra es la que arrojan los datos del pantano de la Fuensanta, que está lejos de albergar el agua que puede. Y es que este embalse apenas tiene hoy una cuarta parte las reservas que su capacidad le permiten y apenas llega a 54,379 hm³.
Prorrogado el Decreto de Sequía
Si bien es cierto que las lluvias dejan una imagen en el conjunto de las demarcaciones muy diferente a la de años anteriores, también lo es que la vertiente mediterránea se ha visto menos beneficiada por las precipitaciones que el norte del país. Además, esta semana los pantanos de la cuenca del Segura han perdido cerca de 1 hm3 de agua. Sea como fuere la demarcación del Segura es la de menor nivel de reservas del país.
Los datos han llevado a la Confederación a prorrogar el decreto de Sequía ya que, a pesar de que el aumento en las aportaciones y las reservas durante los últimos meses han permitido que el Índice de Estado Global de la Cuenca pase de Emergencia a Prealerta, ya se observa una desaceleración en esta mejora. Prorrogar el decreto de Sequía supone seguir aplicando medidas excepcionales para paliar los efectos de la sequía hasta el 30 de septiembre de 2019.