Los sindicatos destacan la “precariedad persistente” en el empleo y piden acelerar los procesos de vacunación

elDiarioclm.es

5 de enero de 2021 13:04 h

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El año 2020 ha finalizado con 186.273 personas en situación de desempleo en Castilla-La Mancha, unos datos “malos” para los sindicatos de la comunidad autónoma y también para el Partido Popular. Todos exigen que se adopten medidas adicionales para frenar la destrucción de puestos de trabajo en la comunidad autónoma, entre ellas la aceleración de los procesos de vacunación, mientras que el Gobierno regional reconoce estos datos negativos pero ve “síntomas positivos” para la recuperación económica de la comunidad autónoma.

Para CCOO los datos de paro registrado “siguen la senda de la precariedad” que ha marcado el empleo de Castilla-La Mancha desde hace años, “a lo que hay que sumar los efectos negativos de la pandemia”. “El perfil del empleo de Castilla-La Mancha está muy marcado por la precariedad y todo lo acontecido en 2020 no ha contribuido a cambiarlo. Ahora estamos en un momento de crisis que requiere cambios y esto supone una oportunidad para el empleo de calidad que debe ser un elemento irrenunciable de cara al futuro”, afirma la secretaria regional de Empleo y Políticas Sociales de este sindicato, Mª Ángeles Castellanos.

“En la disputa constante de la riqueza, no pueden seguir perdiendo quienes con su trabajo están generando esta riqueza aún en tiempos de crisis. Reforzar el empleo y sus condiciones es una garantía para avanzar hacia un futuro sostenible y sólido”, añade al respecto. CCOO estima que el impacto de la pandemia en el desempleo alcanza las 20.000 personas, en base a la serie histórica.

En esta misma línea valoran las cifras desde UGT. “No puede haber recuperación si no hay unas garantías de protección de la salud de los ciudadanos. Es fundamental incrementar el ritmo de vacunación y poner para ello los medios que sean precisos”, recalca. Al mismo tiempo, este sindicato pide prorrogar el acuerdo de los ERTE que termina el 31 de enero, “un acuerdo que debe servir para evitar más despidos”.

Con el objetivo también de mantener el empleo y avanzar en la recuperación económica y social, “otra de las principales reivindicaciones pasa por la derogación de la reforma laboral de 2012, marcando las bases para construir empleo de calidad, estable y mejor retribuido”, pone de manifiesto Raúl Alguacil, miembro de la Gestora de UGT Castilla-La Mancha.

Por su parte, CSIF interpreta que la agricultura, con la campaña de cosecha de aceituna, ha mitigado el impacto negativo que se ha producido en todos los sectores, pero igualmente subraya que el desempleo ha subido en todas las provincias y que el paro femenino representa el 63% y la contratación temporal el 93,5% por ciento.

Un año que se cierra “con precariedad y excesiva dependencia de procesos primarios”

“El 'annus horribilis' marcado por la pandemia de coronavirus se cierra con precariedad, estacionalidad y con excesiva dependencia de los procesos primarios que provocan acentuadas subidas y bajadas en la empleabilidad”. Según añade, la recuperación pasa por controlar la pandemia de coronavirus, y para ello “es preciso acelerar el proceso de vacunación y aumentar al máximo el número de profesionales de ámbito sanitario para hacer frente a la creciente presión asistencial”.

Desde el Gobierno de Castilla-La Mancha, la viceconsejera de Empleo, Diálogo Social y Bienestar Laboral, Nuria Chust, ha reconocido que los datos del paro no son positivos ni en la región ni en el conjunto del país: “Vuelven a evidenciar el impacto de la crisis sanitaria en nuestro mercado laboral”. Pero ha señalado algunos “síntomas positivos que nos hacen mantener la confianza en la recuperación económica de nuestra región, como el hecho de que Castilla-La Mancha sea la comunidad autónoma que mejor ha soportado los efectos de la crisis sanitaria en el empleo”.

No es esta la visión del presidente regional del PP, Paco Núñez, quien ha calificado de “muy preocupantes” los datos en un mes en el que suele haber contrataciones y que ahora “se ha vuelto terrible”. Se ha referido especialmente al sector de los Servicios, que “está sufriendo tantísimo” por la pandemia y que “requiere cuanto antes del apoyo y ayuda del Gobierno”.