La revolución digital en las aulas está generando un cambio de paradigma en el modelo y el uso de herramientas educativas. Así, muchos colegios están sustituyendo los libros de texto por tabletas digitales con la intención de buscar nuevas fórmulas de aprendizaje en el alumnado. En Castilla-La Mancha, el Gobierno regional ha incorporado el pilotaje del proyecto ‘Carmenta’ este último curso escolar (2018/2019), en el que han participado 80 centros educativos de toda la región y que se doblarán el que viene -160 centros-.
De cara al próximo curso escolar, y de forma voluntaria, los centros educativos han tenido la posibilidad de acogerse a este proyecto que se desarrolla en algunas asignaturas -fundamentalmente troncales, como matemáticas, lenguaje, ciencias naturales o ciencias sociales-, tal y como hizo el CEIP 'Adolfo Martínez Chicano' de Las Pedroñeras (Cuenca).
Aunque el proyecto 'Carmenta' sí va a estar en pilotaje en el centro educativo de esta localidad desde el próximo mes de septiembre, lo hará solo en 5º de Educación Primaria y tras un final de curso polémico en el que un centenar de padres y madres solicitaron por escrito la paralización del proyecto e incluso 47 familias amagaron con cambiar de centro a sus hijos a un colegio de la localidad vecina de El Pedernoso.
No obstante, la directora provincial de Educación en Cuenca, Mª Ángeles Martínez, señala a este medio que la polémica “ya se ha solventado” y que finalmente los familiares que solicitaban cambiar de centro “han renunciado” a ello y, por tanto, sus hijos estarán inmersos -unos 80 alumnos y alumnas- en este proyecto el próximo curso escolar.
Martínez apunta que, tras la negativa de las familias que llevan a sus hijos al colegio pedroñero a que se implantaran las tabletas digitales, acudió al municipio conquense junto al director general de Programas, Atención a la Diversidad y Formación Profesional de la Consejería de Educación, Amador Pastor, para “hablar con las familias y el equipo directivo, para escuchar sus preocupaciones y explicar que este tipo de proyecto novedoso está funcionando bien y no hay que tenerle miedo ya que no genera solo una forma de trabajar sino que complementa también el uso del libro de texto”.
“Quizás los cambios pueden asustar un poco al principio pero es una metodología activa y estamos en una era digital en la que el alumnado ya no aprende de la misma manera”, señala la directora provincial de Educación al tiempo que resalta la necesidad de “preparar al alumnado a saber utilizar estos medios digitales y evitar posibles peligros”. Martínez añadía también que, en referencia a las ayudas que pudieran requerir las familias para la adquisición de las tabletas, será “igual que con los libros de texto. Aquellos alumnos que necesiten ayuda la van a tener igual”.
Falta de consenso, ciberseguridad o incidencias de las tabletas, preocupaciones de las familias
En el escrito presentado por el centenar de padres y madres, en el que solicitaban la paralización del proyecto a la Consejería de Educación, Cultura y Deportes, apuntaban que la puesta en marcha de un proyecto de estas características “debería ser consensuado y voluntario” y que, en cambio, ellos conocieron su aprobación el pasado mes de abril,“50 días después de que lo aprobara el Consejo Escolar”.
El mencionado organismo es el que tiene la decisión final para aprobar la implantación del proyecto, como así reflejaron en una votación para la que, según los firmantes del escrito, avisaron al AMPA -representado en el Consejo Escolar- con solo tres días de antelación. Así, al “carecer de información” sobre el proyecto, el AMPA se abstuvo en la mencionada votación y la dirección del centro educativo se comprometió a pasar una encuesta sobre la aceptación de 'Carmenta' a los padres y madres del alumnado, como así hizo a principios de junio y en la que “el 90%” rechazó que se llevase adelante, generando así su petición de paralizarlo.
En el escrito, al que ha tenido acceso este medio, también rebatían que “la inversión en licencias digitales que se tendrá que hacer anualmente” al igual que mostraban su preocupación por el control parental de las mismas. Dicen que tampoco se determinaba a cargo de quién correrá el servicio técnico u otros inconvenientes que pueden ocurrir y echan en falta alguna evaluación de los resultados después de que otros centros ya se han hayan incorporado al programa este curso.
Menos de un 30% de participación en otra encuesta planteada
Tras el revuelo generado. el centro escolar habilitó una nueva encuesta el pasado 26 de junio en la plataforma PAPÁS -a través de la que se comunican con los familiares del alumnado- para las familias del alumnado de 1º a 4º de Educación Primaria. La participación en la misma fue del 29,5%, “una participación escasa para la importancia planteada”, señalaba la dirección del colegio en el escrito que realizó a los padres y madres para dar a conocer el resultado de la misma, en la que también pudieron participar mediante votación presencial en un urna instalada en el centro educativo.
De esa participación, el 62,4 % volvió a votar en contra de la implantación del proyecto, que extrapolando los resultados a la totalidad de familias supone un 18,5 % del total. Un muestro “muy pequeño y poco significativo” sobre un asunto que finalmente aprobó de nuevo el Consejo Escolar, el órgano colegiado de gobierno.
Posteriormente, convocaron a los familiares para ofrecerles la información necesaria relativa a la implantación de esta iniciativa del Gobierno regional. Además, el colegio está orientando a los padres y madres sobre la compra de las tabletas, que podrían realizar de forma conjunta y para las que tendrán que adquirir después las licencias necesarias. Con ellas, podrán consultar los libros de texto que los alumnos de 5º de Educación Primaria de Las Pedroñeras no tendrán que cargar a sus espaldas a la vuelta de las vacaciones de verano.